Tradición y barbarie de los continuadores de la dictadura española

La separación entre sueldos, consideración laboral y social, de mujeres y hombres: hasta un 35% de diferencia; financiación, maltrato y crímenes de animales: 600 millones de euros para promocionar la matanza en las corridas de toros; junto a semejante despilfarro de dinero público para fomentar su barbarie el gobierno de la Comunidad de Madrid suprime la ayuda de material escolar para 64.000 niños en edad escolar, mas becas de comedor en los colegios para hijos de las familias más necesitadas; cierre de bibliotecas: en Madrid ya van siete desde finales del año pasado; esclavización de trabajadores con precariedad laboral, sueldos miserables, de los más bajos de Europa, con un 35% de precariedad laboral entre los jóvenes; consideración de sobrantes de 4 millones y medio de trabajadores y trabajadoras, al paro; se esperan para este año 180.000 desahucios por imposibilidad de pagar las casas donde se vive; en las empresas empiezan a pedir a quien quiera trabajar los comprobantes de que tiene una hipoteca bancaria para escoger a aquellos que están más endeudados e impedidos para negarse a cualquier imposición laboral; ¿esto forma parte de los derechos humanos? ¿De qué derechos forma parte la corrupción?: bancos, multinacionales, responsables municipales y de comunidades autónomas han sido denunciados por diferentes casos y muchos tienen que ver con la construcción como forma de lavar dinero; 34 de las 35 empresas del Ibex tienen oficina en paraísos fiscales; podríamos seguir, pero miremos quien hay encima de la pirámide del capital y de la crisis: Defensores de la dictadura con leyes, las que se han dado ellos, y, la imposición de jefe de estado, negando al pueblo el derecho a decidir, los mismos defensores que mantienen la financiación multimillonaria de la corte, y para que no se sepa de ello le entrega el dinero sin control… tradición y barbarie de los continuadores de la dictadura española en lo laboral, en lo social, en lo político.

Pero me pregunto si la tradición más bárbara en el Estado español no es la de respetar y proteger la dictadura fascista y su expresión actual, porque como se ve, la acción de los gobiernos que la sucedieron ha tenido unas consecuencias históricas que ahora impiden todo avance hacia la justicia social, los derechos humanos reconocidos por el Derecho Internacional, y han establecido un sistema por el que toda decisión queda en manos de aquellos que impidieron en su día, tras la guerra, tras la forma más cruel de dictadura del capital, el avance de las fuerzas democráticas. Hoy el gobierno y los distintos medios de poder vilipendian e impiden el desarrollo de toda oposición a la barbarie. Así ocurre con la gran mayoría de los medios de comunicación, pues pertenecen a sus dominios en forma de mercenarios, descendientes, colaboradores o sin más ocultación son emporios neofranquistas-monárquicos-eclesiásticos. De ahí que prevalezca en la información la ambigüedad, el maniqueísmo, la falsedad palmaria, el insulto directo, y la persecución sobre los republicanos que airean su condición de tales en las calles al paso de comitivas palaciegas.

¿Y estos que se dedican, viven del entreguismo y la corrupción moral y económica, de la falsificación de la Historia, del sostenimiento de la herencia franquista, acusan de dictadores a los dirigentes de Venezuela y Cuba?

Ninguno de estos dos países, Venezuela y Cuba, tiene un contencioso pendiente con la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, y sí lo tiene el gobierno español; ni están esperando en el Derecho Internacional y sus tribunales a que su gobierno tome cartas y haga pasar a los responsables de genocidio por tales Audiencias, sencillamente porque nunca han cometido tales crímenes. La propaganda contra Venezuela y Cuba, por más que lo ha intentado, no ha podido falsificar la verdad histórica. El gobierno español si tiene ese contencioso, se le está esperando a que de cuentas del genocidio causado por los fascistas durante y después de la guerra contra el pueblo trabajador:

Informe del Comité de Derechos Humanos de la ONU (94 reunión, octubre de 2008).

El Estado (español) debería:

1. Considerar la Ley de Amnistía de 1977.

2. Tomar las medidas legislativas necesarias para garantizar el reconocimiento de la imprescriptibilidad de los crímenes de lesa humanidad por los tribunales nacionales.

3. Preveer la creación de una comisión de expertos independientes encargada de restablecer la verdad histórica sobre violaciones de los derechos humanos cometidas durante la Guerra Civil y la dictadura, y

4. Permitir que las familias identifiquen y exhumen los cuerpos de las víctimas y, en su caso, indemnizarlas.

Llevamos 70 años de retraso y mientras no se resuelvan los conflictos creados bajo la dictadura, sus defensores no pueden tildarse de demócratas.

