Recomiendo:
0

Desórdenes socio-políticos a la USA

Fuentes:

Ya van cinco semanas desde que las autoridades federales de la Aduana de Estados Unidos -por órdenes del Departamento de Comercio- nos quitaron parte de la ayuda humanitaria que llevábamos para Cuba con la 16va. Caravana de Pastores por la Paz. Mientras tanto, nosotros seguimos de pie, en lucha y con el mismo deseo de […]

Ya van cinco semanas desde que las autoridades federales de la Aduana de Estados Unidos -por órdenes del Departamento de Comercio- nos quitaron parte de la ayuda humanitaria que llevábamos para Cuba con la 16va. Caravana de Pastores por la Paz. Mientras tanto, nosotros seguimos de pie, en lucha y con el mismo deseo de seguir luchando para recuperarla y llevarla al pueblo de Cuba.

Entretanto, y para no perder la costumbre, siguen floreciendo una serie de desórdenes socio-políticos los cuales permiten la floración de los disparates capitalistas, desbarros neo-liberales y barbaridades imperialistas de nuestra llamada democracia representativa. Representación que se distingue por darle la bendición y la protección a la clase dominante y gobernante y joderle la vida al pueblo trabajador.

Uno de estos desórdenes socio-políticos lo es la decisión de la Corte de Apelación de Atlanta de suspender las sentencias de los Cinco Héroes Cubanos que les fueron dadas en el circo político de Miami que le llaman dizque Corte de Justicia y seguir reteniéndoles en vez de ponerles en libertad. Tres jueces -los cuales no son liberales, ni comunistas ni mucho menos simpatizantes de la causa de la revolución cubana- quedaron asombrados de todas las contradicciones de este proceso legal el cual se distinguió por violación a los derechos humanos y civiles, manipulación de la evidencia, la mentira, la coerción y la violencia, o sea, el terrorismo del liderato del exilio cubano en Miami. Lo hemos dicho, lo hemos trabajado y lo seguiremos diciendo y trabajando, estos cinco profetas de la paz y luchadores antiterroristas -René González, Ramón Labañino, Fernando González, Antonio Guerrero y Gerardo Hernández- entraron de pie y saldrán de pie de estas cárceles inhumanas las cuales tienen la intención de doblegar a la revolución cubana. Nada ni nadie matará al espíritu de lucha de estos hermanos y contrario al liderato del exilio cubano, estos ni se venden, ni se arrastran ni se ponen boca-abajo. No hay cárcel, ni castigo físico o psicológico que les haga traicionar su dignidad y patriotismo. Son como nuestro hermano y compañero Jesús, listos para morir si es necesario para la causa de la justicia. A toda esta realidad se suma la decisión del «Grupo de Trabajo de la ONU sobre Detenciones Arbitrarias» el cual declaró el pasado mayo de 2005 que la detención de estos profetas del amor había sido ilegal. Por lo tanto pidió al gobierno de Estados Unidos a comenzar a trabajar en dirección de lograr el que este caso se resuelva de una vez y por todas.

Esta semana tuve la oportunidad de conversar con uno de ellos por teléfono, Ramón Labañino, y su estado de ánimo, luego de siete años de encarcelación injusta, sigue siendo apetecible y apasionante. Agradece de todo corazón todo el trabajo que se sigue realizando para lograr sus excarcelaciones y retornarles junto a sus seres queridos a la patria de José Martí.

Otro de los desórdenes socio-políticos está ocurriendo en estos momentos en el Congreso de Estados Unidos en donde, tanto en la Cámara como en el Senado, se llevan a cabo reuniones este mes de agosto con la intención de finalizar la legislación del mal llamado Acta Patriótica de Estados Unidos. Las nuevas secciones que se van a legislar se distinguen por un lado por ser una excusa de la seguridad nacional y por otro lado por justificar la violación a los derechos civiles de la población estadounidense.

El pánico colectivo y la manipulación psicológica concerniente a la seguridad nacional han sido dos de los principales instrumentos de control para convencer al pueblo estadounidense de la necesidad de perder sus derechos civiles. Estas son señales de una dictadura fascista, lo cual sigue distinguiendo el estilo administrativo del gobierno de Bush. Por lo tanto, sigamos descubrimiento, denunciando y combatiendo con nuestras acciones los desórdenes socio-políticos a la USA. Pongamos en práctica el don de la problematización y recordemos que es necesario orar por lo que necesitamos y trabajar por lo que queremos. ¿Queremos paz con justicia? Vamos a trabajarla.

[email protected]