Teme Estados Unidos levantar el bloqueo contra Cuba El canciller cubano, Felipe Pérez Roque, afirmó este jueves en Naciones Unidas que Estados Unidos tiene miedo de que se levante el bloqueo impuesto a Cuba porque le teme a su ejemplo. Sabe que demostraremos, aún más, las posibilidades del socialismo cubano, las potencialidades aún no totalmente […]
Teme Estados Unidos levantar el bloqueo contra Cuba
El canciller cubano, Felipe Pérez Roque, afirmó este jueves en Naciones Unidas que Estados Unidos tiene miedo de que se levante el bloqueo impuesto a Cuba porque le teme a su ejemplo. Sabe que demostraremos, aún más, las posibilidades del socialismo cubano, las potencialidades aún no totalmente desplegadas de un país sin discriminación de ningún tipo, con justicia social y derechos humanos para todos los ciudadanos», señaló.
Pérez Roque desmontó en una intervención en la Asamblea General de la ONU todos los argumentos de Washington para impedir que ese órgano se pronunciara por la necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero contra la Isla.
Denunció en ese sentido un «curioso» documento circulado por Estados Unidos entre misiones acreditadas en Naciones Unidas para que no se tratara el tema, arguyendo que es bilateral.
En realidad, puntualizó, no se trata sólo de un embargo, sino una guerra económica genocida a escala planetaria.
«Se prohíbe a Cuba exportar a Estados Unidos; se prohíbe a Cuba recibir turistas norteamericanos; se nos impide el acceso a las tecnologías producidas en este país; se prohíbe a Cuba importar cualquier producto, equipo o materia prima norteamericana».
Entre otros ejemplos citó el de una filial canadiense que no pudo vender repuestos para equipos de rayos X, otra francesa tampoco pudo completar la venta de cajeros automáticos porque fue comprada por una firma norteamericana.
La importación de una vacuna cuádruple que suministraría una compañía holandesa fue frustrada cuando el gobierno de Estados Unidos informó a dicha empresa que no podía venderla porque contenía un 10 por ciento de un antígeno norteamericano.
Para refutar el documento distribuido preguntó por qué un ciudadano canadiense, tras siete años de investigaciones fue sentenciado por el Tribunal Federal de Filadelfia por haberle vendido a Cuba resinas que se emplean para purificar el agua.
«¿Por qué la Ley Torricelli prohíbe a los barcos del resto del mundo tocar puertos cubanos bajo la amenaza de incluirlos en una «lista negra» y negarles el acceso a puertos norteamericanos por seis meses» siguió inquiriendo.
A ello añadió lo que ocurre con la Ley Helms-Burton, en vigor desde 1996, que sanciona a los empresarios del resto del mundo que intentan realizar negocios con Cuba.
«¿Es cierto o no, señor representante de Estados Unidos, que su gobierno multó con 100 millones de dólares al banco suizo UBS por el solo hecho de recibir transferencia de dólares provenientes de Cuba?», volvió a preguntar.
Se refirió además al anuncio de Estados Unidos de establecer un Grupo de Persecución de Activos Cubanos para detener los movimientos de visas hacia y desde Cuba.
A continuación explicó la decisión de su país de sustituir la circulación del dólar por el peso convertible cubano.
En otra parte desmintió la aseveración de Washington de que está «facilitando» la exportación de medicinas y suministros médicos a Cuba.
Para refutarlo se refirió a la prohibición a la compañía ABBOT de venderle a Cuba el Ritonavir y el Lopinavir+Ritonavir, dos medicamentos necesarios para el tratamiento del paciente del SIDA.
También el gobierno de Estados Unidos multó con 160 mil 500 dólares a la empresa Chiron Corporation, porque una filial europea había vendido dos vacunas infantiles a Cuba.
«Si el gobierno de Estados Unidos está tan seguro de que Cuba usa el tema del bloqueo como un pretexto ¿por que no levanta el bloqueo y nos deja sin pretexto», manifestó.
A renglón seguido sostuvo que Cuba tiene la razón y el tiempo está de su lado, observa que crece el rechazo al bloqueo, y no olvida que le ha costado a su país más de 79 mil millones de dólares.
Aseguró que si el bloqueo no se levanta y la hostilidad de más de cuatro décadas no cesa, todo seguirá siendo difícil pero no imposible.
«Nuestro pueblo está seguro de que no hay obstáculo que impida su marcha hacia un país más próspero y justo», proclamó.