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Ante la posible pérdida del poder político

Tiemblan en Miami congresistas cubanoamericanos

Fuentes: Rebelión

Por primera vez en varios años, los tres cubanoamericanos ultraderechistas que tienen un escaño en la cámara de Representantes federal, los hermanos Lincoln y Mario Díaz Balart e Ileana Ros Lehtinen, están temblando ante la real posibilidad de perder sus puestos y prebendas. El Partido Demócrata ha lanzado una ofensiva para recuperar el terreno que […]

Por primera vez en varios años, los tres cubanoamericanos ultraderechistas que tienen un escaño en la cámara de Representantes federal, los hermanos Lincoln y Mario Díaz Balart e Ileana Ros Lehtinen, están temblando ante la real posibilidad de perder sus puestos y prebendas.

El Partido Demócrata ha lanzado una ofensiva para recuperar el terreno que habían dejado en años anteriores a los republicanos cubanoamericanos, y ha postulado a la empresaria colombiana Annette Tadeo para que enfrente a Ileana Ros en el distrito 17, a Raúl Martínez, ex alcalde de Hialeah que lo hará contra Lincoln en el distrito 21, y a Joe García, ex director ejecutivo de la Fundación Nacional Cubano Americana (FNCA) contra Mario en el distrito 25.

Ileana Ros tendrá  una  fuerte  oposición  en su intento  de  reelección  pues Tadeo le  está  cuestionando su  incondicionalidad  con la  línea  política  de George W. Bush, considerado  como  el  presidente norteamericano  más  impopular desde los  tiempos  de  Richard Nixon  cuando tuvo  que renunciar por  el  escándalo  de  Watergate. 

En cuanto a Lincoln, los pobladores de su distrito le acusan de abandonar sus problemas más perentorios los cuales no ha resuelto en muchos años. En las elecciones de 2004, un cubanoamericano desconocido y con poco dinero, Frank González, se postuló contra Lincoln y obtuvo un 41% de los pocos electores que se presentaron a la votación. Si eso fue hace cuatro años con un incógnito competidor, que le podrá suceder ahora que debe enfrentar al popular Raúl Martínez.

Para Mario, de los tres republicanos el que lleva menos tiempo en el Congreso federal, la situación también aparece incómoda para su reelección. Muchos de sus electores recuerdan cómo perdieron dinero cuando este representante recibió un auto Jaguar convertible, modelo de 1997, valorado en 72 800 dólares como regalo de la firma de relaciones públicas Gordon-Sloan-Díaz Balart, (que además de co propietario él también representa). Mario ayudó a la compañía BellSouth Mobility a que no devolviera 40 millones de dólares a sus clientes por cobros indebidos de los servicios de teléfonos celulares.

Ahora le achacan que su distrito 25 enfrenta una situación económica seria donde el desempleo es rampante y el precio de las viviendas se ha vuelto insoportable.

Para tratar de edulcorar esas desfavorables imágenes, los tres congresistas han lanzado una fuerte campaña propagandística en las que aparecen diariamente en sus distritos, retratándose con electores o inaugurando «obras de caridad».

Pero lo fundamental es que han comprado todos los principales programas noticiosos de las emisoras radiales de Miami-Dade y de la prensa escrita, y prohíben, mediante amenazas, que sus contrincantes puedan utilizar algunos espacios. 

No obstante, una reciente encuesta realizada en  los  tres  distritos indican que los  aspirantes Tadeo, Martínez y  García cuentan  con  grandes  posibilidades  de  éxito. 

La flamante Fundación no profesional y sin fines de lucro, FORNORM, integrada por estadounidenses y cubanoamericanos pagó a la firma Hamilton Campaign para que realizara un muestreo entre los votantes de los distritos 17, 21 y 25.

El resultado general aportado por la encuestadora es que en los tres distritos, más del 50% de los consultados está a favor de que se levanten las restricciones de viajar a Cuba y se permita el envío de remesas hacia la Isla por parte de los familiares. La mayoría, sobre todo las personas jóvenes, se opone a continuar la política de bloqueo llevada a cabo por la administración norteamericana contra esa nación.

La Fundación FORNORMalization, según uno de sus integrantes, se ha creado como contrapartida a la Fundación Nacional Cubano Americana (FNCA) y trabajará en todos los campos económicos y políticos por la normalización de las relaciones entre los dos países (como indican sus siglas)

Los tres congresistas están nerviosos y muy preocupados porque tras largos años de mantener sus puestos apelando a políticas dirigida contra el gobierno cubano no se han dado cuenta que la correlación de fuerzas ha ido cambiando en Miami. Por primera ocasión enfrentarán contendientes que pueden ganarles. Esperemos las elecciones de noviembre, pueden haber sorpresas.