El automovil, con pocas dudas, es el artilugio central del siglo XX, y probablemente lo será también del siglo XXI… Y mas allá. Este chisme nos ha permitido hacer llegar al ultimo rincón toda suerte de productos y servicios. En la actualidad, su uso está completamente trastornado en el sentido de que, en lugar de […]
El automovil, con pocas dudas, es el artilugio central del siglo XX, y probablemente lo será también del siglo XXI… Y mas allá.
Este chisme nos ha permitido hacer llegar al ultimo rincón toda suerte de productos y servicios. En la actualidad, su uso está completamente trastornado en el sentido de que, en lugar de ser una herramienta util aprovechada para un fin concreto y necesario, está siendo derrochada y mal utilizada para crear un caos absurdo e innecesario, para beneficio de unos pocos.
La persecución de la libertad de movimiento nos ha llevado al atasco contaminante… ¿Es esto un castigo bíblico ineludible?. Algunos proponen la bicicleta, y sin que dejen de tener mucha razón, tendremos que pensar que no todo el mundo puede usarla. Yo propongo el coche electrico (o la bicicleta electrica, o la motocicleta electrica, o el autobus electrico).
El automovil determina el diseño de las ciudades y el territorio. Entiendo por automovil un vehiculo de transporte autónomo, que facilita el movimiento de personas y mercancias. Podriamos incluir en la «clase automovil» a los autobuses, camiones, motocicletas, bicicletas… Auto-movil: Se mueve por si mismo, sin necesidad de railes.
Desde luego el tren no es un automovil… ¿Podría llegar a serlo? Esta es otra cuestión que no abordaré por el momento.
La literatura e ideario colectivo acerca de este invento (que no es mas que el sucesor tecnologíco de los carros tirados por animales que existen desde que existe la rueda, es decir, mas allá de lo que la historia puede recordar), es ingente: Es el peor de los inventos diabólicos para algunos, y el mejor amigo del hombre para otros. La única razón para vivir de algunos… Uno de cada tres anuncios en televisión.
¿Que pasaría si un dia, desaparecieran todos los automóviles? Pues, simple y llanamente, que volveríamos a la edad de piedra: No habria medicinas, comida, agua, electricidad, materiales de construcción. No habría sencillamente nada. No habria médicos, ni hospitales, no habria tubos ni cables de cobre, ni mesas, sillas, ni lamparas. Probablemente tampoco habría libros, porque no habria papel.
La sociedad humana es una sociedad centrada en el transporte. ¿Puede usted imaginarse que en su pueblo, o ciudad, tuviera que haber minas de cobre, celulosa, industrias químicas, farmaceuticas, metales, plasticos, etc, etc, etc, porque no hubiera manera de traerlos desde otros lugares? ¿Podria usted encontrar en su pueblo lamparas electricas, o neveras hechas en su mismo pueblo?
El transporte normalmente lo dividimos en dos categorias: Colectivo e Individual. U otras dos categorias: Publico o Privado. U otras dos categorias: De personas y de mercancias. U otras tres categorias: Terrestre, Aereo y Maritimo-fluvial.
Pero… ¿Son estas categorias las correctas para hacernos una idea de lo que significa el transporte y lo necesario que es para la sociedad humana global?… ¿Que tal otras categorias, como por ejemplo: Autonomo o de ruta fija periódica? O estas otras: Contaminante y no contaminante. O estas otras: Sostenible e Insostenible.
Pregunte a cualquiera que clasifique en todas estas categorias al automovil y obtendrá usted la siguiente respuesta: Automovil = Individual, Privado, Personas, Terrestre, Autonomo, Contaminante e Insostenible.
Esto es lo que contestariamos todos ante dicha pregunta. Pero, de los 7 calificativos, hay cinco realmente muy discutibles y solo dos que son correctos y evidentes: Terrestre y Autónomo. El resto, no tienen nada que ver con la palabra automovil, sino con «El automovil actual».
«El automovil actual» no es el unico automovil posible. Solo es el que nos ha traido un modelo económico-social (que tampoco es el unico posible), en el que hay una serie de prioridades, todas determinadas por el mantenimiento de un cierto grado de poder por parte de determinados grupos humanos: Petroleras, Industria del Automovil, Publicidad, Estado y Obras publicas, y por fin el Consumidor.
Está muy claro que para realizar trayectos fijos periodicos, es mucho mejor usar el transporte colectivo.
Pero también está muy claro que de las tres horas diarias que el español medio traga de television, una hora es de anuncios, y veinte minutos de anuncios de coches que insisten en los 7 calificativos. Solo unos 20 segundos para recibir el mensaje-castigo de «Usa el transporte publico».
Por otro lado, mientras el transporte publico sea de combustión (con lo facil que sería poner algun tipo de enchufe en las paradas de autobus, de forma que los 30 segundos que el autobus está parado subiendo y bajando viajeros, aprovechase para cargar baterias o condensadores lo suficiente para llegar a la siguiente parada), no parece muy ecologico que digamos elegirlo, en contra de nuestra sagrada libertad de movimientos.
Así pues, hay demasiados intereses alrededor de «El automovil actual». Las petroleras que lo que quieren es vender petroleo. Los fabricantes, que lo que quieren es que sea complicado fabricar coches, para que la competencia se reduzca a un nucleo limitado de empresas mundiales. Los medios de comunicación que tienen que anunciar aquello por lo que se les paga, sea esto lo que sea. Las oficinas de patentes que vigilan los intereses de los fabricantes. El estado, que cobra un monton de impuestos a los gasolineros y a los automoviles. Y en ultima instancia los consumidores, que no podemos llegar a entender que 20 segundos de promoción del transporte publico (para rutas periodicas fijas) nos gusten tanto como 20 minutos de «libertad en coche».
Todos diremos: «Yo cogeré el transporte público cuando todo el mundo haga lo mismo. El coche eléctrico es igual de malo: El problema no es la tecnologia del coche, sino el elevado numero de coches en las calles y carreteras». Y ciertamente tendremos razón. Estamos en un bucle orquestado por unas pocas empresas para que «el automovil actual» sea el único posible. Hasta el punto de que algunas voces concienciadas se alzan para decir que el problema no es «el automovil actual», sino el automovil a secas.
La conclusión es evidente: En las proximas decadas, vamos a quemar todo el petroleo existente, vamos a generar todo el CO2 posible, vamos a reprimir a los creadores de coches eléctricos limpios y eficientes, no vamos a usar para nada el transporte público, que seguirá siendo de combustión, vamos a recalentar el planeta entero y vamos a bombardear a todo el que se oponga.
Cuando cojas tu coche de combustión, recuerda que eres libre de pensar que cuando pisas el acelerador estas matando gente en el otro lado del mundo. Probablemente prefieras no pensarlo.
Pero piensa también que un coche electrico solo necesita (en la latitud de españa) unos 10 metros cuadrados de paneles fotovoltaicos de los actuales (algo mas de un cuadrado de 3×3 metros hoy, y algo menos mañana) para ser 100% limpio y sostenible. Y no requiere matar a nadie. De forma que cuando eludas tu responsabilidad ya sabes a quien echarle la culpa.
Si lo piensas bien, no hace falta diluirla demasiado.
Alejandro Bonet Estudiante de Las Matematicas.