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Entrevista a Francisco Báez Baquet sobre la industria criminal del amianto (y III)

«El triunfo de Bolsonaro puede llegar a derivar en una ‘marcha atrás’ en la prohibición del uso del amianto en Brasil»

Fuentes: Rebelión

Francisco Báez, ex trabajador de Uralita en Sevilla, autor de Amianto: un genocidio impune, inició en los años 70 del pasado siglo la lucha contra esta industria de la muerte desde las filas del sindicato de CCOO. Ha dedicado más de 40 años a la investigación sobre el amianto.   ***   Estábamos aquí. Por […]

Francisco Báez, ex trabajador de Uralita en Sevilla, autor de Amianto: un genocidio impune, inició en los años 70 del pasado siglo la lucha contra esta industria de la muerte desde las filas del sindicato de CCOO. Ha dedicado más de 40 años a la investigación sobre el amianto.

 

***

 

Estábamos aquí. Por cierto, cuando usted habla de bibliografía a revisar, ¿a qué documentos, a qué artículos, a qué ensayos se refiere? ¿Cómo los localiza?  

Los artículos o libros se localizan en las bases de datos disponibles, haciendo uso, mediante programa de búsqueda automática, de los tópicos adecuados, en solitario o combinados en simultaneidad. Hay, obviamente, los consabidos «trucos del oficio», que por mi parte aprendí por mí mismo, penosamente, mediante «ensayo y error». Yo utilizo mayormente el motor de búsqueda «PubMed», de la base de datos «MEDLINE», y al propio tiempo, usando también «Google» y «Google Académico». Cada recurso requiere de estrategias de búsqueda distintas. Me consta que hay quien, historiador en su cátedra universitaria, y ante sus alumnos de la disciplina de documentación científica, me pone como ejemplo de cómo debe de actuarse en este tipo de actividad como documentalista.  

¿Qué es eso de los residuos con contenido de amianto, del «certificado» mediante etiqueta https://www.diariodemallorca.es/palma/2018/10/17/uralita-abandonada-son-banya-etiqueta/1356662.html ? ¿En todos los productos, en qué productos?  

Esa información hace referencia a la letra «a» minúscula, con la que convencionalmente, y de forma universalizada, se ha convenido en señalizar a aquellos residuos o productos entre cuyos componentes figura el amianto. Su presencia nos está advirtiendo de la índole de ese contenido total o parcial, por cierto que de una forma poco expresiva, porque, en mi opinión y en la de muchos, también debiera de incluir la calavera con dos tibias cruzadas, que convencionalmente se usa para señalar a los productos tóxicos. Eso se hizo así en su momento, indudablemente por la influencia de la industria del amianto, y cuando éste todavía no estaba prohibido en ningún país.

A lo que el artículo hace referencia, es al hecho de que cuando esos residuos fueron abandonados, ya habían sido etiquetados como portadores de amianto, y que, por lo tanto, esa condición ya está acreditada, sin necesidad de análisis posterior. Es obvio que la susodicha etiqueta jamás se le adheriría, caprichosamente, a ningún producto que no contuviera al peligroso mineral.  

¿A qué refiere esta información que conozco también por usted? «4 millones de euros para cubrir el amianto en Altza, Donostia. Para que la próximas generaciones se coman el problema, si se acuerdan de que está debajo de ese montón de tierra. Y todavía dirán que es una solución eficaz y económica». ¿Por qué se emprenden estas malas soluciones, cuya equivocación salta a la vista?  

Meramente por una cuestión de costes comparativamente más reducidos. Entre las tres opciones -soterramiento y/o cubrición in situ, traslado a vertedero autorizado, en las apropiadas condiciones de seguridad, para su confinamiento y custodia permanente, o su inertización-, por ese mismo orden de exposición, resultan ser alternativas crecientemente más onerosas. La mejor y definitiva, resulta ser, al propio tiempo, la más cara, como ya hemos tenido oportunidad de explicar aquí mismo, con ocasión de habernos ocupado también del contencioso medioambiental generado en Toledo.  

El Col.lectiu Ronda ha estado muy activo en las jornadas de Barcelona y Castelldefels de las qu hablábamos antes. ¿Qué opinión le merece este bufete de abogados?  

