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Entrevista Mariló Gradolí Presidenta de la Associació de Víctimes de la DANA 29 d’Octubre

«Para las víctimas de la DANA, la justicia es ver a Carlos Mazón en la cárcel»

Fuentes: Naiz

Mariló Gradolí fue una de las tantas personas afectadas por la DANA en el municipio de Catarroja. Confiesa que tuvo la suerte de ser avisada por una vecina. Gracias a ello, subió al primer piso y allí permaneció toda la noche, mientras en la planta baja la riada se llevaba todo por delante.

El 29 de octubre de 2024, la ciudad de Valencia sufrió uno de los episodios más trágicos de su historia reciente. La pésima gestión del Gobierno presidido por el popular Carlos Mazón ante una alerta roja por lluvias expuso a miles de ciudadanos a un vendaval de agua que arrasó poblaciones enteras, dejando a su paso 229 muertos y un paisaje completamente devastado. «Una línea de barro en el corazón y en el alma sigue condicionando nuestras vidas», expresa Mariló Gradolí, presidenta de la Associació de Víctimes de la DANA 29 d’Octubre.

Desde el mismo día de la catástrofe, este y otros colectivos iniciaron una movilización que, pese a lograr la dimisión de Mazón el pasado 3 de noviembre, se resiste a pasar página.

Mariló Gradolí fue una de las tantas personas afectadas por la DANA en el municipio de Catarroja. (Eva MAÑEZ)

Tras un año soportando mentiras y la falta de empatía por parte de la Generalitat Valenciana, trabajan para devolver la normalidad a los municipios afectados y, en nombre de quien sufrió en sus carnes la negligencia de las autoridades, actuar para que haya un verdadero proceso de justicia y reparación.

Así lo reclama Gradolí, para quien el recambio de Mazón por Juan Francisco Pérez Llorca al frente de la Generalitat, no tiene que desviar la necesidad de una nueva gobernanza basada en el respeto a la vida y la salvaguarda del patrimonio cultural y territorial del País Valencià.

Los pasados 11 y 12 de noviembre, las asociaciones de víctimas de la DANA comparecieron ante la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo. ¿Cuál era el objetivo?

Ya habíamos acudido en septiembre para pedir que se investigara lo ocurrido, y tras acordarse que continuaría abierta, hemos reanudado nuestras demandas.

Entre ellas, que los servicios de emergencia se revisen a escala europea o que los fondos que lleguen al País Valencià estén debidamente fiscalizados para que se apliquen siguiendo criterios de adaptabilidad al cambio climático. Seremos vigilantes con el fin de que respeten estos parámetros medioambientales.

En su intervención, calificaron de «criminal y homicida» la gestión del Ejecutivo valenciano presidido por Carlos Mazón. ¿Más allá de responsabilidades políticas, entienden que también se derivan responsabilidades penales?

Así es. Si inicialmente entendimos que la culpa recaía en el mando único del Centre de Coordinació Operativa Integrat (CECOPI), encabezado por la consejera de Justicia e Interior, Salomé Pradas, una vez esta admitió que ignoraba todo lo relativo a la seguridad, vimos que el verdadero culpable era quien la había nombrado, que no es otro que Mazón.

Y, a medida que la investigación ha avanzado, esto se ha hecho aún más patente, por lo que exigimos que rinda cuentas ante los tribunales.

¿Se le puede achacar una clara negligencia en todas sus decisiones?

Sin duda. Ya lo había hecho cuando desmanteló la Unitat Valenciana d’Emergències (UVE), tal como le había pedido Vox a cambio de darle la investidura.

Después, el mismo día de la tragedia cuando, mientras la Universitat de Valencia y la Diputación cancelaban sus actividades, minimizaba los peligros de la tempestad diciendo que esta se dirigía hacia la Serranía de Cuenca.

En esa cadena de despropósitos, ¿qué más le ha dolido de Mazón?

La ocultación de la verdad, el menosprecio a las víctimas y, por sus consecuencias, su gestión criminal el 29 de octubre. Recordemos que, aún y con las advertencias que recibía, personas con teleasistencia y personal docente se estaban ahogando al no tener información del peligro de salir a la calle.

Al contrario, en lugar de responder ante un aviso de emergencia real, prefirió no espantar a los turistas que venían a pasar el puente de noviembre.

La gestión con la DANA se asemeja a la manera en que el PP afrontó el accidente en el metro de València de 2006, en el que murieron 43 personas. ¿Estamos ante un mismo patrón de conducta?

