«Conmemorar una fecha, aunque hayan transcurrido muchos años, no tendría sentido si la fecha que se recuerda no se guarda en las ideas y en el corazón de los pueblos». Fidel Castro Ruz En estos días tenemos muchos aniversarios que recordar y celebrar, nosotros, los irreducibles revolucionarios enamorados de Cuba: el 26 de julio, el […]
«Conmemorar una fecha, aunque hayan transcurrido muchos años, no tendría sentido si la fecha que se recuerda no se guarda en las ideas y en el corazón de los pueblos». Fidel Castro Ruz
En estos días tenemos muchos aniversarios que recordar y celebrar, nosotros, los irreducibles revolucionarios enamorados de Cuba: el 26 de julio, el ataque al Cuartel Moncada y la fundación en los Estados Unidos del Comité Nacional para la Liberación de los Cinco Cubanos, cuya coordinadora es Gloria La Riva; el 13 de agosto, día del cumpleaños de tres personas que yo considero paradigmas emancipatorios: Fidel Castro (el hombre del siglo XX que sigue iluminándonos con su sabiduría en el siglo XXI); René González (un héroe encarcelado quien nos enseñó junto con sus cuatro hermanos, que no podemos rendirnos nunca jamás) y Gloria La Riva (luchadora social, con un corazón y una resistencia enorme); el 18 de agosto, el nacimiento de otro héroe que con sus cuatro hermanos escribió parte de la historia de Cuba, Fernando González.
En esta ocasión, aprovecho la oportunidad para felicitar a los homenajeados y recuerdo una conversación muy interesante que tuve con Gloria La Riva, la última vez que estuvo en Cuba a principios del mes de mayo. Ella participó en muchas actividades, aunque la más importante, para mí, fue la del 2 de mayo, donde recibió la Medalla de la Amistad, otorgada por el Consejo de Estado, a propuesta del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos. ¿Cómo no reconocer oficialmente la ardua labor de esta mujer en favor de Cuba? Gloria es muy sensible y modesta, y sobre el tema, con una sonrisa, me dice que es ella quien se siente agradecida por la generosidad de la población de la mayor de las Antillas, «si no fuera por Cuba no podríamos aprender a cómo luchar por la justicia con tanta resistencia, hasta vencer».
Hay un argumento que Gloria quiso destacar, y es la reciente publicación de 2200 páginas que demuestran que el proceso de los Cinco Cubanos se llevó a cabo en un ambiente totalmente hostil, en una «tormenta perfecta», creada por el gobierno de EE.UU. para condenar a cinco inocentes.
«Cuando, nosotros, los del Comité Nacional logramos explicarle al pueblo norteamericano lo que sucedió en Miami durante el proceso de los Cinco, la gente se enoja y rechaza por completo el hecho de que el sistema de los EE.UU. no haya estado interesado en reconocer la justicia y la inocencia y de que haya permitido a una minoría fascista manipular, intimidar y amenazar a la corte».
Esta minoría fascista de Miami, que apoya públicamente la colocación de bombas en La Habana para dañar la imagen del turismo en Cuba, son un grupo de periodistas de El Nuevo Herald, Diario Las Américas, Radio y TV Martí, que fueron pagados por el Buró de Gobernadores de Transmisiones (BBG) y su Oficina de Transmisiones hacia Cuba (OCB) que en el proceso de los Cinco, crearon un ambiente totalmente hostil hacia los acusados, mediante la publicación de artículos basura, exagerados y fantásticos acerca de los cubanos.
El BBG fue creado después de la Segunda Guerra Mundial para administrar el presupuesto de las agencias de información de EE.UU., que se dedicaban y se dedican a desestabilizar a los gobiernos progresistas y socialistas; la responsable de estas oficinas es la secretaria de Estado, Hillary Clinton.
