El centenar de cajas con manuscritos, cartas, fotografías y otras pertenencias de la poeta chilena Gabriela Mistral, que pasaron a manos del Estado, pueden contribuir a revalorizar la obra de la primera figura latinoamericana en recibir el premio Nobel de Literatura.
La poeta «todavía es una desconocida» para el pueblo chileno, comentó a IPS Ana María Cuneo, doctora en literatura de la Universidad de Chile y autora del libro «Para leer a Gabriela Mistral», quien considera que el material inédito encontrado aumentará el interés por conocer su vida y obra, dejando de lado los estereotipos y el morbo que la han rodeado.
Luis Vargas Saavedra, un investigador de la vida de Mistral, comparte esa percepción. «Apenas la conocen, apenas la han leído, incluso las gentes cultas de Chile. Culpa de ello es la versión pueril que de ella se ha enseñado en los colegios», se quejó.
«Se siente ahora, gracias a la prensa, una pre-resurrección». Este es el momento clave para divulgarla plenamente», señaló a IPS el académico de la Universidad Católica de Chile.
Lucila Godoy Alcayaga, cuyo seudónimo era Gabriela Mistral, buscaba nada menos que «el sentido de la existencia» en su obra, según Cuneo.
El legado de Mistral, que estuvo 50 años en poder de su amiga y albacea, la estadounidense Doris Dana, y luego de la sobrina de ésta, Doris Atkinson, ingresó el 15 de este mes a la embajada de Santiago en Washington proveniente de la ciudad de Massachussets, donde estaba en una casa especialmente acondicionada para resguardarlo en buen estado.
Se trata de 105 cajas con libros, manuscritos, cartas, fotografías y otras posesiones de la poeta chilena, nacida el 7 de abril de 1889 en la ciudad de Vicuña, región de Coquimbo, y fallecida de cáncer el 10 de enero de 1957 en Nueva York. Sus restos fueron traídos a Chile el 19 de enero de ese año y hoy descansan en el pueblo de Montegrande, en su región natal.
Con esto «culmina la primera etapa y se inicia el redescubrimiento de Gabriela Mistral, de cara al Bicentenario (la celebración en 2010 de los 200 años de vida independiente de Chile)», afirmó la ministra de Cultura, Paulina Urrutia, al comentar en Santiago la llegada del legado mistraliano a territorio chileno en Estados Unidos.
Mistral fue en 1945 la primera figura latinoamericana en ganar un premio Nobel de Literatura. De profesión maestra, tuvo una notable trayectoria como educadora tanto en su país como en el exterior. Escribió en periódicos nacionales y latinoamericanos y en 1932 inició una carrera como cónsul, lo que la llevó a recorrer el mundo.
Esta autora publicó cuatro poemarios: Desolación (1922), Ternura (1924), Tala (1938) y Lagar (1954). Póstumamente aparecieron sus libros Poema de Chile (1967) y Lagar II (1992), en cuya publicación trabajó la doctora Cuneo. Entre su prosa, se destaca la obra «Lecturas para mujeres» (1923).
Al fallecer Dana, en noviembre pasado, el material pasó a manos de su sobrina, Atkinson, quien decidió entregárselo al Estado chileno, específicamente a la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos (Dibam), pero poniendo una serie de condiciones.
Los libros y manuscritos permanecerán en la Biblioteca Nacional de Chile, la cual microfilmará y digitalizará todos los documentos para posteriormente distribuirlos a las universidades de Chile, Católica y La Serena.
También se harán llegar copias a la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos y a la Organización de Estados Americanos.
La Orden Franciscana en Chile, de la Iglesia Católica, recibirá los derechos y regalías de parte de la obra de la poeta y cuidará tres valiosos objetos de ella: uno de los tres volúmenes en cuero de la Biblia, el prendedor que usó en su traje para recibir en Estocolmo el premio Nobel y dos crucifijos que se cree fueron también de su propiedad.
En caso de que estas instituciones no puedan hacerse cargo del legado, los beneficiarios serán la Fundación Chileno-Americana, el Centro Chileno Lautaro y el Centro de Amigos de la Educación Católica Chilena, localizado en Washington.