Tendría, quizás, que darle una respuesta sibilina, pero «me mojaré» diciéndole que es evidente que su actuación ha supuesto ciertos hitos importantes, a despecho de que otros profesionales de la defensa de las víctimas del amianto, también hayan efectuado sus respectivas aportaciones, más o menos señaladas.

Por lo que respecta, en concreto, a los servicios jurídicos del sindicato Comisiones Obreras, estimo que sería muy positivo que ellos hicieran público un censo exhaustivo de los datos identificativos de todas las sentencias sobre amianto, alcanzadas a través de litigios gestionados por tales servicios jurídicos, con indicación de sus respectivas fechas de proclamación, y el resultado, favorable o no, a la parte demandante.  

Voy finalizando. Esta es una carta de Nuria Busto, Francisco es usted

Hola Francisco, soy Nuria Busto al abogada de la Asociación de Víctimas del Amianto de Euskadi. Tenemos también un caso de un estibador del Puerto de Bilbao y nos vendría muy bien conocer el contenido de esa sentencia de la que me remitiste varias notas de prensa.

¿Podrías enviármela? Gracias.  

Su respuesta:

Estimada Nuria:

Salvo que alguien me pase los textos, como ha ocurrido contigo misma en el pasado en anteriores oportunidades -lo que, por supuesto, te agradezco infinitamente-, solamente me queda el recurso, cuando hay ocasión, de acceder al texto de la sentencia buscada en cada oportunidad, a través de la consulta de la web del CGPJ, posibilidad de la que, por cierto, tú también fuiste «mi tabla de salvación», como supongo que recordarás.

Esto es así, hasta el extremo de que, al parecer, hay por ahí una sentencia en la que se me menciona expresamente, y a cuyo texto todavía no he podido acceder, hasta que «no se me levante el castigo» por parte de mi informante, a quien me permito pasarle copia de esta respuesta a tu correo, a ver si consigo «hacerle cosquillas» para que deje de seguir dejándome en el limbo de la información a medias.

En el caso concreto de los estibadores de Cádiz, solamente he tenido mero conocimiento del sentido de la resolución judicial, a través de lo publicado en Internet, fuentes de las que he dado traslado a posibles interesadas/os, entre quienes te incluí, dada tu condición profesional, e incluso por tu implicación personal en todo lo relativo a la afectación mortal por amianto, como es sabido.

Lamento, por consiguiente, no poder hacerte llegar el texto de la susodicha sentencia.  

¿Qué pasa con los estibadores de Cádiz? ¿En qué sentencia se le menciona exactamente?  

Nuestro intercambio epistolar hacía referencia al hecho de que el Juzgado de lo Social 1 de Cádiz, había dictado una sentencia, el 26 de septiembre de 2018, condenando solidariamente a la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz y a Sociedad Estatal de Estiba y Desestiba del Puerto de la Bahía de Cádiz, a abonar una indemnización de 150.000 euros, a los herederos de un estibador portuario, fallecido por un mesotelioma derivado de su trabajo en contacto con amianto.

Se me menciona en la sentencia Nº 193/18, del Juzgado de lo Social Nº 3 de Cartagena (Procedimiento Ordinario 389/2017), fechada en 16 de julio de 2018, y cuyo magistrado ponente fue el Iltmo. Sr. Don JOSÉ GRAU RIPOLL, con resolución denegatoria para la parte demandante.

En realidad, la cita correspondía al contenido del artículo por mí mencionado en uno de mis trabajos, y correspondiente a esta referencia bibliográfica:  

Anttila S, Sutinen S, Pääkkö P, Alapieti T, Peura R, Sivonen SJ Quantitative x ray microanalysis of pulmonary mineral particles in a patient with pneumoconiosis and two primary lung tumours Br J Ind Med. 1984 Nov;41(4):468-73 http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC1009371/pdf/brjindmed00052-0044.pdf  

En mi opinión, se ha hecho un uso inadecuado y de esa cita, habida cuenta de que se trataba de un caso absolutamente excepcional y extremo, de contaminación múltiple demostrada mediante autopsia (y era precisamente esa excepcionalidad la que, en su momento, me motivó para aludir al citado artículo), cuando, en la sentencia, -y quizás en función de algún asesoramiento mal explicado o mal asimilado-, en cambio, en ella se viene a manejarlo dialécticamente, como si fuera un caso típico y representativo del conjunto de todas o de la mayoría de las contaminaciones laborales por polvos minerales ( pues en el caso concreto aducido, peyorativamente se podría decir, que los autopsiados pulmones del albañil fallecido de neumoconiosis, más bien parecerían la relación exhaustiva de todas las etiquetas de una vitrina de exposición, en un museo geológico, y eso, evidentemente, no es nada frecuente y típico).  

