Hay informaciones que apuntan al corazón desalmado (Marx: «en las aguas heladas del cálculo egoísta») de un régimen político y su gobierno. Esta por ejemplo ha sido recientemente comentada por el imprescindible Centre d’Estudis per a la Pau JM Delàs de Justícia i Pau [1]: El Real Decreto Ley 19/2012, 25 de mayo de 2012, […]
Hay informaciones que apuntan al corazón desalmado (Marx: «en las aguas heladas del cálculo egoísta») de un régimen político y su gobierno. Esta por ejemplo ha sido recientemente comentada por el imprescindible Centre d’Estudis per a la Pau JM Delàs de Justícia i Pau [1]:
El Real Decreto Ley 19/2012, 25 de mayo de 2012, de medidas urgentes de liberalización del comercio y de determinados servicios -BOE, 26 de mayo- contiene un nuevo mecanismo de apoyo a la exportación de armamento. «La novedad consiste en que el Gobierno, a través del Ministerio de Defensa, podrá celebrar contratos de exportación de armas con un Gobierno extranjero». Será el Gobierno del Reino de España el que garantizará la realización de las operaciones de transferencia de material de defensa. La garantía facilitará que un gobierno de otro país se decida por adquirir armamento producido en España. Un aliciente, otro más, para abonar el crecimiento de la industria armamentística.
De hecho, señala el Centre catalán de investigación antimilitarista, España se ha convertido en el séptimo país del mundo -¡séptimo!- en exportaciones de armamento. Durante 2011, «las exportaciones alcanzaron la cifra récord de 2.400 millones de euros». El Real Decreto en cuestión pretende mantener y mejorar la posición alcanzada en los próximos años. ¿Importa que se trate de un negocio manchado de sangre? No: en las cuentas de beneficios empresariales, la sangre humana non olet. Nada huele.
Pero hay también otras noticias, ciertamente de otro registro, que también caracterizan a un régimen monárquico, como el español, y al estilo de vida (incluso sus miserias contables y fiscales) de los grupos aristocráticos -no sólo desde luego- de sus clases dominantes (ya no dirigentes ni hegemónicas).
Tomo pie en la información de los periodistas A. Manresa y J. García [3] del diario global, monárquico y matutino.
El juez Castro, el juez que instruye el caso Nóos, preguntó en su día a la secretaria particular del duque palmesano, doña Julita Cuquerella Gamboa [JCG], por viajes de los hijos de doña Cristina de Borbón y de su consorte. ¿Por viajes de los nietos de la primera autoridad del Estado? Sí. JCG reconoció ante el juez que se pagaron con la visa asignada a Aizoon, cuya propiedad, vale la pena recordarlo, comparten al 50% la infanta y su marido. A la citada «empresa», como se recuerda, se desviaron fondos de los contratos del Instituto Nóos con las administraciones de las Islas Baleares y la Comunidad Valenciana.
Pues bien, la investigación judicial «ha acreditado que Aizoon se desgravaba por gastos que no correspondían a la actividad de la empresa». Entre esos gastos -presuntamente, siempre presuntamente- estarían los viajes de los hijos de la pareja Real. ¡Los viajes de los hijos del yernísimo y doña Cristina de Borbón para desgravar, para pagar menos a Hacienda, usando para ello su imputación como gastos empresariales! ¿Hasta estas miserias se ha llegado? Como han leído. «La pela es la pela» es una expresión usada en sectores privilegiados catalanes y no olviden la enorme aceptación de la pareja entre la burguesía del Principado. Todo se pega.
Un extracto del interrogatorio a la secretaria del Duque -que sigue siendo Duque y yerno- tomado del artículo de Manresa y García:
[…] Juez. ¿Esto dónde se carga?
Secretaria:. Pues si le digo que está cargada a la visa Aizoon, sería que lo cargaría yo a la visa de Aizoon.
Juez. ¿Por qué?
Porque el señor Urdangarin me daría esas instrucciones o porque yo así lo consideré.
[…] Juez. ¿Entonces se calibró como un viaje de negocios de Aizoon?
No, no creo, pero yo creo que muchas veces hay viajes que si se van a hacer negocios la gente se puede llevar a su familia, no lo sé, sinceramente.
Juez. No, no.
Pero que se calibró como un viaje de Aizoon.
Juez. Pero se pagan impuesto de sociedades, ¿pero no se lo desgrava uno?
Secretaria. No lo sé, señoría, yo no sé (…)
La secretaria, JCG, con dudas, contradiciéndose, diciendo sí pero no, confirma finalmente, de forma implícita, otra estrategia creativa y emprendedora de la pareja Real: ubicar gastos familiares como si fueran costes empresariales de Aizoon, la empresa compartida. ¿Tampoco de esto sabía nada la hija del Rey? ¿Ni del destino de los viajes de su hijo sabía nada doña Cristina de Borbón? ¿Sigue siendo improcedente su presencia en el juzgado de Palma para dar cuenta de estos y otros hechos?
Para cerrar el círculo de la situación, la tolerancia cero asoma cada vez más claramente en esta España en bancarrota, incluyendo desde luego los gobiernos de las autonomías, especialmente la catalana.
Que hablar de régimen político pseudomocrático no es una exageración es fácil contrastarlo en la siguiente información [4].
«No me detuvieron por lo que hice. Me detuvieron porque soy afiliada a la CGT», ha declarado la responsable de organización de la CGT barcelonesa, Laura Gómez, la sindicalista que estuvo, que se «chupó» 23 días en prisión preventiva. No fue, señala, por la acción que protagonizó en la Bolsa de Barcelona junto con otros compañeros. «Estábamos rodeados de mozos. Si yo hubiera hecho una acción punible en ese mismo momento me podrían haber identificado o bien el día después. Es una estrategia bien pensada «. Puedo confirmar la corrección de su razonamiento. El que suscribe estaba muy cerca suyo en aquel momento y puede corroborar la descripción del escenario.
Pues bien, a Laura Gómez se «le imputan los delitos de desórdenes públicos, incendio, coacciones y el delito relativo al ejercicio de los derechos fundamentales y las libertades públicas». Según su propio sindicato, la Fiscalía barcelonesa pide para ella hasta «36 años de prisión sobre todo por la imputación de incendio referente a una acción que se realizó ante la Bolsa consistente simplemente en quemar una caja con billetes de mentira». La sindicalista denuncia, con razones atendibles, que «la justicia está en manos de magistrados absolutamente dirigidos por políticos. La justicia no es independiente, está manipulada y eso sí que me preocupa», confiesa Gómez, que manifiesta que «lo que tenemos que hacer es no parar, no debemos tener miedo «.
Por debajo de ello, por debajo de esta increíble petición de 46 años de cárcel, asoma el recuerdo del caso Scala. No es una locura, no es ninguna ensoñación onírica.
Hay que silbar, pues, siempre que podamos. Y no sólo en el Calderón. Sobran motivos, se acumulan sin fin.
Notas:
[2] El Centre apunta la posible venta a Arabia Saudí de más de 200 tanques Leopard «por un valor que podría ser superior a los 3.000 millones de euros». El contrato, que lleva negociándose desde mayo de 2008, no se ha cerrado hasta el momento.
[3] A. Manresa/J García: «El juez investiga si Aizoon….» El País, 31 de mayo de 2012, p. 13.
[4] http://www.rebelion.org/noticia.php?id=150604
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.