Aunque las autoridades no han querido precisar fechas, se estima que las cajas podrían arribar al país el segundo semestre de 2008. Mientras concluyen los trámites administrativos necesarios para sacar la obra de Estados Unidos, ésta será clasificada por el conservador del archivo del escritor y jefe de colecciones especiales de la Biblioteca Nacional de Chile, Pedro Pablo Zegers.
En estos momentos, Vargas se encuentra en Chile revisando los microfilmes que registró durante los ocho días en que tuvo acceso a los documentos en Massachussets, junto a la experta estadounidense Elizabeth Horan, quien está próxima a publicar una biografía de la poeta.
Atkinson lo autorizó para que publicara en conjunto con la Universidad Católica la versión en español de las obras completas y los poemas inéditos de la poeta. También pretende editar su profusa prosa y epistolario, donde se desenvuelven sus pensamientos educacionales y políticos.
El experto ya dio a conocer en el diario El Mercurio algunos poemas inéditos de la premio Nobel. Después de leer esas pequeñas muestras del tesoro encontrado, Ana María Cuneo percibe que los nuevos versos no significarán un cambio en 180 grados en la valoración de la poeta, sino que se trata de «las mismas inquietudes y sensibilidades de Mistral enriquecidas».
«Por ahora voy transcribiendo lo inédito y catando la evolución de la poesía de Gabriela Mistral, que avanza desde la década de los años 40, a un coloquialismo rítmico y a una sencillez que yo calificaría de clásica, en contraste con el innato barroquismo de los años 30», explicó Vargas.
«En 2008 editaré la poesía inédita con todas sus sucesivas variaciones pero sin las estrofas, versos o palabras tarjados por la autora», adelantó a IPS el experto mistraliano.
«Para quienes se interesen por sentir y conocer la creación misma en su proceso de búsqueda – rechazo – hallazgo, para tal lector corresponde compartirle una edición facsimilar. En síntesis, todos los chilenos podrán primero entrar a una poesía inédita y lograda, y después algunos a su gestación», detalló.
Vargas recordó que Horan llegó a la conclusión, entre otras cosas, de que Mistral no tuvo una relación lésbica con Dana, como siempre se especuló, sino que la veía como a una hija. Además, se zanjó la duda sobre la paternidad de Juan Miguel Godoy, más conocido como Yin Yin, el sobrino que Mistral adoptó como hijo. El joven se suicidó en 1943 en Brasil, a los 18 años.
Además, «el epistolario recibido, que es copioso, y las cartas no enviadas por Gabriela Mistral, iluminan su contacto con grandes contemporáneos: Thomas Mann, Jacques Maritain, Aldous Huxley, Carson McCullers, (Miguel de) Unamuno, (Gregorio) Marañón, etcétera», subrayó Vargas.
También «se ha precisado el periplo de viajes, las idas a Alemania y al norte del África, la estadía en Portugal», acotó el experto.
El hecho de que Atkinson haya pedido expresamente al gobierno chileno que el material tenga objetivos educacionales y culturales, y que se realicen exposiciones itinerantes, aviva las esperanzas de que se dé un uso adecuado al legado de la poeta.
Pero según los expertos, debe hacerse un trabajo profundo. «Si el Estado, a través del Ministerio de Cultura y el de Educación, le presentan a los niños y a los jóvenes lo mejor de la obra, escogiendo poemas que ejemplifiquen su riqueza: ternura, intensidad, dramatismo, folclorismo, americanismo, religiosidad, sólo entonces se entenderá porqué le fue concedido…el premio Nobel», advirtió Vargas.
Rolando Manzano, director del Centro Mistraliano, perteneciente a la Universidad de La Serena, señaló a IPS que la expectación y efervescencia generada en el público en torno a la poeta ha permitido trabajar más expeditamente en la mesa regional formada para dar curso a la «ruta patrimonial Gabriela Mistral».
De carácter educativo, cultural y turístico, el circuito anunciado por la presidenta Michelle Bachelet en su discurso del 21 de mayo pretende ser una realidad hacia 2010, cuando se celebre el bicentenario de vida independiente de Chile.
«Lo fundamental es que su poesía y su prosa (que espero poder publicar en forma definitiva y completa) sean leídas, explicadas, asumidas, pues el pensamiento humanista y neo-platónico de esta mujer genial aportan rumbos trascendentales para Chile y el mundo», concluyó Vargas.