Esta actividad, que contó con la participación de delegaciones de nueve países latinoamericanos, se enmarca en el esfuerzo del capítulo nicaragüense de la Alianza de Protección a la Biodiversidad, que integra la UITA, para visualizar y destacar la importancia de las semillas criollas, y al mismo tiempo, rescatar y valorizar la enorme biodiversidad que tienen […]
Esta actividad, que contó con la participación de delegaciones de nueve países latinoamericanos, se enmarca en el esfuerzo del capítulo nicaragüense de la Alianza de Protección a la Biodiversidad, que integra la UITA, para visualizar y destacar la importancia de las semillas criollas, y al mismo tiempo, rescatar y valorizar la enorme biodiversidad que tienen los países del continente latinoamericano. Este esfuerzo desembocó en los meses pasados en el lanzamiento de la campaña «Semillas de Identidad – Por la Defensa de la Biodiversidad y la Soberanía Alimentaria».
Según Julio Sánchez, miembro de la Alianza de Protección a la Biodiversidad , «esta actividad es la que está clausurando el 2007. A lo largo de todo el año estuvimos promocionando ferias, encuentros y foros municipales sobre el tema de semillas y en esta ocasión decidimos extender esta experiencia de intercambio entre campesinos a nivel latinoamericano».
En el acto central participaron miembros del gobierno municipal de San Ramón y del Viceministro del Ambiente y Recursos Naturales, Roberto Araquistain.
Aprovechando la ocasión, Daysi Granado, del Programa de Campesino a Campesino (PCaC), informó a los presentes que diferentes productores introdujeron a la Comisión del Medio Ambiente y Producción de la Alcaldía de San Ramón una propuesta de Ordenanza Municipal para que se declare el municipio libre de transgénicos.
«Uno de los principales objetivos del Programa de Campesino a Campesino (PCaC) es la preservación del medio ambiente, de nuestros productos y sobre todo, de la diversificación de nuestras semillas criollas. Es por eso -continuó Granado– que estamos apoyando la Campaña «Semillas de Identidad» y no queremos depender del exterior, sino poder contar con nuestros propios recursos. Para poder hacer eso necesitamos también del apoyo del gobierno municipal y nacional. No queremos que se manipule la naturaleza y por ende, no queremos OGM en nuestro municipio. Queremos saber qué es lo que estamos comiendo, con qué nos estamos alimentando, qué es lo que estamos sembrando. Es por eso que estamos presentando esta propuesta de Ordenanza Municipal para que se declare el territorio de San Ramón libre de transgénicos», concluyó la productora local.
Para Julio Sánchez, esta propuesta le sigue a otras iniciativa impulsadas por la Alianza Centroamericana de Protección a la Biodiversidad con las que ya se declararon «libres de transgénicos» a otros municipios en Costa Rica y Guatemala.
«Otra cosa importante de esta ordenanza es que no se trata solamente de declarar el municipio libre de transgénicos, sino que las variedades de semillas criollas identificadas en el municipio sean registradas como patrimonio municipal. Eso presupone la creación de un Registro de Semillas Criollas, y de esta manera protegerlas para evitar el fenómeno de la biopiratería de los recursos naturales», aseveró Sánchez.
Otro aspecto muy importante de esta actividad fue el llamado que se hizo al gobierno nacional para que se incorpore dentro de este proceso, con el fin de incluir dentro de las políticas de estado el tema de las semillas criollas. «No se trata solamente de rescate y conservación, sino de mejoramiento participativo de las semillas criollas, con el fin de poder encontrar canales de comercialización y mercado, buscando un valor agregado a estas semillas. La idea es que las semillas nativas, en algún momento, puedan ser mayoritarias en porcentaje con respecto a las semillas de las empresas transnacionales», dijo el representante de la Alianza de Protección a la Biodiversidad.
Por su parte, el Viceministro del Ambiente y Recursos Naturales, Roberto Araquestain, declaró estar totalmente de acuerdo con priorizar el rescate y la protección de las semillas criollas y aseguró que el mismo Presidente de la República está convencido de que los organismos genéticamente modificados (OGM) no son necesarios para Nicaragua y es por eso que no van a entrar al país.
Para los miembros de la Alianza de Protección a la Biodiversidad esta posición es muy positiva, aunque crean que el gobierno deba comenzar a ser mucho más dinámico, no sólo sentando posiciones, sino comenzando a hacer políticas.
Diferente es la situación en la Asamblea Nacional, donde sobre el tema de transgénicos se ha abierto un debate en el cual se ha evidenciado una profunda ignorancia del tema entre los diputados.
«Nos preocupa mucho la situación en la Asamblea Nacional porque hay mucha confusión entre los diputados. Son muchos los que todavía dudan de la importancia de priorizar el tema de los transgénicos en la agenda legislativa, aún más cuando el debate tiene que ver con la aprobación de la Ley de Soberanía y Seguridad Alimentaria. Para nuestro país, independientemente de estar o no de acuerdo con los OGM, este tema tiene que ser regulado y hay que darle prioridad a las semillas criollas», concluyó Julio Sánchez.
Para el próximo año, el trabajo de la Alianza de Protección a la Biodiversidad se va a concentrar sobre todo en el fortalecimiento de los bancos de semillas y en fomentar ordenanzas municipales que declaren los territorios libres de transgénicos. Los municipios que van a emitir esas ordenanzas van a seguir contando con el apoyo de la Alianza en términos de investigaciones, análisis y apoyo jurídico. Para final del 2008 se prevé la realización de una nueva actividad regional, posiblemente a nivel centroamericano, para continuar con el intercambio de experiencias y conocimientos.