La dirigente estudiantil expresó su confianza en que el libro despierte «discusiones y debates sobre cómo vamos unificando ciertas luchas en pos de un horizonte común»
El libro Podemos cambiar el mundo (2012), de la líder estudiantil chilena Camila Vallejo, fue presentado el pasado domingo 8 de enero ante unas 600 personas que colmaron el Parque O’Higgins de Santiago, sede de la tradicional Fiesta de los Abrazos realizada por el Partido Comunista de ese país latinoamericano, con la cual festejó su centenario.
Al lanzamiento del esperado volumen asistieron Daniela Rodríguez, gerente de la Editorial La Vida es Hoy; Marcelo Castillo, presidente del Colegio de Periodistas; Daniel Núñez, secretario general de la Universidad Arcis, y la propia Camila Vallejo.
Podemos cambiar el mundo, publicado por las editoriales Ocean Sur y La Vida es Hoy contiene diversos artículos y una entrevista inédita a Vallejo, figura más visible de las movilizaciones estudiantiles que, con sus demandas de educación pública, gratuita y de calidad, estremecieron el país al punto que la catapultaron como la persona más importante del año 2011.
Durante su período como presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECh) y representante de la Confederación de Estudiantes de Chile, entre 2010 y 2011, su rostro, su voz y su pensamiento se convirtieron en la carta de presentación internacional del movimiento contra el aumento de la mercantilización de la educación en Chile, al tiempo que ella se erigía en una de las líderes con el futuro más prometedor de la joven generación de luchadores sociales y políticos de izquierda que hoy emerge en América Latina.
La líder estudiantil, en declaraciones a raíz de la presentación de su primer libro, exhortó al movimiento social «a salir de la marginalidad» y afirmó que «no basta con hacer propuestas para que otros las lleven a cabo».
«Ya basta de vivir en la marginalidad, de ser espectadores. Hay que salir a la cancha y ahí meter los goles, porque después nos pasa que nuestras propuestas son recogidas, pero no nos damos cuenta de la ‘letra chica’ que nos imponen y que cambian todo el sentido de lo que aspirábamos», señaló.
Durante siete meses, los jóvenes pusieron en jaque al gobierno y convirtieron a Sebastián Piñera en el presidente más impopular de los últimos 20 años, con un apoyo de apenas 26 por ciento.
La joven de 23 años, actual vicepresidenta de la FECh, dijo que «me preocupa el hecho de que los distintos sectores de nuestra sociedad deleguen en los jóvenes y los estudiantes la responsabilidad de hacer los cambios».
«Nosotros solos no vamos a hacer los cambios. Los jóvenes no tenemos las herramientas, necesitamos que esta lucha sea transversal, en tanto organizaciones políticas, sociales, sindicales, pero también intergeneracional», aseveró.
«Es muy importante unificar la lucha con nuestros padres, con los trabajadores y también con el adulto mayor» pidió la joven y recordó su diálogo con la ex ministra del Trabajo de la Unidad Popular (1970-1973), Mireya Baltra, quien le hizo presente la exclusión que viven los ancianos y las condiciones deplorables de vivienda y salud.
«El movimiento social tiene condiciones para pasar de la crítica al modelo (neoliberal) y del accionar testimonial y contestatario a la construcción estratégica y a la acción política efectiva, construyendo mayorías y dotando de viabilidad las propuestas», apuntó Vallejo.
Además, propuso «tensionar el aparato institucional desde dentro y desde fuera, aprovechando cada grieta o error de este cuidado andamiaje de contención social para derribar todo lo que deba ser transformado», completó la joven.
En declaraciones al diario local La Nación, Camila Vallejo expresó su esperanza de que el libro Podemos cambiar el mundo pueda contribuir «a todo lo que son las discusiones y debates que vienen de aquí en adelante en relación a cómo vamos unificando ciertas luchas en pos de un horizonte común».