Mientras la premio Nóbel iraní Shirin Ebadi criticó, en el Forum de Barcelona, la represiva interpretación del Islam que hacen los actuales gobernantes de su país, decenas de mujeres eran arrestadas en Irán por no llevar bien puesto el velo islámico. La Policía de la Moralidad quiere «reencaminar» a las más jóvenes. Policía de la […]
Se trata de una campaña oficial lanzada por el Gobierno que, según informó la agencia de noticias Europa Press, habría comenzado hace un par de semanas.
Según informa dicha agencia, hasta ahora han sido varias las operaciones llevadas a cabo por los agentes de la singular policía, especializada en comprobar que se cumplan las normas de la ley islámica que rige en Irán.
De hecho, el domingo recién pasado se detuvo a decenas de mujeres jóvenes que se encontraban en centros comerciales de Teherán, capital de Irán, y que fueron apresadas por no cumplir las estrictas normas de la vestimenta islámica.
Los operativos incluyen la detención de mujeres que llevan mal puesto el velo, aquellas que usan túnicas transparentes o muy cortas, o que derechamente, visten de forma occidental. Pero eso no es todo. La Policía de la Moralidad se dio el gusto de allanar las tiendas de varios centros comerciales, confiscando ropas «poco morales».
Las mujeres son detenidas, fichadas y citadas a un curso obligatorio sobre moral islámica. Si no asisten a dicho «taller», la condena carcelaria es el siguiente paso.
Paralelamente, la agencia de noticias oficial Irna señaló que en la histórica ciudad de Isfahan, la policía habría prohibido la entrada a espacios públicos a mujeres que no estaban vestidas con el velo apropiado y como agregado, la norma incluye la prohibición de música en vivo en todos los espacios públicos.
¿Retroceso iraní…?
Oficialmente, el velo es obligatorio para todas las mujeres, iraníes o extranjeras, que viven en Irán. Ellas deben llevar el tradicional chador, un pañuelo largo, generalmente negro, que cubre el cuerpo de la mujer de la cabeza a los pies, o una especie de túnica y un fulard (especie de bufanda) que esconda sus cabellos de la vista de los hombres.
Después de ganar las elecciones parlamentarias en febrero, los líderes de línea dura advirtieron que no iban a tolerar lo que describieron como corrupción social.
Desde la Revolución Islámica de 1979, las leyes iraníes ordenan que todas las mujeres jóvenes deben usar el velo y cubrir sus cuerpos con un largo traje negro. De lo contrario, enfrentan duras multas e incluso la cárcel.
El analista regional de la BBC, Sadeq Saba, indicó que muchos observadores creen que los operativos llevados a cabo en Irán podrían resultar contraproducentes en un país caracterizado por el aumento de una población joven, educada y, cada vez, más rebelde.
Por su parte, la destacada abogada iraní y premio Nóbel de la Paz 2003 Shirin Ebadi, criticó recientemente en el Forum de Barcelona las interpretaciones «machistas y erróneas» del Islam que practican los gobernantes de su país para discriminar a las mujeres.
«Las leyes actuales en Irán, las leyes islámicas, no son más que una excusa para pisotear los derechos de la mujer», aclaró Ebadi durante su participación en Forum de Barcelona.
Según la jurista, «el Islam, la religión musulmana, no dice que la mujer deba estar sometida al hombre: son los gobernantes de Irán los que hacen una mala e interesada interpretación de lo que establece la religión islámica».
Shirin Ebadi (57 años) fue la primera mujer que se convirtió en jueza en su país. Tras el triunfo de la revolución de Jomeini y los ayatolas en 1979 fue obligada a renunciar «porque según su ley, las mujeres no estaban capacitadas para juzgar», explicaba el sábado.
Ebadi detalló otros atropellos para descubrir que «el valor de la mujer en Irán es la mitad del de un hombre: ellas sólo puedan heredar la mitad de lo que hereda un hombre. En un juicio el testimonio de dos mujeres es equivalente al testimonio de un varón: vale sólo la mitad».