Traducción del inglés para Rebelión de Carlos Riba García
Convención de Basilea
La Coalición por la basura ecológica (EWC, por sus siglas en inglés) de Filipinas, una red ambiental sin fines de lucro integrada por más de 140 grupos de interés público, ha hecho un llamamiento el primer ministro canadiense Justin Trudeau para que trate de resolver un escándalo de exportación de basura de Canadá a Filipinas.
En una carta enviada al primer ministro Trudeau, la Coalición señala que a pesar de las promesas del gobierno de Canadá, e incluso declaraciones públicas del propio primer ministro, Canadá no ha tomado medida alguna para impedir que 103 embarques de contenedores cargados de basura variada y exportada ilegalmente viajaran en 2013 y 2014 por mar desde Canadá y su contenido fuera vertido en Filipinas para que se pudriera allí.
Este vertido de basura canadiense en Filipinas es inmoral e ilegal, sostiene la Coalición, que expresa que esta conducta viola las obligaciones contraídas por Canadá en la Convención de Basilea sobre el control en frontera de los movimientos de desperdicios peligrosos y su disposición final. Señala también que en junio de 2016 un juez ordenó el regreso de contenedores llenos de basura reiterando que Filipinas no es un «cubo de basuras».
«Devolver la basura a su lugar de origen es justo, moral y lícito», dice Aileen Lucero, coordinadora de la Coalición por la basura ecológica.
La negativa de Canadá a hacerse responsable del retorno de la basura enviada ilegalmente contrasta con la actitud del gobierno de Corea del Sur, que en 2018 actuó sin demora para hacer regresar a su país unos contenedores con basura que se habían enviado ilegalmente a Filipinas.
La Coalición ha solicitado al gobierno de Canadá que fije clara y definitivamente una fecha en la que se hará cargo de su basura. Este organismo informa de que la Red de Acción Basilea (BAN, por sus siglas en inglés) recientemente ha hecho un estudio usando dispositivos GPS en el que se descubrió que Canadá estaba exportando ilegalmente basura electrónica a Hong Kong y Pakistán en violación de la Convención de Basilea e invitó a Canadá a que ratifique la enmienda de Basilea que prohíbe absolutamente la exportación de residuos peligrosos a cualquier país subdesarrollado. Esta enmienda fue aprobada a partir de la iniciativa de algunos países desarrollados y europeos y necesita el refrendo de solo dos países más para poder entrar en vigor.
Canadá es uno de los 20 países que no han ratificado la enmienda.
«Instamos a que Canadá se una a la Unión Europea en la ratificación e implementación de la enmienda de prohibición de Basilea», dijo Jim Puckett, director ejecutivo de la Red de Acción Basilea. «Al hacerlo, Canadá dejará de usar a Asia como un vertedero y se convertirá en embajadora de la justicia ambiental mundial.»
Cuando en 2015 asumió el primer ministro Trudeau, prometió que su gobierno haría que Canadá se situara entre los principales países del mundo en las cuestiones ambientales.
Es hora de que el primer ministro Trudeau demuestre ese liderazgo haciéndose responsable del retorno a su país de la basura ilegalmente vertida en Filipinas y ratificando la enmienda de prohibición de Basilea.
Fuente: https://rightoncanada.ca/?p=4326
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