Para Joao Franca y Oriol Solé Altimira Los mismos argumentos de la independencia como broma -«una simple instrucción indicativa» sin «fuerza legal», de acuerdo con las alegaciones- son los que Mas esgrimió en la reunión que la pasada semana mantuvo con la cúpula del Círculo de Economía para tratar de calmar a los empresarios […]
Para Joao Franca y Oriol Solé Altimira
Los mismos argumentos de la independencia como broma -«una simple instrucción indicativa» sin «fuerza legal», de acuerdo con las alegaciones- son los que Mas esgrimió en la reunión que la pasada semana mantuvo con la cúpula del Círculo de Economía para tratar de calmar a los empresarios catalanes. El presidente en funciones restó importancia a la declaración instrumental -que dijo tenía como objetivo la investidura- para poder aplicar luego pactos de geometría variable con otros partidos ideológicamente más afines. Cinco días después, Francesc Homs, cabeza de lista de Democràcia i Llibertat (antes CDC), trató de imitar con bastante mala fortuna los equilibrios de su superior jerárquico, recordando ante los empresarios del mismo Círculo que su programa no habla en ninguna parte de desobediencia ni de nacionalizaciones. Es decir, que el horizonte de la República catalana es tan vasto que Convergència lo abre a una cosa y a la contraria: a desobedecer la legalidad sin crear inseguridad jurídica. Queda por vivir próximamente otro episodio de doble lectura: el plan de choque ofrecido por Junts pel Sí, al que la CUP se aferra para redimir su alma soberanista, mientras desde fuerzas opositoras de izquierda es visto como un muestrario de buenos propósitos, de medidas «si Déu vol«. Pero más allá de tacticismos, quizás la base del actual desconcierto haya que buscarla en la magra mayoría independentista, que ha dejado el proyecto noqueado, y a su consecuencia: la tentación convergente de administrar tempos y palabras en beneficio propio.
Francesc Valls (2015)
Diez sugerencias sobre pactos (con organizaciones fuerte y decididamente neoliberales y sus conocidas prácticas de gobierno) desde la perspectiva de una izquierda no nacionalista ni secesionista [IZEDEC] que enlace, con convencimiento y honestidad, sin ceguera, sin exclusiones, de la forma más natural, con lo mejor, es decir, con lo más rebelde, honesto, fraternal y documentado de las viejas y diversas tradiciones emancipadoras de .Cat y del resto de España.
1. La IZEDEC haría memoria -y sugeriría obrar en el mismo sentido a la ciudadanía- de lo ocurrido en estos cinco últimos años en .Cat. Recordaría el lema del gobierno de los mejores, recordaría las primeras medidas fiscales regresivas del gobierno defendidas por Mas-Colell, el ataque a los más desfavorecidos entre los vulnerables, haría memoria de la represión del 15M, de los ojos ciudadanos perdidos en la lucha, de la privatización creciente y no disimulada de la sanidad pública, del ataque a la educación pública, del dinero concedido a manos llenas a las concertadas, de las privatizaciones efectuadas, del aumento de las desigualdades sociales, del número de familias que viven bajo el umbral de la pobreza, de la apuesta manifiesta por el neoliberalismo en educación, del aumento de matrículas universitarias, de la no consideración de la salud como un derecho, de la apuesta por hacer de .Cat un gran parque temático, de la risa parlamentaria por la forma de hablar castellano de los niños gallegos y andaluces, de las críticas (impías) a los jornaleros andaluces, del permanente y estudiado levantamiento de barreras artificiales para separar comunidades muy próximas, del diseñado invento del inexistente «derecho a decidir», de la manipulación de los resultados del 27S, de la presencia como cuarto candidato del hijo político del ex, de la designación de una persona ultranacionalista como presidenta del Parlamento catalán, de la elección de Raül Romeva como cabeza de lista, etc etc. Luego meditaría e intentaría responder a la pregunta: ¿qué puede negociarse con fuerzas de estas caracaterísticas?
2. Así, pues, la IZEDEC no se fiaría ni un pelo -ni siquiera un quark- de unas fuerzas políticas y sociales, y sus intereses anexos y grupos sociales afines, con prácticas gubernamentales no solo netamente antiobreras y neoliberales sino fuertemente represivas.
2.1. Un ejemplo que nos ha recordado Clara Valverde en su último libro: «El responsable del desalojo del Movimiento 15M en Barcelona en el 2011 fue el entonces Conseller de Interior Felip Puig, que en el 2015, como nuevo conseller del Departamento de Empresa y Empleo recortó un 50% el presupuesto para la reinserción laboral de los discapacitados y aumentó el presupuesto de su gobierno un 75%.»
3. La IZEDEC defendería que es imposible pactar nada o casi nada con fuerzas políticas que hicieron de Eurovegas una de sus propuestas económicas (y sociales) centrales (fracaso incluido).
3.1.Lo mismo puede decirse de su propuesta de sustitución: BCN World., que contó con el apoyo del PSC
4. La IZEDEC no se fiaría de la veracidad de tan siquiera una sola proposición de una fuerza que usa la mentira y manipulación como motor desencadenante de su proyecto político y de su ininterrumpido estar en la vida pública.
4.1. Un ejemplo recordado por Francesc Valls: Cinco días después de su jefe, Francesc Homs, cabeza de lista de Democràcia i Llibertat (antes CDC), trató de imitar con bastante mala fortuna los equilibrios de su superior jerárquico, recordando ante los empresarios del mismo Círculo que su programa no habla en ninguna parte de desobediencia ni de nacionalizaciones.
5. La IZEDEC no podría sino vomitar ante palabras y afirmaciones como las siguientes: «Es urgente que haya un plan de choque social. Los primeros interesados en él somos nosotros, que hemos trabajado en él los últimos años».
