Deberíamos estar felices, pero los ecologistas están profundamente alarmados: Prozac, la droga antidepresiva, está siendo ingerida en tales cantidades que ahora puede encontrarse en el agua potable de Gran Bretaña. Los ecologistas llaman a que se realice una investigación urgente de las revelaciones, que describen la concentración del antidepresivo como «una medicación masiva oculta». La […]
Deberíamos estar felices, pero los ecologistas están profundamente alarmados: Prozac, la droga antidepresiva, está siendo ingerida en tales cantidades que ahora puede encontrarse en el agua potable de Gran Bretaña.
Los ecologistas llaman a que se realice una investigación urgente de las revelaciones, que describen la concentración del antidepresivo como «una medicación masiva oculta». La Agencia del Medio Ambiente ha revelado que Prozac se está acumulando tanto en los sistemas fluviales como en las aguas subterráneas utilizados para el consumo humano.
El principal organismo de control del gobierno realizó recientemente una serie de reuniones con la industria farmacéutica para discutir cualesquiera repercusiones para la salud humana o para el ecosistema.
El descubrimiento provoca nuevos temores de que los médicos estén recetando demasiado Prozac, el antidepresivo preferido en Gran Bretaña. En la década hasta 2001, las recetas totales de antidepresivos subieron de nueve millones a 24 millones por año.
Un reciente informe de la Agencia del Medio Ambiente concluyó que Prozac podría ser potencialmente tóxico en el nivel freático y dijo que la droga constituía una «preocupación potencial».
Sin embargo, la cantidad precisa de Prozac en los suministros nacionales de agua sigue siendo desconocida. La Inspección de Agua Potable del gobierno (DWI) dijo que es probable que se encontraría Prozac en una forma considerablemente ‘diluida’ que es poco probable que cause un riesgo para la salud.
El doctor Andy Croxford, jefe de la política para pesticidas de la Agencia del Medio Ambiente, declaró a The Observer: «Tenemos que determinar los efectos de este vertido a bajo nivel, casi continuo».
Norman Baker, portavoz para el medio ambiente de los liberales democráticos, dijo que las revelaciones ponían al descubierto una falla del gobierno en un importante tema de salud público. Agregó que el público debía ser informado si está consumiendo sin darse cuenta drogas como Prozac.
«Parece como un caso de medicación masiva oculta del público desprevenido», dijo Baker. «Es alarmante que no haya un control de los niveles de Prozac y otros residuos farmacéuticos en nuestra agua potable.»
Los expertos dicen que Prozac llega a ríos y sistemas acuáticos desde el agua residual tratada. Algunos creen que las drogas podrían afectar la capacidad reproductiva.
Estudios europeos han expresado también desasosiego respecto al impacto de la acumulación de farmacéuticos en el medio ambiente, advirtiendo que ‘no se puede excluir’ un efecto sobre la fauna y la flora y la salud humana.
«Es muy poco probable que exista un riesgo, ya que semejantes drogas son excretadas en concentraciones muy pequeñas», dijo un portavoz del DWI. «Procesos avanzados de tratamiento instalados para la eliminación de pesticidas son efectivos en la extracción de residuos de drogas», agregó.
© Guardian Newspapers Limited 2004
http://www.commondreams.org/headlines04/0808-04.htm
Autor: Mark Townsend, The Observer, 8 de agosto de 2004
Traducido para Rebelión por Germán Leyens