No estaría de más que aprovecháramos las celebraciones para ejercer la debida autocrítica y reflexionar. Y es 8 de Marzo. Y pudiendo hablar de la invisibilidad de las mujeres en cualquier ámbito público de esta sociedad que escribe su épica en masculino, optamos por mirar hacia los medios de comunicación, donde nos toca, donde nos […]
No estaría de más que aprovecháramos las celebraciones para ejercer la debida autocrítica y reflexionar. Y es 8 de Marzo. Y pudiendo hablar de la invisibilidad de las mujeres en cualquier ámbito público de esta sociedad que escribe su épica en masculino, optamos por mirar hacia los medios de comunicación, donde nos toca, donde nos duele. Acaba de ser presentado en Londres y Argentina el Informe ¿Quién figura en las noticias? realizado por colectivos feministas pertenecientes al Global Media Monitoring Project (GMMP). Este informe busca ofrecer una perspectiva de género en el análisis de los medios de comunicación y desvelar la posición subordinada de las mujeres en la estructura, organización y programación de las industrias de la comunicación. Es una magnífica oportunidad para volver hacia adentro el análisis y buscar, sin miedos, los lastres que en los medios de información alternativos heredamos del orden patriarcal y de los que tan difícil resulta desprendernos.
Desde un medio alternativo como inSurGente parece casi innecesario, por obvio, destacar la importancia de los medios de comunicación masivos en esta etapa del capitalismo como instrumento al servicio de poder.
Parece innecesario destacar que no funcionan, por supuesto, como una ventana abierta al mundo sino como un filtro que selecciona y codifica. Constituyen, sin duda, una perversa herramienta que acaba modelando las percepciones y el conocimiento que la gente tiene acerca de lo que sucede en el mundo.
Medios de información alternativos como inSurGente nacen comprometidos con la tarea de denunciar la lógica dominante, el orden opresor y excluyente en el que Falsimedia actúa como caja de resonancia del poder.
Esta vocación anticapitalista y contrahegemónica incluye analizar y mirar la realidad también desde una perspectiva que cuestione la sociedad patriarcal, una perspectiva a la que no es posible acceder desde los supuestos tradicionales de la subordinación femenina y la dominación masculina.
Exige una mirada desde la perspectiva de género y exige la toma de conciencia de los procesos y de las lógicas en las que nos movemos.
En el ámbito de los medios de comunicación y desde una perspectiva de izquierdas parece clara nuestra conciencia en cuanto al papel que las mujeres desempeñan en los monopolios de la comunicación. El pobre y ninguneado papel al que los medios nos relegan.
No nos sorprende a las ciudadanas y ciudadanos críticos, porque somos conscientes de que la industria de la información sirve a la lógica del mercado, a la ley de la ganancia. Y ahí los pobres, las minorías, las mujeres o pierden o sobran.
(*) ¿Acaso nos sorprende que siendo las mujeres el 52% de la población del mundo constituyan el 21% de las personas que figuran en las noticias? (En España sólo 15 de cada 100 personas mencionadas en la radio son mujeres)
¿Sorprende que si estas noticias se refieren a asuntos de «importancia» como política y gobierno el protagonismo de las mujeres sea sólo del 14%?
Y sabemos que los datos, los argumentos, el asesoramiento experto vienen siempre de la mano, la voz y el modo de hacer masculino. La aséptica estadística dice que en el 83% de las ocasiones en que se requiere en las noticias a representantes o expertos éstos son hombres.
Es poco probable que las mujeres sean protagonistas de una noticia (ya lo sabemos o lo intuimos). Tan poco como que esto sólo ocurre en 1 de cada 10 noticias en todo el mundo. Menos aún si se trata de política o gobierno (8%) que ya se sabe que esas son cosas de hombres. Menos todavía cuando la noticia informa de lo que de verdad importa, del corazón de la dictadura del mercado: en la sección de economía sólo encontraremos mujeres en 3 de cada 100 ocasiones.
Ocurre igual si nos fijamos en quienes ponen palabra y dan forma a la noticia. En los periódicos, las notas escritas por mujeres se limita al 27%. Mientras, en la televisión se aprovecha la presencia de una cara bonita (y femenina) en un 57% de ocasiones.
Tampoco sorprende que, aunque cada vez son más mujeres trabajando en los medios de comunicación, aún seguimos confinadas en el tratamiento de temas que son considerados menos importantes socialmente como la cultura o los espectáculos, es decir, cuanto menos importante sea el tema más mujeres se ocuparán del mismo (feminización de una ocupación=desvalorización de la misma). No nos asombra, aunque no deberíamos dejar de denunciarlo, que las mujeres, también en los medios de comunicación continúan bajo el dominio de lo privado, lo doméstico y lo afectivo, mientras a los hombres se les atribuye la toma de decisiones y la participación en asuntos públicos.
Habrá que denunciar pues y decir bien alto que esa falsimedia que genera opinión, que se apropia de las ideas de las gentes, que actúa como caja de resonancia del poder, que ningunea las voces de los oprimidos y de las revoluciones que están haciendo ese otro mundo posible… responde, como no podía ser de otra forma, a un modelo masculino, androcéntrico y patriarcal.
Está claro que el acceso a Internet ha supuesto un avance importante en cuanto a la posibilidad de ofrecer visiones distintas y a gestionar y organizar el análisis y la información. Muchas son las páginas webs que trabajan intensamente en ocupar este espacio. Mujeres en Red, Red Feminista, Madre, constituyen un referente importante en el reto de reivindicar y visibilizar otras perspectivas.
Pero no deberíamos dudar en aplicar la observación y la rigurosidad del análisis a nuestros medios alternativos de información (a los que han conseguido un espacio y un peso en la información entre las gentes de izquierda, anticapitalistas y antiimperialistas) y repensar desde este punto de vista cuáles son los modelos con los que trabajamos.
¿Cuántas mujeres escriben en los medios alternativos de información (inSurGente, Rebelión, Aporrea, kaosenlared, nodo50, Lahaine)?
¿Cuántas mujeres son protagonistas de las noticias que seleccionamos y difundimos?
¿Cuántas mujeres participan de las estructuras de control y organización de estos medios?
¿Cómo aparecen las mujeres cuando aparecen?
No estaría de más que nos molestáramos en cuantificar estas dudas, no con el afán de alimentar las vacías estadísticas sino por acercarnos un poco más a la utopía.
* Los datos que se ofrecen están extraídos de los siguientes documentos:
– 2º Informe de la Investigación: Representación de Género en los Informativos de Radio y Televisión. Instituto Oficial de Radio y Televisión e Instituto de la Mujer. Directora: Pilar López Díez (Dra. En CC de la Información. Investigadora y formadora en Políticas de género y medios de comunicación)
– Informe ¿Quién figura en las noticias? 2005. Global Media Monitoring Project (GMMP). La investigación analiza los datos recogidos en 76 países en los que se revisaron 13.000 noticias en televisión, radio y periódicos. El informe se ha presentado en Londres en febrero de 2006. Este proyecto (que aglutina a mujeres y asociaciones feministas) se desarrolló en 1995 y 2000, influyendo decisivamente en las conclusiones de la IV Conferencia Mundial de Mujeres que tuvo lugar en Beijing en relación con la visibilidad de la representación de género en las noticias.