Le llamaron «rojo de mierda» y mientras le golpeaban junto a los paneles que muestran imágenes de los campos de exterminio nazi profirieron gritos de «viva Hitler» y «viva Franco». La policía buscaba ayer a los agresores del estudiante de la facultad de Derecho que el jueves plantó cara a un grupo de extrema derecha […]
Le llamaron «rojo de mierda» y mientras le golpeaban junto a los paneles que muestran imágenes de los campos de exterminio nazi profirieron gritos de «viva Hitler» y «viva Franco». La policía buscaba ayer a los agresores del estudiante de la facultad de Derecho que el jueves plantó cara a un grupo de extrema derecha que pretendía destrozar los paneles de la exposición del Fòrum per la Memòria del País Valencià instalados en la Facultad de Derecho de Valencia.
«Empezaron a descolgar los paneles y les llamé la atención; me empujaron y me tiraron al suelo. Uno se puso en guardia como si dominara el vale- tudo o algo así», recordó ayer el estudiante, que cursa la titulación de Sociología y es miembro del claustro universitario. El joven, que no reveló su identidad por temor a represalias, afirmó que los agresores son alumnos de la misma Universidad, aunque ayer, ante la policía, no logró identificarlos. El grupo del estudiante agredido denunció que se han producido situaciones similares en las últimas semanas contra jóvenes de izquierda o grupos independentistas. «La ultraderecha está organizada, aquí en la Universidad y fuera», denuncian. La agresión se suma a la que sufrió un militante de las Joventuts d’Esquerra Republicana del País Valencià (JERPV) por parte de cuatro individuos en la plaza del Ayuntamiento de Valencia al finalizar la manifestación del 8 de marzo, Dia de la Dona.
Denuncias de la Universitat
La Universitat de València presentó ayer una denuncia tras la agresión. El rector de la Universitat, Francisco Tomás, contactó con el subdelegado del Gobierno, Luis Felipe Martínez, y le reclamó la máxima diligencia policial para aclarar los hechos. El equipo rectoral califica de «inadmisibles» los ataques, que considera «incompatibles con la vida académica e impropios de una sociedad democrática». Desde el rectorado se asegura que los hechos «desgraciadamente ponen de manifiesto la necesidad de hacer exposiciones como la que intentó ser boicoteada, para preservar la memoria frente a la barbarie del fascismo», afirman. La asociación de estudiantes A Contracorrent, de la que forma parte el estudiante atacado organizó la exposición itinerante con fotografías sobre los campos de concentración nazis de Mauthausen y Gusen. La coordinadora de Esquerra Unida, Gloria Marcos, puso ayer a disposición del agredido el respaldo jurídico de su organización, pues, según afirmó, «no se trata de un caso aislado y no es casualidad que se haya producido en uno de los primeros actos de recuperación de la memoria histórica cuando se cumple el 75 aniversario de la II República». La muestra incluye fotografías realizadas por valencianos represaliados como Francesc Boix, que sirvieron como pruebas en los juicios de Nuremberg. La exposición muestra también el papel de la resistencia española en los campos de concentración. La muestra se podrá ver en los campus de Tarongers y Blasco Ibáñez. Hasta el 15 de marzo se podrá visitar en las facultades de Ciencias Sociales y Derecho y a partir del 21 y hasta el 6 de abril a la Facultad de Historia.