Leo esto: «Las Importaciones de asbesto aumentan a medida que la Casa Blanca de Trump se activa para mantener legal un carcinógeno mortal» http://www.gban.net/2018/10/24/hallazgos-de-adao-y-de-ewg-las-importaciones-de-asbesto-aumentan-a-medida-que-la-casa-blanca-de-trump-se-activa-para-mantener-legal-a-un-carcinogeno-mortal-nuevos-datos-del-gobierno-las-importaci/. ¿Qué está pasando en EEUU?  

Bueno, el pasado día 26 de octubre, ya quedó publicado en «Rebelión»:

http://www.rebelion.org/noticia.php?id=248252&titular=las-importaciones-de-asbesto-aumentan-a-medida-que-la-casa-blanca-de-trump-se-activa-

…lo cual ha sido realizado a instancia mía, lo que os agradezco.  

Ya con anterioridad, habíamos publicado mi artículo:

Donald Trump y el asbesto «Rebelión», 17/11/2016 http://www.rebelion.org/noticia.php?id=219253&titular=donald-trump-y-el-asbesto- 

…así que podríamos concluir, «que aquellos polvos trajeron estos lodos». Véase también:

https://eldiariony.com/2018/08/09/el-asbestos-ha-matado-a-miles-pero-trump-lo-tiene-de-regreso-en-las-fabricas/

http://www.lr21.com.uy/ecologia/1374256-uralasbest-rusia-trump-putin-cancerigeno-amianto

https://www.cbsnews.com/news/epa-proposal-on-asbestos-critics-outraged/  

La lectura de estos textos, le permitirán a los lectores interesados en ello, hacerse una buena idea de todo ello.

Recordará seguramente, mi estimado amigo, que ya en 21 de enero del presente año, le informaba de que;

«Debido al bloqueo financiero de la administración pública en U.S.A., por el desacuerdo entre «demócratas» y «republicanos», el motor de búsqueda «PubMed«, de la base de datos «MEDLINE«, ha quedado suspendido sine die . Así que, de momento… «ajo y agua». El «Google Académico» no es una buena alternativa, dado que no permite acceder a las reseñas en orden cronológico, de forma que se pueda identificar qué es lo último que se ha publicado. Lo siento. Es lo que hay.»

Afortunadamente, aquello terminó por resolverse favorablemente, pero el futuro sigue siendo altamente impredecible, proceloso, inseguro, amenazante, arriesgado y retrógrado a veces. 

¿Quiere añadir algo más?  

Sí. No quisiera dejar de expresar mi extraordinaria preocupación, por el triunfo de la opción política de extrema derecha, capitaneada por Bolsonaro en Brasil. Temo que de eso se pueda llegar a derivar una «marcha atrás» en la prohibición del uso del amianto en ese país, un logro recientemente alcanzado, y al propio tiempo me preocupa extraordinariamente también, la suerte que, en lo personal, puedan llegar a correr todas las minorías señaladas, incluyendo a los integrantes de los movimientos reivindicativos de toda índole, también los de las asociaciones de lucha contra el amianto y sus efectos nocivos, cual es el caso de ABREA, y de su líder, la ex-inspectora de trabajo, Fernanda Giannasi, co-fundadora, en su momento, de dicha asociación.

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Nota de edición:

Primera parte: Entrevista a Francisco Báez Baquet sobre la industria criminal del amianto (I). «En el amianto-cemento, producto que representa el mayor tonelaje del amianto instalado, caduca el cemento no el amianto, que es virtualmente eterno» http://www.rebelion.org/noticia.php?id=248426

Segunda: Entrevista a Francisco Báez Baquet sobre la industria criminal del amianto (II). «No cabe descartar un posible efecto sinérgico entre las fibras de asbesto y el radón, que también podrían inhalar los trabajadores del metro» http://www.rebelion.org/noticia.php?id=248714

 

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.