Madrid, 8 mar (EFE).- La Comisión de Medio Ambiente del Congreso ha aprobado hoy, con el apoyo de todos los grupos salvo el PP, sustituir los 40.000 kilómetros de tuberías para agua potable hechas de fibrocemento que todavía quedan en España y que contienen amianto, un material considerado cancerígeno. El fibrocemento fue uno de los […]
Madrid, 8 mar (EFE).- La Comisión de Medio Ambiente del Congreso ha aprobado hoy, con el apoyo de todos los grupos salvo el PP, sustituir los 40.000 kilómetros de tuberías para agua potable hechas de fibrocemento que todavía quedan en España y que contienen amianto, un material considerado cancerígeno.
El fibrocemento fue uno de los materiales más usados en España entre 1940 y finales del siglo pasado, especialmente en todo lo relacionado con aislamientos, tanto por lo barato que era como por su flexibilidad.
La comercialización del fibrocemento se canceló en España en el año 2001, pero aún no se ha llevado a cabo su sustitución total en aquellos lugares donde está ni afrontado el problema de salud pública que genera, ha defendido hoy la diputada proponente, Eva García, de Unidos Podemos.
La proposición pide al Gobierno que lleve a cabo una auditoría de las tuberías de fibrocemento que quedan en España y apruebe un plan y calendario para su cambio por elementos que sean seguros.
La iniciativa se ha completado con una enmienda del PSOE en la que se plantea también la eliminación del fibrocemento en las instalaciones para el riego, así como la creación de una línea de financiación para que los municipios pequeños puedan llevar a cabo esta sustitución.
El PP ha justificado su rechazo a esta iniciativa alegando que sustituir el fibrocemento en tuberías de agua y potable y de riego supondría 90.000 kilómetros de tuberías que tendrían un coste de 60.000 millones de euros, una cifra muy elevada, a juicio de este grupo, teniendo en cuenta que la inversión del estado asciende a 9.000 millones anuales. EFE