#FidelEntreNosotros no es un simple eslogan de turno, es un hecho palpable y tangible que este hombre ha trascendido en su tiempo, en nuestro y en los tiempos que están por venir. Las que como yo, ya peinan canas vivimos y crecimos con la historia que llegaba de nuestros abuelos y padres, esa, la de […]
#FidelEntreNosotros no es un simple eslogan de turno, es un hecho palpable y tangible que este hombre ha trascendido en su tiempo, en nuestro y en los tiempos que están por venir.
Las que como yo, ya peinan canas vivimos y crecimos con la historia que llegaba de nuestros abuelos y padres, esa, la de aquel joven irreverente que no creía en medias tintas y ante las injusticias y desmanes de los políticos de turno en Cuba, al servicio de los apetitos imperiales, le cantaba las cuarenta a cualquiera, sin el menor temor.
Historias y anécdotas que nos traían a Fidel como el aglutinador, como lo que fue con sus ideas claras para inspirado en las martianas ideas, echar a andar aquel motor pequeño con el Asalto al Cuartel Moncada y despertar ese motor grande de masa irredenta que no concluyó su lucha hasta la verdadera independencia el Primero de Enero de 1959.
De aquella gesta recordaban particularmente palabras de Fidel:
Compañeros: podrán vencer dentro de unas horas o ser vencidos; pero de todas maneras, ¡óiganlo bien, compañeros!, de todas maneras el movimiento triunfará. Si vencemos mañana, se hará más pronto lo que aspiró Martí. Si ocurriera lo contrario, el gesto servirá de ejemplo al pueblo de Cuba, a tomar la bandera y seguir adelante. El pueblo nos respaldará en Oriente y en toda la isla. ¡Jóvenes del Centenario del Apóstol! Como en el 68 y en el 95, aquí en Oriente damos el primer grito de ¡libertad o muerte! Ya conocen ustedes los objetivos del plan. Sin duda alguna es peligrosa y todo el que salga conmigo de aquí esta noche debe hacerlo por su absoluta voluntad. Aún están a tiempo para decidirse. De todos modos, algunos tendrán que quedarse por falta de armas. Los que estén determinados a ir, den un paso al frente. La consigna es no matar sino por última necesidad.
#FidelEntreNosotros sigue además, como el organizador de los 82 expedicionarios del Granma, que arribaron a Cuba el dos de diciembre de 1956, para proseguir la lucha hacia la emancipación total. Hay palabras de Fidel tras el triunfo que marcan para siempre y se hacen eco de generación en generación, pues son el imperecedero ejemplo de un hombre cargado de honestidad y compromiso con su pueblo:
Se ha andado un trecho, quizás un paso de avance considerable. Aquí estamos en la capital, aquí estamos en Columbia, parecen victoriosas las fuerzas revolucionarias; el gobierno está constituido, reconocido por numerosos países del mundo, al parecer se ha conquistado la paz; y, sin embargo, no debemos estar optimistas. Mientras el pueblo reía hoy, mientras el pueblo se alegraba, nosotros nos preocupábamos; y mientras más extraordinaria era la multitud que acudía a recibirnos, y mientras más extraordinario era el júbilo del pueblo, más grande era nuestra preocupación, porque más grande era también nuestra responsabilidad ante la historia y ante el pueblo de Cuba.
Me llegó la impronta de Fidel con la Campaña de Alfabetización, con su paso al frente para combatir al enemigo usurpador en las arenas de Girón, me llegó con su táctica y estrategia para liquidar hasta el último de los bandidos que pretendía devolverle a Cuba al norte revuelto y brutal…. ¡Y cómo No!!: Me llegó Fidel como el más audaz guerrero durante los grises días de la crisis de octubre, y sin abandonar a su pueblo.
#FidelEntreNosotros NO ha faltado nunca por más de 60 años en la historia de este pueblo, ha estado en cada instante por difícil que haya sido, en las lágrimas y en la risa, nos hizo grande, nos dio fuerza, llenó de sueños y esperanzas, nos educó en los principios martianos de que por el poder de erguirse se mide a los hombres y de que siempre hay que tener fe en el mejoramiento humano y la utilidad de la virtud.
Hasta hoy, muy próximo a los 90 años dentro de unas horas #FidelEntreNosotros, no ha dejado de ser el cubano de ideas y de acción, nos llega con la fuerza que trasmiten ideas basadas en principios y convicciones incapaces de negociarse bajo ninguna circunstancia.
Así lo refería en la sesión de clausura del VII Congreso del Partido Comunista de Cuba celebrada el 19 de abril de 2016:
«Pronto deberé cumplir 90 años, nunca se me habría ocurrido tal idea y nunca fue fruto de un esfuerzo; fue capricho del azar. Pronto seré ya como todos los demás. A todos nos llegará nuestro turno, pero quedarán las ideas de los comunistas cubanos como prueba de que en este planeta, si se trabaja con fervor y dignidad, se pueden producir los bienes materiales y culturales que los seres humanos necesitan, y debemos luchar sin tregua para obtenerlos. A nuestros hermanos de América Latina y del mundo debemos transmitirles que el pueblo cubano vencerá».
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