Ambos episodios revelan cómo maneja el bien público y el maltrato que dispensa a las víctimas, a las cuales entonces también criminalizó. En nuestro caso, lo ha hecho tildándonos de catalanistas de izquierdas y otros calificativos con el objetivo de deslegitimar nuestras demandas o las críticas que le trasladaban las familias afectadas.

No solo eso: en todos sus discursos, Mazón se ha dedicado a eludir responsabilidad y presentarse como la víctima 230. Una estrategia que pronto se ha desmoronado, pues en la zona cero, no hay nadie que no conozca a un desaparecido o haya sufrido las terribles consecuencias del temporal.

En estos momentos, ¿en qué situación están las víctimas? El Colegio de Psicología de Valencia asegura que, un año después de la tragedia, ya ha documentado 2.000 casos de personas con trastornos postraumáticos…

Por ahora, hemos conseguido el apoyo de la Unitat de Salut Mental d’Emergències y los servicios que nos han ofrecido las distintas corporaciones municipales. Pero no es suficiente.

Necesitamos una atención psicoemocional estable y saber cómo afrontar lo padecido colectivamente, para lo cual no existe una jurisprudencia, cuando es básico para transitar el duelo.

Aparte de las 229 víctimas mortales, hay miles de historias de superación que no están contabilizadas, personas a las cuales difícilmente se les borrará lo que vivieron o presenciaron con sus propios ojos.

¿El impacto no se limitó a las víctimas y a su entorno más próximo?

Siempre decimos que terminamos en una zona de guerra, pues perdimos el paisaje y la red social que nos acompañaba durante décadas.

En Catarroja, donde vivo, desapareció el teatro-auditorio, nuestro referente cultural, así como una trama de vecinos y vecinas que ya no hemos recuperado.

Si encima, las instituciones que tienen el deber de protegerte, te dan la espalda y te maltratan públicamente, el sentimiento de indefensión ha sido absoluto.

¿Tienen previsto emprender alguna acción ante el anuncio de que la reconstrucción se adjudicará a empresas vinculadas a las tramas Gürtel y Púnica, relativas a la financiación irregular del PP?

Estaremos atentos para que no se las contrate, pero eso corresponde a los partidos y a las instituciones comunitarias que canalizarán las ayudas. Ya les hemos advertido de esa posibilidad, pues a estas alturas, no nos podemos fiar del Pla Endavant que ha presentado la Generalitat.

Un catálogo de actuaciones condensadas en un vistoso PowerPoint, sobre las cuales no sabemos si están pensadas para darnos seguridad o, como ha sucedido en otras ocasiones, para hacer negocio. Por eso, exigimos seguir las licitaciones y participar para que las soluciones sean reales y duraderas.

¿La autoorganización de la sociedad civil es una de las lecciones más positivas que ha puesto a relucir la DANA?

Está claro. Hay que destacar el papel que han ejercido los CLER (Comités Locals d’Emergència i Reconstrucció), el Acord Social Valencià, un espacio destinado a coordinar la construcción colectiva de la zona afectada, y las tres plataformas de víctimas constituidas a raíz de la catástrofe.

Ahora bien, no podemos quedarnos con el eslogan de «El pueblo salva el pueblo» o que no necesitamos apoyo público. De ningún modo: las instituciones tienen que funcionar, actuar debidamente y estar al servicio de la ciudadanía.

¿Hace falta un replanteamiento de las políticas públicas?

Es fundamental, pues el modelo urbanístico que ha desarrollado la derecha se ha cargado toda la huerta que rodea Valencia, cuya función era absorber los cabales de agua.

Un hecho que ha dejado una amplia área a merced de las inundaciones, de ahí que exigimos que las futuras infraestructuras, tal como demandan las instituciones europeas, sean resilientes y garanticen que, ante futuros episodios adversos, la población esté segura.

¿Qué haría falta para cerrar este duelo colectivo?

Por la memoria y la dignidad de las víctimas, no podemos permitir que la responsabilidad de Mazón salga gratis. Entre otras cosas porque eso aumentaría la desafección hacia las instituciones y las personas que están al frente de las decisiones.

Ni queremos volver atrás ni tampoco cronificarnos en el duelo, sino recobrar la confianza en que se puede gobernar de forma honesta e íntegra. Pero insisto: antes de mirar el futuro, la justicia debe hacer su trabajo, y para las víctimas, la justicia es ver a Mazón en la cárcel.

Fuente: https://www.naiz.eus/es/info/noticia/20251124/para-las-victimas-de-la-dana-la-justicia-es-ver-a-carlos-mazon-en-la-carcel