Las organizaciones conservacionistas acogen muy favorablemente el acuerdo alcanzado el 30 de junio por el Parlamento Europeo, el Consejo de Ministros de la UE y la Comisión Europea sobre toda una serie de disposiciones clave para un nuevo Reglamento de la Unión Europea (UE) relativo a la pesca de aguas profundas que incluye la prohibición […]
Las organizaciones conservacionistas acogen muy favorablemente el acuerdo alcanzado el 30 de junio por el Parlamento Europeo, el Consejo de Ministros de la UE y la Comisión Europea sobre toda una serie de disposiciones clave para un nuevo Reglamento de la Unión Europea (UE) relativo a la pesca de aguas profundas que incluye la prohibición de la práctica del arrastre de fondo por debajo de los 800 metros de profundidad y prevé la introducción de vedas en zonas que contengan o es probable que contengan ecosistemas marinos vulnerables.
El acuerdo llega cuatro años después de que la Comisión publicara una propuesta de nuevo reglamento relativo a la pesca de aguas profundas en el Atlántico nordeste y dos años y medio después de que el Parlamento adoptara su posición al respecto. Luxemburgo, que ocupó la Presidencia rotativa de la UE durante el segundo semestre de 2015, recibió en noviembre un mandato del Consejo de Ministros de Pesca de los 28 Estados miembros de la UE para iniciar las negociaciones con el Parlamento Europeo y la Comisión. Dichas negociaciones han concluido bajo la presidencia de Países Bajos, que asumió el cargo en enero de este año.
«Este acuerdo constituye un gran avance de cara a cumplir los compromisos contraídos por la UE en la Asamblea General de la ONU y aprovechar dichos compromisos para proteger los ecosistemas de aguas profundas en aguas de la UE», explicó Matthew Gianni, de la organización Deep Sea Conservation Coalition (DSCC). «Instamos a las partes a proceder a una aplicación rigurosa del Reglamento una vez haya sido formalmente adoptado y alentamos a la UE a continuar trabajando con otros países para reforzar la protección de los ecosistemas de aguas profundas en aguas internacionales y establecer límites basados en las evidencias científicas para las capturas dirigidas y las capturas accesorias en las pesquerías de aguas profundas del Atlántico nordeste».
«Centenares de científicos y cientos de miles de ciudadanos de la UE pidieron que se pusieran límites a la destructiva práctica del arrastre de fondo de aguas profundas,» afirmó Uta Bellion, directora del programa marino europeo de la organización The Pew Charitable Trusts. «Acogemos favorablemente la decisión del Consejo y el Parlamento Europeo de atender este llamamiento, expresamos nuestro agradecimiento a la Comisión Europea por centrarse en la conservación de las aguas profundas y felicitamos a las Presidencias luxemburguesa y neerlandesa de la UE por haber llevado a buen puerto el acuerdo».
Se espera que el Parlamento Europeo y el Consejo adopten el reglamento final antes de que acabe el año.
Deep Sea Conservation Coalition es una organización integrada por más de 70 organizaciones ecologistas no gubernamentales, organizaciones de pescadores e institutos de Derecho y de políticas, todos ellos comprometidos con la protección de las aguas profundas.
Pew Charitable Trusts se inspira en la capacidad del conocimiento para resolver los problemas que suponen un mayor desafío en la actualidad. Encontrará más información en www.pewtrusts.org.
La Unión Europea tiene una de las flotas pesqueras de aguas profundas más grandes del mundo. Los arrastreros de fondo arrastran por el lecho marino gigantescas redes dotadas de grandes pesos que arrasan todo lo que encuentran en su camino, incluyendo corales y esponjas que han florecido en esos entornos durante miles de años; su desaparición pone en peligro la capacidad de los ecosistemas de aguas profundas para absorber dióxido de carbono de la atmósfera.
El actual reglamento para la gestión de la pesca de aguas profundas de la UE no ha conseguido mantener la mayoría de las poblaciones de peces de aguas profundas dentro de los límites biológicos de seguridad ni restablecer algunas de las poblaciones que sufrían un mayor estado de agotamiento en la región. También ha fracasado a la hora de proteger los ecosistemas marinos vulnerables de aguas profundas frente a las prácticas altamente destructivas. Numerosos documentos e informes científicos han identificado de forma sistemática la pesca de arrastre de fondo como la principal amenaza para los ecosistemas de corales y esponjas de profundidad.
La veda al arrastre de fondo por debajo de los 800 metros de profundidad constituye un compromiso alcanzado entre los legisladores que rechazaban cualquier tipo de prohibición del arrastre de fondo y los que apoyaban una prohibición por debajo de los 600 metros, que, de acuerdo con la investigación científica, sería la mejor cota para proteger los ecosistemas vulnerables de aguas profundas y velar por la conservación de las especies de profundidad.
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