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Resolución propuesta por el Sector de enseñanza de IU-CM al Consejo Político Regional

Hay que cambiar drásticamente los métodos de financiación de IU

Fuentes: Rebelión

El modelo de financiación y la procedencia de los fondos en una organización de la izquierda es un fiel reflejo de su política. La situación de casi colapso económico de IU-CM no es ajena a la política impulsada por la dirección en los últimos años, en los que se ha abandonado la construcción de una […]

El modelo de financiación y la procedencia de los fondos en una organización de la izquierda es un fiel reflejo de su política. La situación de casi colapso económico de IU-CM no es ajena a la política impulsada por la dirección en los últimos años, en los que se ha abandonado la construcción de una organización militante, basada en la movilización en la calle y en la defensa de una política de izquierdas, para convertir IU en una mera maquinaria electoral con un discurso escasamente diferenciado del programa socialdemócrata. Esta política se ha expresado en el terreno de la financiación en un abandono absoluto de los métodos tradicionales del movimiento obrero que pueden garantizar nuestra independencia política. Las cuotas de los afiliados y la actividad militante para recaudar dinero entre los trabajadores, que deberían de ser las piedras angulares de nuestra financiación, se han sustituido por los créditos bancarios y las subvenciones del estado, haciendo peligrar de es ta manera la viabilidad económica de la organización y condicionándola a los resultados electorales, la generosidad de la banca en la negociación de la deuda acumulada y a otras hipotecas políticas.

Según reconoce el informe de la Secretaría de Planificación Económica de IU-CM en el que se nos informa de que arrastramos una deuda de 900.000 euros, «los malos resultados -en referencia a las elecciones-, van acompañados de una reducción de cargos públicos, cuestión ésta que afecta directamente a la financiación de nuestra organización, … junto al endeudamiento financiero que arrastra el federal o la sorprendente devolución bancaria que se ha producido en el último periodo de pago de la afiliación…» . Estas líneas son una condena de la política seguida por la dirección actual. Cuando desde la Secretaria de Planificación Económica de IU-CM se menciona «la sorprendente devolución bancaria que se ha producido en el último periodo de pago de la afiliación» se esta reconociendo el hecho más grave de todos: que muchos militantes no tienen confianza política en la actual dirección de IU y en el rumbo que esta tomando la organización.

En el mismo informe, al respecto de la obligación política para «todos aquellos que de una u otra manera trabajan como cargos públicos de IU-CM» de contribuir con parte de sus salarios, se reconoce que «la experiencia nos ha demostrado que el voluntarismo no es buena manera de resolver los problema» por lo que se quiere «dar un carácter estatutario a la carta financiera que se propone con el fin de que sea de obligado cumplimiento por todos aquellos que representamos a nuestra organización en cualquier ámbito e institución de la CAM.» Es decir, desde la dirección de IU-CM se reconoce que nuestros cargos públicos no cumplen con los acuerdos de entregar una parte del salario que reciben como representantes de IU a la propia organización. Es muy preocupante puesto que esto no tiene nada que ver con las tradiciones de la izquierda transformadora, que los compañeros concejales y diputados estén dispuestos a cobrar un salario por representar a IU, pero no están dispuestos a aportar la parte de dicho salario que IU, en justicia, les reclama.

Lo cierto es que la dependencia de las subvenciones por resultados electorales no es más que el correspondiente reflejo en el terreno económico de que la organización se ha convertido en una maquina electoral que carece de una estrategia seria para implicarse en la lucha social y cuya actividad fundamental se desarrolla en el terreno institucional y no en los barrios, centros de estudio y empresas. Por ello, la resolución de nuestros problemas financieros pasa inevitablemente por la resolución de nuestros problemas políticos y por el debate del modelo de IU que queremos construir: una IU con un programa de transformación social, revolucionaria no sólo en sus documentos o discursos, también en su actividad y en sus finanzas. O, por el contrario, una IU que centra su actividad fundamental en conseguir votos con los que llegar a más puestos en las instituciones. Este segundo modelo ha mostrado ya en la práctica sus carencias y la situación crítica a la que ha llevado a la organ ización. En cualquier caso, e intentando recuperar la mejores tradiciones del movimiento obrero, proponemos junto a la natural obligación de un afiliado de pagar su cuota, las siguientes medidas respecto a nuestros representantes en las instituciones:

a) Los concejales, diputados y demás representantes de IU son compañeros designados por la organización para esas tareas, dependiendo por tanto de IU a todos los efectos políticos y económicos. Por ello deben ingresar sus salarios, dietas y demás retribuciones de forma íntegra en cuentas de IU, siendo ésta quién estipule la cuantía y el pago de su salario.

b) El objetivo de tener compañeros en Ayuntamientos, Parlamentos, etc., es hacer llegar a estos foros la voz de los jóvenes y los trabajadores, sus necesidades y denuncias. Por ello proponemos que el salario de nuestros representantes en las instituciones sea el de un trabajador medio cualificado.

c) Solicitamos informes económicos periódicos y detallados que reflejen fielmente nuestra situación económica en cada momento.



Aprobada en reunión del pleno del Sector de Enseñanza IU-CM celebrado el 18 de mayo de 2004.