Traducido para Rebelión por Daniel Escribano
Si José Luis Bilbao1 ha dicho que el tripartito del Gobierno vasco está agotado, será porque esta opinión está extendida en la dirección del PNV. Si después de lo dicho por Bilbao, Iñigo Urkullu atribuye a EA e IU-EB la mala salud del tripartito, será porque la mayoría del Euzkadi Buru Batzar2 (EBB) es de la misma opinión. Y si, en opinión del EBB, el tripartito está agotado…
Cuando le preguntaron, en la conferencia en el Foro Martin Ugalde (Andoain, Guipúzcoa), del día 3, si era partidario de que Juan José Ibarretxe fuera de nuevo candidato a lehendakari, Urkullu respondió que no tenía respuesta. Que era una buena pregunta, pero que no tenía respuesta. Dijo que Ibarretxe es de los principales activos políticos del PNV, pero no le dedicó más alabanzas; no sugirió que sea una apuesta de futuro del PNV. Anteayer, en Madrid, dicen que habló de forma parecida cuando le preguntaron sobre esa cuestión.
Si el tripartito se ha agotado y, sobre todo, si en lugar de esa fórmula debe impulsarse el entendimiento entre el PNV y el PSE-EE, también se ha agotado Ibarretxe. Bilbao no ha dicho tanto, menos aún Urkullu, pero es sabido que en política algunos mensajes, sobre todo los mensajes que implican cambio de dirección, no se pueden lanzar de repente y sin más, sino poco a poco, en dosis digeribles.
El mensaje principal ha sido para Ibarretxe y para quienes están de acuerdo con él. Junio está al caer. Si nadie le pone remedio, el pleno del Parlamento vasco tendrá que realizar la votación para dar vía a la consulta y, si la izquierda abertzale actúa en coherencia con lo que hizo en diciembre de 2004,3 el alma pragmática del PNV estará en un aprieto que en modo alguno quiere, ya que Ibarretxe sigue asegurando que cumplirá la palabra dada. Y como parece que José Luis Rodríguez Zapatero no pondrá remedio ―siendo Ajuria Enea4 el objetivo, difícilmente morderá ahora el anzuelo de la negociación―, Bilbao y quienes están con él han decidido poner el freno dentro de casa.
El diputado general de Vizcaya, como es notorio, no actúa por su cuenta. Puede sospecharse que la conferencia de Bilbao ha venido a poner sobre la mesa lo que de verdad piensa Urkullu pero de momento no le conviene decir directamente, en punto a poner en cuestión la estrategia que quiere impulsar Ibarretxe mediante la consulta, difundiendo poco a poco a los cuatro vientos la propuesta estratégica que está dejando de ser tabú: dejemos a EA e IU-EB, olvidemos la consulta ―al menos mientras ETA no desaparezca― e intentemos hacer el camino con los socialistas.
La palabra ahora es de Ibarretxe. Es posible decir, en lo atinente a la propuesta de buscar el acuerdo con los socialistas, que lo de Bilbao y lo suyo son compatibles, en la medida en que uno de los ejes de la estrategia del lehendakari es el esfuerzo por obtener un acuerdo de normalización con el PSOE. Para la clave, además de con quién pactar, es qué pactar. Una cosa es proclamar que para cambiar las reglas del juego la negociación y el acuerdo con el PSOE son necesarios, pero muy otra cuestión es, aun siguiendo el PSOE negándose a cambiar las reglas del juego, priorizar la colaboración con los socialistas en el trabajo político e institucional, dejando de lado a quienes tienen como norte la obtención del reconocimiento del derecho a decidir. Y al diputado general de Vizcaya, que según inveterados rumores puede ser el próximo candidato a lehendakari, se le ha entendido esto segundo.
El laboratorio de Mondragón. Si Mondragón (Guipúzcoa) es el espejo del embrollo político del País Vasco, si, como tantos dicen, se ha convertido en un laboratorio, no hay nada que hacer: el PNV y el PSE-EE se han unido para pedir la dimisión de los cargos electos de EAE-ANV, pero sabemos que los concejales del PNV han apoyado la moción más por disciplina que por convicción; no ha prosperado lo que tenía que ser el primer paso en el camino de la moción de censura, pero el PSE-EE ha decidido que tanto da, ya que mantiene la intención de presentar la moción de censura; el PP se ha abstenido en Mondragón, lo mismo que EA, y ha apoyado la moción en Hernani (Guipúzcoa), como EA; los dos concejales de IU-EB en Mondragón se han abstenido, pero en contra de la opinión de la dirección… No se podía actuar de manera más torpe, también desde el punto de vista de quienes han impulsado las mociones de censura.
Si ya desde antes lo tenían difícil, después de este inicio lo tienen aún más. Es posible, con todo, que las «mociones éticas» salgan adelante en algún que otro municipio, ya que para ello es suficiente la mayoría simple, pero difícilmente conseguirán prácticamente en ninguna parte la mayoría absoluta necesaria para quitar la alcaldía a EAE-ANV mediante mociones de censura. En Placencia de Armas (Guipúzcoa) es suficiente que se unan el PNV, el PSE-EE y el PP, y en Legazpi (Guipúzcoa), Villabona (Guipúzcoa) y Pasajes (Guipúzcoa), si logran unir a los electos de IU-EB. Punto.
Pero la moción de censura no es, al parecer, la única herramienta para enfrentarse a los alcaldes de EAE-ANV. Ahí está la Audiencia Nacional, ahí está Garzón. El mismo día que la han rechazado en Hernani, la Audiencia Nacional ha vuelto a citar a la alcaldesa, Marian Beitialarrangoitia, imputándole vulnerar la suspensión de actividades de EAE-ANV. Lo que los electos de la oposición no han conseguido con la legitimidad de los votos de la ciudadanía, un juez instructor español puede lograrlo.
Berria, 26 de abril de 2008
http://www.berria.info/testua_ikusi.php?saila=harian&data=2008-04-26&orria=009&kont=007
1. Diputado general de Vizcaya (PNV). El pasado 23 de abril afirmó que la fórmula de gobierno actualmente vigente en la Comunidad Autónoma Vasca (CAV) (formado por PNV, EA e IU-EB) está agotada y abogó por una «gran coalición» entre PNV y PSE-EE. (N. del t.)
2. Máximo órgano del PNV, presidido actualmente por Iñigo Urkullu. (N. del t.)
3. Alusión a la votación de la Propuesta de Estatuto político para la comunidad de Euskadi presentada por el gobierno de la CAV y en cuya votación parlamentaria la representación de la izquierda abertzale (Sozialista Abertzaleak) voto estratégicamente (la mitad a favor y la otra mitad en contra) para permitir su aprobación con el mínimo apoyo posible. (N. del t.)
4. Residencia del lehendakari. Alusión a las pretensiones del PSE-EE de colocar en ella a su secretario general y candidato, Patxi López. (N. del t.)