La locomotora de perder puestos de trabajo sigue su ritmo. En cinco años de crisis, la economía española ha destruido 3,17 millones de empleos. Si hasta 2007 se creó una media anual de 627.000 empleos, entre 2008 y 2012 se han destruído unos 615.000 puestos de trabajo cada año. Son cifras recopiladas por el colectivo […]
La locomotora de perder puestos de trabajo sigue su ritmo. En cinco años de crisis, la economía española ha destruido 3,17 millones de empleos. Si hasta 2007 se creó una media anual de 627.000 empleos, entre 2008 y 2012 se han destruído unos 615.000 puestos de trabajo cada año. Son cifras recopiladas por el colectivo de investigación social IOE en su informe «Una lectura de la crisis», como parte del proyecto Barómetro Social de España.
A partir de los datos de Eurostat y de la Encuesta de Población Activa, el último informe del Barómetro Social muestra, en el epígrafe de empleo, las principales cifras que han marcado el paso del milagro al desastre que ha vuelto a saltar hoy a las portadas. Si en 2005/2006 la tasa de paro igualó a la media europea, la tasa del 27,2% conocida hoy casi triplica el dato europeo del 10,5% facilitado por Eurostat en agosto.
El motivo de este salto, apunta IOE, es «principalmente la elevada tasa de temporalidad» y «la precariedad de los puestos de trabajo en sectores muy sensibles al ciclo económico». En 2007, año cumbre del ‘boom económico’, la tasa de contratación temporal entre la juventud y la población inmigrante alcanzaba, según destaca IOE, el 63% y el 51%. Son principalmente esos puestos los que han sido arrasados, aunque los datos de la EPA conocidos hoy muestran que la destrucción de empleo comienza a cebarse también con los puestos fijos: sólo el sector privado eliminó 78.200 empleos indefinidos entre enero y marzo.
Así, dentro de la crisis los peores años fueron 2009, año en que se destruyeron 1.369.000 puestos de trabajo, y 2012, cuando tras dos años de políticas de recortes la pérdida de empleos alcanzó la cifra de 822.000. Los datos publicados hoy por la Encuesta de Población Activa sobre el primer trimestre de 2013 indican que, lejos de las interpretaciones del Gobierno, la tendencia continúa: 322.300 empleos menos entre enero y marzo de este año.
Entre 2007 y 2012, la proporción de personas desempleadas que llevan más de un año buscando trabajo, denominadas paradas de larga duración, ha pasado del 21 al 49% de la población desocupada entre 2007 y 2012; quienes no reciben ninguna prestación (ni contributiva ni asistencial) han subido del 23,5 al 49,6%; y el porcentaje de hogares con todas las personas activas en paro se ha cuadruplicado en el mismo periodo: del 2,4% al 10,1%. Los datos de la primera EPA de 2013, no incluidos en el informe, muestran que el número de hogares con todas las personas en paro ha llegado a 1.906.000.
Esta realidad está teniendo efectos sobre la distribución de la riqueza. Más de 9 millones de personas, entre asalariados y personas en desempleo, integran ese 49,8% de la fuerza de trabajo cuyos ingresos mensuales no superan los 962 euros al mes (menos de 1,5 veces el Salario Mínimo Interprofesional). Sólo en el capítulo de ingresos por rentas salariales, los datos extraídos de la Agencia Tributaria en 2012 muestran que del otro lado un 0,8% de personas asalariadas (156.000 personas) perciben un salario medio mensual de 12.000 euros. Se trata, advierte IOE, «de un grupo social formalmente asalariado pero cuyas funciones son las de dirección de empresas representando directamente los intereses de sus propietarios».
Fuente: http://www.diagonalperiodico.net/global/tres-millones-empleos-menos-desde-inicio-la-crisis.html