El carroñero de la bicefalia conocido como Felipe González comentando en la tv de la multinacional PRISA el encuentro en La Moncloa entre las dos cabezas representativas del ave de rapiña capitalista, lo ha dejado completamente claro, aun borboteando palabras castellanas en forma que llama mucho la atención de los necesitados de obediencia de la […]
El carroñero de la bicefalia conocido como Felipe González comentando en la tv de la multinacional PRISA el encuentro en La Moncloa entre las dos cabezas representativas del ave de rapiña capitalista, lo ha dejado completamente claro, aun borboteando palabras castellanas en forma que llama mucho la atención de los necesitados de obediencia de la norma: «Yo no he encontrado diferencias entre uno y otro (una y otra cabeza del ave de rapiña) los dos quieren lo mismo, solo es una cuestión de velocidades, uno quiere más despacio y otro más deprisa… pero tomar las medidas de recorte… hay que tomarlas». Perfecta la explicación, hacen lo mismo solo que a velocidades distintas. Dicho de una manera típica de la novela negra y de la realidad: actúan como el policía bueno y el policía malo, los dos van a sacarte lo que quieren, pero lo harán a velocidades distintas.
Son como las páginas de color sepia de sus periódicos, en ellas leemos qué les interesa a los estafadores financieros, el fondo siempre es el mismo, tienen el mismo objetivo pero lo escriben con velocidades distintas.
Evo Morales denuncia que una fundación del PP ayudo a los capitalistas bolivianos para que diesen un golpe de Estado en su país. La cabeza de la bicefalia PP sale mordiendo contra Evo Morales, y la otra cabeza PSOE de la bicefalia declara que su cabeza compañera PP es un partido democrático y no hace lo que Evo cuenta -hartos estamos ya de saber lo que hace la cabeza carroñera, corrupta y crápula PP- pero su hermandad la firman cuando ni tan siquiera esperan a conocer las pruebas que Evo aporta. (Además puede leer el artículo de Jean-Guy Allard: Fundación del Partido Popular intentó derribar a Evo, en rebelion.org, con fecha del 22-05-2010) A esa acción de policía bueno y policía malo llama «dos velocidades» el Felipe de la bicefalia.
Si nos referimos a Cuba, ya saben, dos velocidades, la cabeza PSOE «exige», dice, «el respeto de los derechos humanos». Se alborota el gallinero: el de la menor velocidad hace un aspaviento y se remueve en su palo. Ridículo carroñero, él que incumple los derechos humanos, denunciado por la ONU, denunciado por Amnistía Internacional, denunciado por gobiernos como México, Argentina, Bolivia, Venezuela… por una Ley de Amnistía que es contraria a los Derechos Humanos, por ocultar crímenes de Lesa Humanidad, es el mismo encubridor que protege con su acción política a organizaciones fascistas que atacan la Memoria Histórica Democrática y exigen que no se investiguen sus crímenes, y ahí los deja. ¿Cómo se califica a quien mantiene esa legalidad?. Hasta aquí la primera velocidad, el policía bueno, la primera cabeza de la bicéfala carroñera. La otra cabeza a velocidad mayor, ya saben las exigencias de la otra cabeza: la diferencia es la velocidad.
Sus cabezas carroñeras se presentan a la misma velocidad cuando en la reunión de La Moncloa acordaron privatizar las Cajas de Ahorros, eliminar lo poco de banca pública que hay a beneficio de quienes roban a los trabajadores, privatizar, privatizar y privatizar lo público.
Esos son los que también quieren quedarse con Cuba, con el país al que no pueden robar, con el país que ha presidido la Comisión de Derechos Humanos de la ONU por mayoría absolutísima, quieren quedarse con el país que ha dado siempre ejemplo de solidaridad entre los pueblos y que en estos momentos es su mayor negación, quieren cerrar el país que es ejemplo, referente para los trabajadores, que despierta su conciencia en la actual crisis capitalista.
En la reunión que tuvieron en La Moncloa las dos cabezas del ave de rapiña acordaron no hacer nada por los más de 4.600.000 parados que han producido con su sistema capitalista: ¿saben las tales cabezas qué son los Derechos Humanos?, su naturaleza capitalista es cruel.
Fíjense que interpretación de los Derechos Humanos: usted puede morirse de hambre, con desatención absoluta en su entorno, usted puede verse desatendid@, sol@. A l@s caíd@s en el paro se l@s dejará a su suerte y el individualismo difundido e intrínseco al sistema, implantado, hará el resto.
Un caso para conocer, trágico porque la vida de l@s trabajador@s y sus familias en el capitalismo alcanza fácilmente niveles de tragedia, al asunto: Hace más o menos un mes o un mes y medio en Radio Nacional de España el corresponsal de la zona sur de Madrid, zona obrera que en otro tiempo se denominaba «cinturón rojo», dio una noticia: varios funcionarios del juzgado junto con policías fueron a desalojar a una mujer de su casa por impago, (esos defensores de los Derechos Humanos que son los usureros bancarios querían su pieza de carne extraída junto al corazón) la mujer no quiso abrir la puerta y prendió fuego a la casa muriendo dentro.
Se suicidó. ¿Qué había pasado en la vida de esa mujer?, ¿Cuánto y cómo la habían acosado los buitres de los bancos, del juzgado…?, ¿hasta dónde había ejercido la violencia el Estado para llevar a la última decisión a ésta mujer y hasta dónde había llegado el aislamiento social, provocado por el sistema de explotación que fragmenta en individualidades a la mayoría?.
La noticia duró unos segundos, nadie dijo nada, ni locutores ni corresponsal, y no volvió a salir en Radio Nacional ni en otro sitio. Y las cabezas del ave carroñera escandalizan, se ponen dramáticas, se muestran agitadas hablando de los Derechos Humanos, las cabezas más inhumanas, y llevan a cabo la implantación de la ley tan bárbara como es la explotación de la mayoría por unos pocos, recortes de sueldos, despidos, impagos, a dos velocidades. Se calcula, cifras difundidas por su prensa, que éste año van a ser desahuciadas 180.000 familias, 180.000 familias expulsadas de su casa. Esta ocurriendo ya, ¿se dice algo? Suicidios, sufrimiento, enfermedades, pobreza, aislamiento absoluto, desgracias familiares, y los desahucios-robos de usureros siguen adelante porque son los protegidos: ¿son lo que ellos entienden por Derechos Humanos?, son los derechos que nos administra el ave carroñera bicéfala.
El ave carroñera bicéfala cacarea o grazna a dos velocidades, «Derechos Humanos» «Derechos Humanos», mientras a los trabajadores nos clava sus garras y con sus picos arranca lo más aprovechable de nuestro cuerpo debilitado, que últimamente mueve los labios y pronuncia ya las palabras Huelga General, ¿se oye bien?.
Ramón Pedregal Casanova es autor de Siete Novelas de la Memoria Histórica, editado por Fundación Domingo Malagón y Asociación Foro por la Memoria (foroporlamemoria.org)
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