Los presidentes de los dos países que más contribuyen al calentamiento global no acudirán a la cumbre del clima que se celebra en Dubái (Emiratos Árabes Unidos). Tampoco irá el papa Francisco, que ha cancelado a última hora por temas de salud.
Este jueves empieza una nueva edición de la COP28. A esta cita climática acudirán ministros, jefes de Estado, y negociadores de casi 200 países. Menos algunos, a pesar de estar en la lista de asistentes provisional y a pesar de ser actores cruciales en asuntos clave como la financiación climática, la reducción de emisiones y la transición energética.
Es el caso de los líderes de potencias como Estados Unidos y China, principales responsables de las emisiones de gases de efecto invernadero. Tampoco acudirá el papa Francisco, a pesar de que sí estaba prevista su presencia.
Los grandes responsables históricos del cambio climático tampoco van
Hace dos semanas, Estados Unidos y China –los dos mayores responsables del calentamiento global– acercaron posturas con un acuerdo en el que prometieron reanudar la cooperación climática, así como impulsar las energías renovables como alternativa a los combustibles fósiles.
Sin embargo, ninguno de los dos dirigentes, ni Joe Biden ni Xi Jinping, acudirán a la cita climática. Ambos países enviarán representantes de alto nivel. En el caso de Estados Unidos, la Casa Blanca no ha dado de momento explicaciones por la ausencia de Biden.
El enviado especial para el Clima de Estados Unidos, John Kerry, transmitirá en Dubái la apuesta de su país por la fusión nuclear. Asimismo, apoyarán la creación de un nuevo fondo para ayudar a los países pobres a hacer frente a los daños causados por el clima, pero quiere que el acuerdo deje claro que ningún país estará obligado a contribuir a él.
La COP de este año también tiene lugar en un momento de tensión geopolítica provocada por la guerra entre Israel y Palestina, en la que Estados Unidos está muy implicado. Sin embargo, los presidentes de ambos bandos sí asistirán, en un principio, a la conferencia por el clima de las Naciones Unidas.
La presencia de los líderes políticos se limita a los primeros días de la cumbre. El viernes y sábado, todos pasarán por el pleno principal para ofrecer un breve discurso –máximo tres minutos– apelando a la acción y sus intenciones durante las negociaciones. El presidente de España, Pedro Sánchez, está previsto que hable el viernes 1 a partir de las 18:30 de la tarde hora local, según fuentes del Gobierno.
El Papa Francisco, obligado a anular su viaje
Podría haber sido la primera edición de la COP a la que un papa asistía, pero finalmente no será así. «Con gran pesar», el papa Francisco ha tenido que anular su viaje de este viernes por recomendación de sus médicos tras su reciente enfermedad respiratoria.
Los planes del Pontífice para esta cumbre eran mantener alrededor de una treintena de reuniones con varios jefes de Estado, líderes religiosos y asociaciones. El papa también tenía la intención de inaugurar el «Pabellón de la Fe» antes de volver. Este recinto, instalado en la Expo City Dubái, se trata del primer pabellón religioso de este tipo en la historia de las conferencias de las Naciones Unidas sobre el clima y servirá como plataforma mundial para promover el compromiso religioso y el diálogo interreligioso en la aplicación de medidas eficaces contra la crisis climática.
De hecho, en el pabellón, el papa firmaría la declaración Confluence of Conscience con el presidente de Emiratos Árabes Unidos y el imán de la mezquita Al Azhar en Egipto. En este documento, las religiones tendrían previsto reafirmar su compromiso para enfrentar los desafíos del cambio climático.
El portavoz de la Santa Sede, Matteo Bruni, explicó este martes que tanto el papa como la Santa Sede siguen queriendo participar en los debates de los próximos días en Dubái, por lo que «se definirá lo antes posible el modo» en que realice una intervención.
La industria fósil se cuela en las negociaciones
Esta misma semana, la cadena británica BBC reveló a través de unos documentos filtrados que Emiratos Árabes Unidos tendría planes para discutir acuerdos petroleros y gasísticos con 15 países, entre ellos China. Los papeles apuntan que la petrolera estatal Adnoc quería trasladar a China que “está dispuesta a evaluar de manera conjunta oportunidades de gas natural licuado internacionales” en Mozambique, Canadá y Australia.
El abandono de los combustibles fósiles será un punto crucial a discutir en las próximas negociaciones. Sin embargo, esta cumbre no solo tiene como presidente a Sultan Ahmed Al Jaber, consejero delegado de la empresa petrolera estatal Adnoc, sino que cuenta con empresas petroleras y grandes bancos que financian proyectos fósiles entre sus patrocinadores.
Al Jaber, por otro lado, fichó en su equipo a Felipe Juan Froilán. El nieto del rey emérito Juan Carlos I y la reina Sofía, que trabaja para su petrolera estatal, forma parte de la organización del evento, una noticia que no pasó desapercibida en junio cuando la publicó el periódico La Razón.
En este contexto, no son muchas las esperanzas puestas en esta COP. Pero sus participantes, sobre todo los líderes nacionales, tienen la oportunidad de demostrar lo contrario: pueden mejorar sus planes nacionales de acción climática para conseguir limitar el aumento de la temperatura global a 1,5 ºC.
Este año marcará la finalización de la primera Evaluación Global (GST), conocida como la revisión del Acuerdo de París, para evaluar cómo avanza la respuesta de todos los países a la crisis climática y cómo corregir el rumbo. En esta puesta en común, se establecerán puntos de referencia para intentar conseguir la reducción de emisiones globales para 2035.
Fuente: https://www.climatica.lamarea.com/cop28-que-lideres-nacionales-no-van/