5.1.Autoría: el hijo político, según propia confesión, del gran manipulador y defraudador, también según confesión (parcial y nuevamente manipuladora) propia.
5.2. Sensibilidad social: tendente a cero.
6. La IZEDEC será consciente, con preocupación creciente, del carácter netamente antiespañol de un sector amplio, en absoluto marginal, del independentismo catalán.
6.1. «¡Arrojemos a la basura todos los teclados! ¡Por fin podremos desembarazarnos de la eñe!» un ejemplo ubicado en el reino de los informáticos secesionistas.
6.2. Recuérdense las declaraciones del primer candidato de Democràcia i Llibertat.
7. Antes de cualquier encuentro o negociación con representantes de fuerzas neoliberales que han realizado, felices y muy complacidos de conocerse a sí mismo, tareas de gobierno, la IZEDEC acudiría a ver acompañada de amigos y compañeros «Techo y comida», una película tan propia de Nou Barris como de Jerez de la Frontera.
7.1. La IZEDEC recordaría con insistencia el discurso inaugural del curso 2011-2012 del conseller de Economía Andreu Mas-Colell. Todo un programa de derrico y acaso neoliberal.
8. La IZEDEC señalaría que entre 2004 y 2014, según ha documentado la Coordinadora para la Prevención y Denuncia de la Tortura, 2.931 situaciones de torturas o malos tratos en las que se han contado hasta 7.582 personas afectadas. Por nacionalidades o comunidades autónomas, Madrid es la que ha registrado más casos, seguida de Andalucía y Catalunya. Por número de personas afectadas, es Catalunya, con 277, la que presenta un número más alto, seguida por Andalucía con 221 y, a mucha distancia, Madrid (144) y Melilla (121.
8.1. La IZEDEC tendría muy presente el caso de Ester Quintana y recordaría, insistentemente, las versiones ofrecidas desde la conselleria del Interior siendo Felip Puig, un convergente de toda la vida, el amigo de los hijos del gran ex presidente, una de las figuras estelares del país, el máximo responsable del represivo sucedo.
9. La IZEDEC, por supuesto, si no se hubiera levantado ya de la mesa de negociaciones no caería en una trampa tan burda como la siguiente: «Junts pel Sí propone cuatro medidas en materia de vivienda que la Generalitat ya debería estar aplicando para cumplir la legislación aprobada por el Parlament»
9.1.La referencia completa, vale la pena,: interesa http://www.eldiario.es/catalunya/politica/descafeinado-pretende-convencer-Junts-CUP_0_459154819.html «Solo con la propuesta, en muchos puntos ambigua y cuyo coste está todavía por cuantificar, Junts pel Sí le ha metido un par de goles a la CUP. En primer lugar, la coalición de CDC y ERC ha vinculado parte de las medidas sociales al avance del proceso soberanista, postergando de este modo la implementación «inmediata» del plan de choque que la CUP requirió» (Joao Franca y Oriol Solé Altimira).
10. La IZEDEC remarcaría las palabras de uno de los negociadores de la CUP (don Toni Comín), hijo de un cristiano revolucionario que acaso resucitara horrorizado ante una reflexión como esta: «No pondremos nada en el plan de choque que no se pueda pagar».
10.1. ¿»Desobediencia» a las políticas austericidas? ¿Desobediencia a la troika?
10.2. Del citado artículo: «Solo tres de los 20 puntos del plan de choque propuesto por Junts pel Sí a la CUP serían de aplicación inmediata, y dos de esos tres se limitan a aplicar la ley de medidas urgentes para afrontar la emergencia en el ámbito de la vivienda y la pobreza energética, aprobada por unanimidad en julio en el Parlament a partir de la ILP impulsada por la Plataforma de Afectados por la Hipoteca. La PAH lleva desde septiembre reclamando la aplicación inmediata de esta ley, e insiste en que la falta de recursos no es un impedimento y la mayor parte de la ley ya se debería estar aplicando. La legislación ofrece herramientas a las administraciones para que, por un lado, sean las mismas entidades bancarias las que ofrezcan soluciones a las familias antes de ejecutar un desahucio, y por otro, puedan disponer de pisos vacíos para dar respuestas en caso que sea necesario».
10.3. Igualmente: «Por otro lado, en lo que se refiere a la pobreza energética, el plan de Junts pel Sí se propone garantizar el acceso a los suministros de agua, gas y electricidad, impidiendo los cortes a familias vulnerables y financiando un fondo para dar respuesta a la problemática. También esto está contemplado en la legislación impulsada por la PAH. La ley que ya está vigente establece que las compañías no pueden cortar los suministros básicos sin un informe previo de servicios sociales, y en ningún caso pueden hacerlo si se considera que la familia se encuentra en riesgo de exclusión. De hecho, la PAH y la Alianza contra la Pobreza Energética han denunciado que las empresas no están aplicando esta medida y exigen una respuesta por parte de la Agencia Catalana de Consumo, a la que corresponde sancionarlas.»
10.4. La IZEDEC no negociaría ni pactaría que no tuviera muy en cuenta los intereses y la situación de la ciudadanía más desfavorecida del conjunto de España, no sólo la de Cataluña.
10.4.1. Repásese a tal efecto, por ejemplo, la intervención de Carles Campuzano en La sexta el pasado sábado 5 de diciembre.
10.5. Recordaría este nudo: «En el documento de Junts pel Sí no hay ninguna propuesta para revertir privatizaciones emblemáticas de los gobiernos de CiU, una de las prioridades que la CUP fijó antes y después del 27-S. A la espera de que la negociación continúe, ni se plantea la posibilidad que ATLL vuelva a manos públicas o la paralización de proyectos polémicos como el VISC+ o el BCN World«.
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