Con gran dignidad, por derecho propio, en la Puerta del Sol de Madrid, todos los jueves a las 7 de la tarde se concentran varios centenares de personas desde hace 5 meses. Solo los viandantes se han podido enterar ¿por qué será? Las personas concentradas exigen la anulación de los seudojuicios fascistas con las condenas […]
Con gran dignidad, por derecho propio, en la Puerta del Sol de Madrid, todos los jueves a las 7 de la tarde se concentran varios centenares de personas desde hace 5 meses. Solo los viandantes se han podido enterar ¿por qué será? Las personas concentradas exigen la anulación de los seudojuicios fascistas con las condenas correspondientes, o sea, elevar al nivel de democracia y justicia social lo que es de la democracia y la justicia social, lo que conlleva el respeto y la prioridad a la verdad, la justicia y la reparación.
Las personas que asisten a la concentración llevan fotografías de los familiares asesinados y de republicanos bien conocidos, por ejemplo Miguel Hernández, que también como sus familiares siguen condenados por los gobiernos que hemos tenido como demócratas ¿qué cree usted que son, que cree usted que es el actual gobierno? Hay tantos filtros fascistas metidos en la actual sociedad sostenida por los gobiernos anteriores a éste y las medidas tomadas por éste mismo que, en cuanto se le sigue dos pasos vemos la defensa del fascismo, o como lo llamaba Bertolt Brecht «el capitalismo sin máscara», en las medidas políticas que toma el gobierno de hoy a favor de la iglesia, contra los trabajadores, contra la memoria no permitiendo anular los seudojuicios de los criminales fascistas y llevar adelante la justicia la verdad y la reparación, dando el dinero del Estado a los bancos, que son la expresión máxima del capitalismo financiero, eliminando impuestos a los capitalistas, recortando derechos sociales, … y podíamos seguir viéndole sin máscara.
Pero estábamos en la concentración en la Puerta del Sol los jueves a las 7 de la tarde. ¿Por qué en la Puerta del Sol? Pues mire usted, allí está la antigua Dirección General de Seguridad, donde llevaban a los detenidos políticos, de izquierda, para torturarlos. Muchos miles de antifranquistas entraron esposados y salieron machacados para las cárceles o los cementerios. Para quienes no lo sepan (ignorancia instituida y fomentada por los gobernantes sucesores del franquismo) el edificio es el del reloj. Frente al edificio las personas concentradas con sus retratos y pancartas gritan señalándolo: ¡aquí se torturaba!
En ese edificio del reloj, hoy transformado por dentro para ocultar su verdadera historia inmediatamente anterior, se ha venido a establecer el gobierno de la Comunidad de Madrid. Los túneles subterráneos que pasaban ante las celdas como cuevas, con luz llameante a todas horas, frío y ecos de músicas ruidosas a todo volumen entre las que se escuchaban los gritos de los torturados, los pisotones de las botas, a veces no era la música lo que ocupaba te llegaba por los túneles a los oídos sino las torturas grabadas, los ahogos, los golpes o las descargas y los alaridos de dolor, también podías ver pasar a los guardias tirando de un torturado o arrastrándole, allí asesinaron a Julián Grimau entre otros; esos subterráneos han sido transformados en modernos pasillos, y las celdas como cuevas con barrotes se han ampliado y adaptado como agradables despachos, hasta en una zona se ha creado un institucional salón de actos, con estrado, cortinas, banderas y todos los útiles, mesas, sillones, micrófonos, … tan solo una pequeña placa menciona la institución anterior que lo ocupaba, no dice nada más, y se mantiene una celda que más parece una habitación de hotel comparada con lo que era entonces, en un entorno que generaba un ambiente de terror. ¿Puede cualquiera que entra por primera vez saber algo de lo que allí ocurría, qué clase de sitio era, quiénes lo habitaban, a qué era debido aquello? Los gobernantes lo han transformado para ocultarlo. ¿Qué tienen que ver con aquello? Por eso mismo, exigiendo verdad, justicia y reparación todos los jueves del año, a las 7 de la tarde varios cientos de personas éticas, honorables, merecedoras de admiración nos enseñan una lección de memoria histórica democrática, y gritan señalando a las hoy oficinas del Gobierno de la Comunidad de Madrid: ¡Aquí se torturaba! ¡Aquí se torturaba! ¡Aquí se torturaba!
Numerosas personalidades defensoras de los Derechos Humanos en el mundo, como las Madres de la Plaza de Mayo han acudido a la concentración para mostrar su apoyo. Todos los jueves a las 7 de la tarde en la Puerta del Sol.
Ramón Pedregal Casanova es autor de «Siete Novelas de la Memoria Histórica. Posfacios», editado por Fundación Domingo Malagón y Asociación Foro por la Memoria ([email protected])
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