Durante más de una década, el Gobierno de España, ha defendido prácticamente en solitario el cultivo de transgénicos en la Unión Europea y es el único país que ha tolerado su cultivo a gran escala, sin cumplir con las normas europeas y españolas de transparencia, sin seguir los productos a través de la cadena alimentaria, […]
Durante más de una década, el Gobierno de España, ha defendido prácticamente en solitario el cultivo de transgénicos en la Unión Europea y es el único país que ha tolerado su cultivo a gran escala, sin cumplir con las normas europeas y españolas de transparencia, sin seguir los productos a través de la cadena alimentaria, sin obligar a etiquetar los alimentos transgénicos y sin realizar seguimiento alguno de los campos cultivados con estas peligrosas semillas.
Se cultivan entorno a 70.000 hectáreas de un maíz modificado genéticamente de Monsanto, un nombre que junto a otras multinacionales (como Syngenta) sale con frecuencia en los cables que la embajada en Madrid envía a Washington.
Queda confirmado cómo, desde el Gobierno, se ha trabajado para favorecer los intereses de estas empresas. Por tanto, desde las organizaciones Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Greenpeace, COAG, Plataforma Rural y CECU exigimos a la ministra Rosa Aguilar que la política española sobre organismos modificados genéticamente (OMG) deje de estar controlada por las multinacionales y pedimos una moratoria inmediata a su cultivo en España.
La prohibición del cultivo de transgénicos por parte del Ejecutivo español es imprescindible para poder defender los intereses de nuestro medio ambiente, nuestra agricultura y la salud pública, para que éstos no sigan en manos de la industria de los transgénicos, de los intereses de EE UU y de quienes, desde las instituciones españolas, los han apoyado abiertamente, tal y como ha quedado demostrado en los cables de Wikileaks.
¡No te quedes parado ante la revelación de Wikileaks sobre los transgénicos!