Pocos estudios abordan las experiencias de la población juvenil religiosa en la nación caribeña, trascendió en el encuentro.
El déficit de estudios que aborden a profundidad la realidad de las diferentes expresiones religiosas y la escasa visibilidad de las experiencias juveniles en esos espacios, centraron la víspera el encuentro ecuménico Jóvenes, Género y Religión, en esta capital.
Especialistas y activistas participaron el 22 de noviembre en el panel realizado en la sede del no gubernamental Centro Oscar Arnulfo Romero (OAR), el principal organizador de la oncena Jornada Nacional por la No Violencia hacia las Mujeres y las Niñas «Eres Más».
¿Quiénes son?
«Como este año la jornada está dedicada a la juventud quisimos generar este intercambio para explorar cómo es la problemática de género dentro de las experiencias religiosas», comentó Luis Carlos Marrero, vicedirector del área de Fe, Articulación Ecuménica y Sociedad de OAR.
Subrayó que, «en muchas investigaciones sociales, (…) se abordan otros sectores muy específicos, pero las cuestiones religiosas no suelen aparecer».
Para el teólogo, el «acercamiento al ámbito religioso ayuda a abrir el diapasón y buscar nuevas aristas sobre la violencia de género».
«Vivimos tiempos de diálogo, pero hasta que no tengamos un background completo de lo que sucede a nivel social, siempre vamos a tener fragmentaciones en el conocimiento», estimó.
Con esa idea coincidió Daylins Rufín, pastora de la Fraternidad de Iglesias Bautistas de Cuba, para quien existen algunas «dinámicas discriminatorias y de invisibilización de las experiencias que ocurren en los espacios religiosos».
Comentó que los estudios sobre juventudes en diversas áreas no tienen cuenta «la cantidad de jóvenes que están vinculados a los seminarios religiosos o que trabajan como líderes de comunidades».
Asimismo, apuntó que «las aspiraciones, metas y proyectos de vida (de jóvenes practicantes de la religión) no pasan por las mismas variables que se utilizan comúnmente para estudiar a otros grupos de jóvenes».
Según Rufin, «hay todo un universo dinamizado y construido desde lo religioso, que está presente en muchos espacios sociales, pero no se tiene en cuenta en los análisis».
La también profesora del Instituto Superior Ecuménico de Ciencias de la Religión aseguró que se observa «un aumento de la participación de jóvenes en algunas de las expresiones religiosas».
«Pero… ¿quiénes son los jóvenes que están hoy en esos espacios religiosos, qué desafíos identificamos en esos ámbitos con respecto a la participación o cómo se maneja ahí el tema de la cultura de paz?… Son algunas interrogantes que podemos hacernos», reflexionó la catedrática.
Por otra parte, Nelly Expósito, investigadora del Grupo de Estudios Sociorreligiosos, del estatal Centro de Investigaciones Psicológicas y Sociológicas, aseguró que «en Cuba hay una diversidad religiosa, que no es solo por presencia de diferentes religiones, sino diversidad de creencias, donde una misma persona practica más de una religión».
Para la especialista, eso complejiza la obtención de información cuantitativa y los análisis. «Si un tema hay que trabajarlo con metodología cualitativa es la religión, que no es un problema de números, sino de actuaciones y conductas humanas», remarcó.
Apuesta a la juventud
Yasmani Díaz, vicedirector del Área de Equidad, Género y Desarrollo de OAR, explicó que el centro cuenta con una Articulación juvenil por la equidad social, que es un «espacio de trabajo común, de socialización y activismo, que reconoce y articula iniciativas con y para jóvenes, en aras de contribuir a la transformación de la realidad social cubana».
El psicólogo agregó que esa plataforma potencia «la participación, el liderazgo, y el empoderamiento desde la equidad social, el respeto a la diversidad, los derechos y la prevención de la violencia de género, con énfasis en la violencia hacia las mujeres y las niñas».
Para él, «la apuesta que ha hecho OAR en dos años de trabajo con la articulación juvenil ha dado frutos, pues han aportado mucho a la campaña Eres Más y han sido protagonistas de diversos procesos, no solo en lo académico, sino en múltiples espacios sociales».
Tamara Roselló, especialista de comunicación de OAR, resaltó el trabajo realizado desde 2011 con estudiantes de diversas carreras universitarias, entre ellas Periodismo, Medios Audiovisuales y Diseño.
«Todo ese grupo de jóvenes contribuyó a la conceptualización, conformación e implementación de la campaña de comunicación», acotó.
De igual modo, agregó que «la semilla sembrada por el centro en esos estudiantes, que en la actualidad ya son profesionales, ha posibilitado que continúen colocando los aprendizajes adquiridos en su labor cotidiana».
Durante el encuentro, también se realizó la convocatoria de varias actividades de la oncena Jornada Nacional por la No Violencia hacia las Mujeres y las Niñas «Eres Más», que desde 2007 organiza la OAR.
Este año el programa de actividades llega a 12 de las 15 provincias cubanas y la oriental provincia de la Las Tunas es la sede central.
Fuente: http://www.ipscuba.net/genero/juventud-y-genero-una-zona-desconocida-de-las-religiones-en-cuba/