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2006 año de la "Memoria Histórica"

Recordando la legitimidad

Fuentes: Rebelión

Gracias a una propuesta de Izquierda Unida, se va a estimar que el año 2006 sea el año de «La Memoria Histórica». Y es que el 14 de abril se cumple el 75 aniversario de la proclamación de la Segunda República Española. Cualquiera que conozca un poco sobre el tema sabrá que España tuvo durante […]

Gracias a una propuesta de Izquierda Unida, se va a estimar que el año 2006 sea el año de «La Memoria Histórica». Y es que el 14 de abril se cumple el 75 aniversario de la proclamación de la Segunda República Española. Cualquiera que conozca un poco sobre el tema sabrá que España tuvo durante 5 años un régimen constitucional y democrático, que fue arrebatado por los sectores más conservadores de la sociedad española.

La sublevacion del 17-18 de julio marcó claramente qué sectores luchaban por un mundo mejor, y cuales arrebataron estas esperanzas a todo aquel que no claudicara a sus ideas. La Guerra Civil Española tuvo un claro vencedor debido a varias causas, unas intrínsecas y otras extrínsecas:

1.- El claro apoyo de los militares a la causa fascista, exceptuando pequeños casos que fueron fieles al régimen legítimo.

2.- El apoyo incondicional de la Iglesia con un claro corte fascista.

3.- El falso testimonio del Comité de No-Intervención, debido a que las supuestas potencias democráticas, como EE.UU., Francia e Inglaterra permitieron la injerencia de la Alemania Nazi y del Fascismo Italiano, conociendo la situación y dando pie a que ocurriera meses más tarde el comienzo de la II Guerra Mundial.

4.- La neutralidad ante la agresión que sufriera el régimen legítimo, exceptuando la URSS y Mexico.

5.- La dificultad que encarnizó Francia cerrando las fronteras a los envíos de armas de la Unión Soviética, e incluso al tráfico de las llamadas Brigadas Internacionales.

6.- La desorganización de los partidos y, más aún, de los pueblos antifascistas realizando revolución y guerra civil al mismo tiempo, cuando era una opción bastante inviable debido a las condiciones sociales, económicas, temporales, culturales, históricas e industriales.

Después, ya sabemos lo que ocurrio: Franco constituyó su propio régimen y hasta dejó descontentos a parte de los suyos, a la otra parte los fusiló. En cuanto a los fieles al régimen republicano, murieron por una causa más que justa, en una guerra más que sangrienta. Otros fueron exterminados en innumerables fusilamientos (aún se encuentran fosas y las que quedan), gran parte dejó su patria y marchó a distintos lugares del mundo, otros tantos fueron encarcelados y murieron como ratas, y la gran mayoría no le quedó mayor opción que olvidar sus ideales socialistas para salvar a su familia.

Podemos decir que la mayor parte de la poblacíon sufrió las consecuencias de esta cruenta e injusta guerra, ya que después siguieron los fusilamientos, encarcelamientos y el hambre hasta el año 75 más o menos. No hablemos ya de la permisibidad de las Naciones Unidas hacia el único fascismo vigente hasta hace 30 años, olvidando al pueblo español y al régimen legítimo. La postura de los Estados Unidos fue la de permitir el régimen fascista como eje contra el comunismo, y exceptuando algún caso, se acató la orden. Y algo incluso más importante, un lavado continuo de cerebro que provocó la peor de las patologías, el olvido. Recordemos que sin memoria no podremos ni construír un mundo diferente, ni corregir errores.

Después, la Monarquía Parlamentaria, ilegítima, pero formó parte de un sentimiento de reconciliación en el que la izquierda perdonó, sin discutir si se equivocó o no. Lo cierto es que han tenido que pasar 75 años para que exista un planteamiento de reconocimiento al antecedente democrático del actual régimen. Después de 30 años de «pseudodemocracia», queremos únicamente lo que nos pertenece, de momento un reconocimiento, mañana ya veremos.

Sólo exigiremos la realidad, el sentimiento de este pedazo de tierra que un día sentimos como nuestro. Algunos nos comentan que no somos patriotas. Personalmente, pienso que precisamente porque lo somos queremos que nuestra verdadera patria sea una realidad, en la que confluyan distintos pueblos, cada uno con su cultura y sus raíces, respetando al prójimo y enseñando a las generaciones siguientes que se puede ser distinto al modelo marcado, es decir, ser solidario, atento, educador, comunicativo y dialogante, y no ser racista, xenófobo, autoritario, privilegiado y poseedor de la vida ajena.

La libertad de elegir no es un privilegio, es un derecho.

¡Viva la República!