Las principales ONG dedicadas a la conservación de la Naturaleza, con representación en el Consejo Asesor de Medio Ambiente, WWF/Adena, SEO/BirdLife, Greenpeace, Ecologistas en Acción y Amigos de la Tierra, exigen el desbloqueo por parte del Ministerio de Industria del borrador de Real Decreto sobre Tendidos Eléctricos peligrosos para la avifauna. Según cálculos del Ministerio […]
Las principales ONG dedicadas a la conservación de la Naturaleza, con representación en el Consejo Asesor de Medio Ambiente, WWF/Adena, SEO/BirdLife, Greenpeace, Ecologistas en Acción y Amigos de la Tierra, exigen el desbloqueo por parte del Ministerio de Industria del borrador de Real Decreto sobre Tendidos Eléctricos peligrosos para la avifauna.
Según cálculos del Ministerio de Medio Ambiente los tendidos eléctricos provocan cada año la muerte a 25.000 aves, aunque las organizaciones conservacionistas estiman que esta cifra infravalora seguramente lo que ocurre en realidad. Muchas de las especies afectadas se encuentran amenazadas de extinción, muriendo ya sea por colisionar en vuelo con los cables o al electrocutarse cuando se posan en apoyos especialmente peligrosos. De hecho, los accidentes con la red eléctrica vuelven a ser la primera causa de mortalidad no natural para especies como avutardas y distintas rapaces: en 10 años, se contabilizaron 200 águilas perdiceras y 80 águilas imperiales muertas directamente por electrocución.
Conscientes de este grave problema, el Ministerio de Medio Ambiente, las Comunidades Autónomas y las compañías eléctricas, llegaron a consensuar un texto con la intención de aprobarlo como Real Decreto, intentando poner fin a la pérdida constante e insostenible de aves protegidas. Durante la anterior legislatura se cumplieron todos los trámites necesarios, contando con el visto bueno tanto de la Comisión Nacional de Protección de la Naturaleza como de la Comisión Nacional de Energía. Así, la aprobación del Real Decreto parecía inminente.
Sin embargo, de forma inexplicable y a pesar de las continuas promesas, con la llegada del nuevo Gobierno el texto volvió al Ministerio de Industria, que ya lo había valorado positivamente con el anterior Gobierno, quedándose entonces bloqueada su aprobación en sus despachos. WWF/Adena, SEO/BirdLife, Greenpeace, Ecologistas en Acción y Amigos de la Tierra exigen por tanto a este Ministerio, que agilice la aprobación del proyecto de Real Decreto terminando con la injustificable demora actual. Por su parte, solicitan también al Ministerio de Medio Ambiente un mayor compromiso con este proyecto legislativo, y que se cumplan definitivamente las promesas que se han repetido a lo largo de 2005.
Desde el mes de noviembre de 2004, y mientras el borrador de Real Decreto se paseaba por los despachos ministeriales, han muerto al menos 27 águilas imperiales, una cifra insoportable para cualquier especie en peligro de extinción. Resulta inaceptable que el Estado español reciba millones de euros para la conservación de muchas especies amenazadas, y sin embargo, no sea capaz de llevar a cabo sencillas medidas a su alcance. El proyecto de Real Decreto propone medidas técnicas concretas para que los tendidos eléctricos sean seguros para las aves, así como ayudas económicas para que los titulares de las líneas eléctricas puedan modificar en determinadas zonas los tendidos problemáticos ya existentes.