Tradiciones bárbaras de nazis, fascistas, falangistas, iglesia católica, aristócratas monárquicos y gobiernos a su servicio, y de sus protectores- protegidos, servidores de todos ellos, observe usted:

¿A quién no le avergüenza, le horroriza, le indigna, quién siente indiferencia cuando sabe que España es la 2º país del mundo con mayor número de desaparecidos, después de Camboya? La cifra que se baraja se acerca a los 200.000: no avergüenza, ni horroriza, ni indigna, a aquellos que impiden y ocultan la investigación y prefieren mantener el privilegio dictatorial, a la corte gobernante consecuente con la tradición bárbara.

Republicanos asesinados por los fascistas a las órdenes de Franco, enterrados en fosas comunes y que a estas alturas, aún, los responsables de los diferentes poderes no solamente no condenan estos asesinatos (¿no es hacer apología del terrorismo?) y se saltan todo el Derecho Internacional y la Carta de Derechos Humanos, además ocultan la verdad histórica a la población. ¿Estamos en una fase de ocultación-protección del fascismo? ¿Qué vendrá después? ¿Qué le ha pasado al juez Garzón en su intento de investigar los crímenes del franquismo?

¿Quién denomina como dictadores a los gobernantes de Venezuela o Cuba cuando los asesinos se enriquecieron con los robos, llamados dulcemente incautaciones, y ahora se quedan como están? No son llevados ante la justicia ni devuelven nada de lo robado, y es así dispuesto por quienes han venido gobernando y gobiernan.

¿Quién puede acusar de dictadura a los gobernantes de Venezuela y Cuba, haciendo intocable la resultante del golpe de estado contra la república democrática y tras la guerra contra el pueblo, habiendo establecido un plan de exterminio sobre el pueblo (además de los hechos están las declaraciones de Franco, Mola, Yagüe… que declaraban lo que llevaban a cabo), pero que para mayor burla sus medidas incluían grupos de militares fascistas que dictaban sentencias de muerte y condenas de cárcel por el sólo hecho de ser demócrata? Y, hoy, 70 años después los gobernantes no quieren derogar esas sentencias ¿no las consideran ilegales? Se celebra este año el aniversario de Miguel Hernández, poeta republicano y comunista, muerto en la cárcel a causa de la condena fascista, y sigue condenado como todos los demócratas. Mientras no se declaren ilegales esos juicios farsa que llevaron a cabo los golpistas, quedará un elemento más de la vigencia de la dictadura, la dictadura continuará manifestando su establecimiento presente en el poder.  

¿Cómo pueden acusar de dictadura a Venezuela o a Cuba cuando el jefe de estado, aquí, es nombrado por el dictador y jura defender las Leyes del Movimiento Nacional fascista y se excluye de toda ley posterior? Aún recuerdo sus palabras: No consiento que en mi presencia se hable mal de Franco. Un jefe de estado que, como recuerda el profesor Miguel A. Rodríguez Arias, sustituyó al golpista y asesino franco al frente de la dictadura cuando todavía estaba vigente el fascismo puro y duro y cometían crímenes contra los demócratas. Rodríguez Arias pregunta si va a responder por ello, por lo que hacían entonces bajo su mandato los fascistas. ¿Será como dice Valle Inclán, el gran escritor español, en su novela Viva mi dueño, segundo tomo de El Ruedo Ibérico, que a los borbones no les gustan las Constituciones, que tienen tradición de vivir al margen, que las Constituciones son una hoja de parra que les sirve para tapar las vergüenzas?, y si miramos a la de hoy nos sorprende ver cómo a pesar de todo esta les cuida y les considera hasta hacerles irresponsables ante la Ley? Cuenta otro gran escritor, Juan Eduardo Zúñiga, en su magnífico libro de relatos Flores de plomo, que los monárquicos borbones cantaban una copla contra la Constitución en los carnavales de 1837, cuando muere Larra, que gustaba a los curas y decía así:

Vuelva nuestro rey Fernando

vuelva santa Inquisición

pongan fin a la herejía

de la impía Constitución.

¿Cómo pueden acusar de dictadura a Venezuela y Cuba los continuadores del fascismo? Añadimos más datos: lo son en tanto en cuanto no reconocen ni aprueban cambios que recuperen como personas con derechos a presos y presas que tuvieron que trabajar como esclavos, les obligaron a hacer lo que se ha dado en llamar trabajo esclavo, para los asesinos que dieron el golpe de estado y declararon la guerra al pueblo: algunos barrios de Madrid los construyeron presos esclavos: el barrio de El Pilar, Moratalaz, el panteón fascista del llamado valle de los Caídos, el Canal del Guadalquivir, trabajaron para los fascistas en arrozales, en minas, en prisiones, y en tantas otras ciudades y campos por todo el estado enriqueciendo a empresarios fascistas hoy poderosos en España. Ni desde el gobierno ni desde ningún estamento de poder se reconoce a los presos esclavos, y así ni se les hace justicia, ni se les indemnizan a estos ni a sus familias.