Radio y Tele Martí forman parte de estas agencias de noticias, se crearon bajo el gobierno de Reagan con sede en Washington y luego se trasladaron a Miami en 1997, forman parte de la «diplomacia pública» del gobierno de EE.UU. y contrataron de forma muy secreta a los supuestos periodistas independientes para atacar a los Cinco Cubanos. El Comité Nacional trató, durante mucho tiempo, en nombre de la transparencia del uso del dinero de los contribuyentes, de apelar al «Freedom Of Informacion Act» (FOIA, libertad de prensa) para saber cuáles periodistas de Miami fueron pagados por las oficinas del gobierno y cuánto le habían entregado para sembrar el terror contra los Cinco. Sólo recientemente, gracias también al apoyo de la Organización de derechos civiles legales, la Sociedad Civil para la Fundación para la Justicia y el periódico Liberación, las oficinas estatales han decidido permitir la publicación de las pruebas de que se pagaron a más de 25 periodistas centenas de miles de millones de dólares.
«Este descubrimiento fue muy importante porque puede proporcionar un fuerte argumento para la apelación y la demanda de la inmediata libertad de los cubanos, o al menos solicitar la cancelación del proceso de los Cinco, que no fue en ningún momento imparcial y justo. Por otra parte, de acuerdo con la ley que rige la ‘diplomacia pública’ en los EE.UU., está prohibido por el gobierno financiar las actividades que se dedican a la desestabilización de gobiernos extranjeros», me dice, Gloria, muy animada.
«Por ejemplo, en el affidavit de Gerardo Hernández, el imputado dijo que no tenía nada que ver con el derrumbe de los aviones del grupo terrorista Hermanos al Rescate; en ese momento Gerardo se encontraba en Miami. Y para esto, Gerardo requiere que el cargo III sea cancelado, es decir, lo que definen como ‘conspiración para cometer asesinato'».
Gloria me recuerda que Gerardo no presentó, antes, este affidavid porque no sabía de la posibilidad de separar los diversos cargos de la sentencia, su abogado, nombrado por la corte, no se lo había informado, y además, antes, no existían, tal vez, ni siquiera las condiciones actuales, en que el estado de EE.UU. se ve presionado por el descubrimiento de estos pagos ilegales a periodistas.
«Un paso adelante podría ser la celebración de una audiencia para presentar toda la evidencia una vez más, escuchar a los nuevos testigos y luego decidir qué hacer con las apelaciones que requieren la anulación del juicio. Gerardo no es el único que solicita una apelación, los otros lo seguirán y la de Antonio Guerrero ya ha sido entregada».
«Quiero dejar claro que en el peor de los casos, si no aceptan la apelación, no tenemos que desanimarnos, la lucha seguirá en todas partes del mundo».
«Y la lucha de la solidaridad es esencial e indispensable, no debemos subestimar cualquier camino posible para la libertad de los Cinco, ya que incluso la solución política puede ser la exitosa. El trabajo importante por hacer en los EE.UU. es que se conozca lo de los pagos indebidos a los periodistas, debemos hacer todo lo posible para romper el muro de silencio y dejar que la gente entienda cómo los medios de comunicación pueden afectar el buen funcionamiento de un proceso legal», dice Gloria.
«Soy muy apasionada, cuando hablo de los Cinco cubanos porque me siento como si mi corazón estuviera encerrado en una celda con ellos, no puedo imaginarme estar secuestrada casi 13 años en la cárcel sin siquiera poder ver a mi familia, los árboles, los pájaros, la naturaleza, sin ser capaz de sentir la brisa sobre mi piel, interiorizar las condiciones tan difíciles de los Cinco es una motivación indispensable para invertir todo el tiempo que tengo para reclamar su libertad», concluyó Gloria.
Y yo, poniendo mi granito de arena en la lucha, deseo con todo mi corazón y dedicaré todas mis fuerzas para que el regalo del próximo cumpleaños de Gloria y del Comandante en Jefe sean cinco abrazos reales de mis Cinco hermanos prisioneros políticos del imperio y no sólo su gran amor virtual que saben enviarnos periódicamente en sus mensajes de resistencia infinita.
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso de la autora mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.