El caso del asesinato del camarógrafo español José Couso por las tropas invasoras de Estados Unidos en Iraq, fue archivado hoy por la Audiencia Nacional para estupefacción de sus familiares y amigos. La sección segunda de lo Penal de esa instancia anunció que archivó las diligencias abiertas por el Juzgado Central de Instrucción número uno […]
El caso del asesinato del camarógrafo español José Couso por las tropas invasoras de Estados Unidos en Iraq, fue archivado hoy por la Audiencia Nacional para estupefacción de sus familiares y amigos.
La sección segunda de lo Penal de esa instancia anunció que archivó las diligencias abiertas por el Juzgado Central de Instrucción número uno para investigar la muerte del joven camarógrafo de Tele 5 el 8 de abril de 2003.
Ese día la dotación de un tanque estadounidense que participaba en la ocupación de Bagdad enfiló su cañón a una ventana del hotel Palestina, desde donde Couso filmaba las acciones y otros periodistas extranjeros tomaban fotos y redactaban sus crónicas.
Según los testigos del asesinato, los soldados que dispararon sabían que el hotel servía de sede a la prensa extranjera, por lo cual no hubo confusión como intentaron hacer creer. Couso, de 37 años, tenía dos pequeños hijos.
Durante el ataque también falleció el camarógrafo ucraniano Taras Protsyuk. María Isabel Permuy, la madre de Couso narró durante una visita de la antibelicista Cindy Sheerhan a Madrid que vio en un noticiero de televisión la muerte de su hijo.
Vi por televisión, narró, cómo mi hijo se desangraba y moría lentamente mientras les pedía a sus compañeros que lo taparan para que sus niños no lo vieran. Cuando me derrumbo, pienso en él como un héroe del periodismo independiente, y me vuelvo a levantar.
Según el anuncio, el tribunal entiende que «no hay dolo» sino «acto de guerra contra enemigo aparente erróneamente identificado», con lo cual asume la tesis de los asesinos estadounidenses del joven español.
La sección segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia dictó un auto y tras esta decisión, el juez que instruye el caso, Santiago Pedraz, va a archivar la investigación, «asumiendo el criterio de sus superiores jerárquicos», según explicaron fuentes de la Audiencia.
La decisión, que ha sorprendido a familiares y amigos de la víctima, se produce al resolver el recurso interpuesto por el fiscal contra la admisión a trámite de las querellas presentadas por los familiares del periodista fallecido.
Los abogados habían requerido el interrogatorio de los tres soldados estadounidenses imputados por la muerte de Couso, pero el Departamento de Justicia de Estados Unidos rechazó la petición de Pedraz.
La decisión del tribunal coincide con la presencia en Madrid de la diplomática estadounidense Shirin Tahir-Kheli, asesora de la secretaria de Estado, Condoleezza Rice.