¿Cómo pueden acusar de dictadura a Venezuela y Cuba cuando no reconocen a los luchadores antifranquistas, luchadores por la democracia, restos del ejército popular republicano que continuaron como guerrilleros la lucha contra los golpistas que además cometieron genocidio contra el pueblo?

¿Cómo pueden acusar de dictadura a Venezuela y Cuba cuando los sucesivos gobiernos se niegan a facilitar el conocimiento de los datos referidos a los niños que robaron los fascistas a las familias republicanas? Las cifras ya hablan, con los poquísimos datos arañados, de 32.000 niños y niñas. ¿Quiénes fueron sus secuestradores? ¿Qué hicieron con aquellos niños y niñas? ¿Por qué lo mantienen en secreto? Los secuestros llegaron hasta el final de los años 60.

En Argentina, en Chile, es bien conocido en todo el mundo el problema de los niños y niñas desaparecidos, los gobiernos y las organizaciones de derechos humanos han impulsado la búsqueda y han recuperado parte de esos desaparecidos, y se ha perseguido a los responsables.

¿Cómo pueden acusar de dictadura a Venezuela y Cuba, cuando desde el gobierno y los restantes poderes mantienen calles, plazas, monumentos, que glorifican a los asesinos ¿esa es su referencia de democracia? ¿ese es el ejemplo que difunden? ¿imaginan en Buenos Aires, en Santiago de Chile, en Alemania, en Italia o en Camboya, calles, avenidas, plazas, murales y monumentos que glorifiquen a Videla, a Pinochet, a Hitler, a Mussolini, a Pol Pot? ¿Dónde empieza la primera lección democrática sino es en la NO glorificación de los dictadores, y Sí en una condena de los dictadores, y en la formación de la población en el respeto y la igualdad y justicia sociales?

¿Cómo pueden acusar de dictadura a Venezuela y Cuba cuando los continuadores de Franco incumplen los tratados internacionales de Derechos Humanos que se refieren al derecho de víctimas y familiares a su reconocimiento, indemnización y corrección de los males causados desde el Estado, cuando no suprimen la Ley de Amnistía, ley de punto final, que es anterior a la Constitución, ley que protege a los asesinos. En todos los países esas leyes de punto final que se otorgaban los asesinos, después han sido derogadas.

¿Cómo pueden acusar de dictadura a Venezuela y Cuba cuando ninguna de estas naciones tienen el presente denunciado por los Organismos Internacionales de Derechos Humanos y sí lo tiene el Estado Español? ¿Cómo pueden acusar de dictadura a Venezuela y Cuba cuando se le pide al gobierno español desde los Organismos Internacionales de Derechos Humanos que entre en el campo democrático y del derecho y la justicia democrática poniendo en marcha los mecanismos jurídicos para ello.

Ni en Venezuela ni en Cuba sus jefes de Estado han sido promovidos por dictadores genocidas teniendo a su cargo crímenes de lesa humanidad. Ni en Venezuela ni Cuba la sucesión del Jefe de Estado la otorga un asesino ni un espermatozoide, y en el Estado Español sí. Tanto en Venezuela como en Cuba la dirección del país la otorgan los ciudadanos con sus votos, pues aunque los fascistas quieran negarlo o no reconocerlo, en los dos países hay elecciones democráticas. ¿Quiere usted saber sobre las elecciones en Cuba?: consulte en http://www.cubainformacion.tv, y una vez en la página vaya al apartado Cubainformacion recomienda: ¿En Cuba no hay elecciones?

Tradición y barbarie de los continuadores de la dictadura española. Llevamos 70 años de retraso en derechos humanos, y mientras no se resuelvan los conflictos creados bajo la dictadura sus defensores seguirán en los órganos de decisión, seguirán en el poder, o tendrán más poder que los demócratas: Mire, por ejemplo, el valor de las elecciones en el estado español, el valor del voto de los partidos gobernantes es infinitamente mayor que el de la izquierda, no es un voto igual a otro, lea el artículo publicado en rebelion.org: A propósito de la reforma de la Ley electoral. ¿Tramposos o demócratas?, escrito por Ramón Trujillo, salió el 22-03-2010; y no están dispuestos a reformar la ley electoral ¿y hablan de dictadura en Venezuela y Cuba?

¿Cómo pueden acusar de dictadura a Venezuela y Cuba? ¿Por qué no enseñan los indicadores internacionales? ¿Por qué no comparan los estudios llevados a cabo por los organismos de Derechos Humanos? Les invito a conocer la verdad, les invito a consultar un pequeño libro que contiene los datos necesarios para ello:

Título: Doble moral: Cuba, la Unión Europea y los Derechos Humanos.

Autor: Salim Lamrani.

Editorial: Hiru.

Ramón Pedregal Casanova es autor de Siete Novelas de la Memoria Histórica. Posfacios. Editado por Fundación Domingo Malagón y Asociación Foro por la Memoria.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.