La deuda supera en medio año el objetivo del Gobierno para todo el ejercicio, situado en el 91,4% del PIB. Desde el comienzo de la crisis en 2008, la deuda ha crecido en 560.758 millones, un 147%. Nunca, en la historia reciente, España había debido tanto. El Banco de España ha certificado el récord: al […]
La deuda supera en medio año el objetivo del Gobierno para todo el ejercicio, situado en el 91,4% del PIB. Desde el comienzo de la crisis en 2008, la deuda ha crecido en 560.758 millones, un 147%.
Nunca, en la historia reciente, España había debido tanto. El Banco de España ha certificado el récord: al acabar el segundo trimestre, el conjunto de las administraciones públicas debía 942.758 millones de euros, un 92,2% del producto interior bruto (PIB). La deuda supera ya el objetivo (91,4% del PIB) fijado por el Gobierno para todo el año. En un año, ha crecido un 17%.
La cifra, al margen de su espectacularidad, muestra que en el último año y medio, con el Gobierno del PP, el endeudamiento se ha disparado y ha crecido en más de 20 puntos porcentuales: desde el 70,4% al 92,2%.
El rescate bancario, que llevó el déficit público al 10,6% en 2012, y el espectacular incremento del desempleo, hasta el 26,2% de la población activa, explican en buena parte el crecimiento espectacular de la deuda, que crece a pesar del aumento de los impuestos aprobados por el Ejecutivo. En suma, el sistema fiscal apenas si es capaz de aportar los ingresos necesarios para sostener el gasto publico.
Dudas del BCE
El cuadro es tal que el Banco Central europeo, esta misma semana, ha expresado sus dudas acerca de que España sea capaz de cumplir con el objetivo de reducción de déficit pactado: 6,5% en 2013 y 5,8% en 2014. En tan negro panorama, sólo la caída de la prima de riesgo, en torno a los 250 puntos, pone un punto positivo a la estadística.
La deuda es el mercurio que señala hasta dónde han legado los efectos de la crisis. En 2008, el endeudamiento de las administraciones públicas era de 382.000 millones de euros, un 36,35 del PIB. En cinco años, la deuda se ha más que duplicado (ha crecido un 146,7%), hasta alcanzar los 942.758 millones.
Pero ¿hasta qué punto es peligrosa la situación? Si los estudios de los economistas Rogoff y Reinhart (base de las políticas de austeridad) no hubieran estado equivocados y fuera cierto que los países que superan el 90% de endeudamiento respecto al PIB entran en zona roja, España lo tendría muy mal.
Pero ha pasado mucha agua bajo el puente de la crisis, la política de austeridad ha perdido el aura de verdad indiscutible y las circunstancias en el área euro ayudan. Con tipos de interés bajos, inflación bajo control (1,5% en agosto) y Bolsa al alza, economistas como Paul Krugman o Larry Summers, relativizan el valor de las cifras absolutas de endeudamiento. España, según este punto de vista, no estaría todavía en un pnto de no retorno.
Preocupación
Pero hay motivos para la preocupación. Como ha explicado el presidente de AFI, Emilio Ontiveros Emilio Ontiveros, el problema es el pago de los intereses, porque «es la partida de gasto más improductiva posible y se da en un país que ha tenido que recortar en otras áreas y necesita recuperar el crecimiento». España paga anualmente 38.000 millones sólo en intereses y confía que este año pueda ahorrar en torno a 5.000 millones por la mejora de la prima de riesgo.
El endeudamiento de las comunidades autónomas también registra un incremento del 1,9% en el segundo trimestre respecto a los tres meses anteriores y alcanza ya los 193.296 millones de euros. En tasa interanual, la deuda de los gobiernos autonómicos creció entre abril y junio casi un 15%.
En el desglose por comunidades autónomas, Cataluña, Comunidad Valenciana, Madrid y Andalucía concentran la mayor parte del endeudamiento de los gobiernos autonómicos, con el 53,6% del total. Así, la deuda de Cataluña alcanza los 51.779 millones de euros, seguida de la Comunidad Valenciana, con 29.235 millones de euros; Madrid, con 22.663 millones de euros, y Andalucía, con 21.251 millones.