Increíble (pensarán) pero cierto (no duden de ello: a los papeles me remito). El DOG tiene mando en esta plaza y, hay que admitirlo, la verdad es la verdad la diga Agamenón, su porquero o el diari oficial de la Generalitat. No es ninguna exageración, no es un desvarío de un ciudadano que ha perdido […]
Increíble (pensarán) pero cierto (no duden de ello: a los papeles me remito). El DOG tiene mando en esta plaza y, hay que admitirlo, la verdad es la verdad la diga Agamenón, su porquero o el diari oficial de la Generalitat. No es ninguna exageración, no es un desvarío de un ciudadano que ha perdido el juicio ante la oleada de «soberanismo»-independentismo que acecha por doquier y con mucha pero que mucha insistencia. ¡Menudo 2014 que nos espera! ¿Qué haré yo con la bandera republicana en mi balcón el próximo 11 de septiembre?
Una orden reciente del consejero de Presidencia, Francesc Homs, un excelente vendedor de humo que se hace llamar «Quico» entre amigos y adversarios políticos, una de las manos derechas del neoliberal rei Artur, establece la creación -¡por el procedimiento de urgencia!- de un registro de «adhesiones a propuestas impulsadas por el Gobierno de la Generalitat» Como han leído, sin cambiar una coma, sólo traduzco. Se creará, así está anunciado, en los próximos meses a no ser que algún golpe de racionalidad y sensatez haga acto de presencia (y cause efectos prácticos) en el ámbito de la política catalana (escenario, admitámoslo, altamente improbable).
¿A quién va dirigida la propuesta? A ciudadanos, a colectivos y aentidades, a todas las personas y a todas las asociaciones que deseen hacer constar su apoyo a las políticas del Gobierno catalán de los mejores privatizadores «independentistas». Si lo desean, podrán hacerlo a través del registro de adhesiones anunciado. La orden incluye también la posibilidad de obtener el consentimiento de la persona o del colectivo para difundir esas adhesiones urbi et orbe e incluso de hacer un tratamiento estadístico, no concretado, de las mismas. Por ejemplo: ¿qué porcentaje de ciudadanos colomenses ha manifestado su apoyo «a las políticas del gobierno catalán»? ¿Cuál es su desviación respecto a la media de los colectivos y ciudadanos de la dreta del Eixample o de la «zona nacional», Diagonal para arriba, de Barcelona?
La propuesta, dicen, y hay que tener rostro para una formulación de estas características, «se enmarca en las políticas de transparencia y participación». ¿Existe una política de transparencia del gobierno Mas? ¿Dónde se ubicaba? ¿Política de participación ciudadana? ¿De participación de los trabajadores, de los agredidos, de los desfavorecidos,…? Por favor, apiádense, un poco de cicuta… sólo un poco, la imprescindible.
¿Se imaginan en concreto un registro de estas características? ¿Se hacen idea de las posibles consecuencias? Yo soy catalanista com cal, tú no, no estás registrado donde hay que registrase. Yo soy más catalanista y patriota que tú: estoy registrado no sólo como ciudadano sino como miembro del colectivo «Botiflers fora!». Pues yo, dirá un tercero o un cuarto o incluso un quinto, soy un catalanista-nacionalista-independentista en estado puro: figuro -y permito la agitación de mi apoyo- en los tres, como catalán, como miembro del colectivo «El Barça és més que un club» y como miembro de la entidad «ICV(indepe), la izquierda por la independencia de debò». Por cierto, ¿y qué pasará con Messi? ¿Se registrará después de abonar sus deudas a Hacienda?
Queda vislumbrar cómo agitará el gobierno con tales registros, qué vientos levantará, qué presiones ejercerá, qué publicidad política diseñará. Nuevos capítulos de la serie, muy pronto en pantalla.
Por lo demás, ¿ha sido idea del propio gobierno unionista-convergente o ERC ha prestado su apoyo o incluso la generación de la propuesta?
…Pero mejor pensado: ¿estaré errado?, ¿habré metido la pata?, ¿no me vuelto a enterar?, ¿será en otro registro en el que están pensando? Claro, ahora caigo.
¿Por qué no un registro de ciudadanos y ciudadanas que muestren su total disconformidad con su política privatizadora de la sanidad pública, con su lema «la salud no es un derecho», con sus risotadas infames cuando hablan de campesinos andaluces y del paro, con sus mofas a los niños andaluces y gallegos por su modo de hablar castellano, con su política de destrucción -tocada y hundida- de la educación pública, con su agresión infame e inhumana a los más necesitados, con su intento de liquidación del PIRMI, con sus nuevos impuestos para las clases trabajadores, con sus matriculas universitarias para excluir ciudadanos, con su política represiva que recuerda épocas supuestamente superadas, con su diseño de deconstrucción del Memorial democrático antifranquista…? ¿Sobre todo esto van a abrir un registro de ciudadanos críticos enfrentados a una política ultraneolibral, la de este gobierno irresponsable de los mejores privatizadores, incluyendo en él a un antiguo miembro de la izquierda comunista, el señor Mascarell, y a otro más de la izquierda más ortodoxa, el señor catedrático Mas-Colell, un ex cuadro universitario del PSUC?
Por cierto, ¿me habrán apuntado ya a esta lista? ¿Se apuntan ustedes?
Salvador López Arnal es miembro del Frente Cívico Somos Mayoría y del CEMS (Centre d’Estudis sobre els Movimients Socials de la Universitat Pompeu Fabra de Barcelona; director Jordi Mir Garcia)
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