Todo depende. Si está viva o si está muerta. Si vive acá o vive allá. Si la quieres o no la quieres. Si el odio te ciega o si Cuba te importa mas que tu odio y tu Bush. Todo depende. Por que como dice un viejo refrán, «nada en la vida es verdad ni […]
Todo depende. Si está viva o si está muerta. Si vive acá o vive allá. Si la quieres o no la quieres. Si el odio te ciega o si Cuba te importa mas que tu odio y tu Bush. Todo depende. Por que como dice un viejo refrán, «nada en la vida es verdad ni es mentira, todo depende del color como se mira».
Las medidas dictadas por el Presidente Bush contra los viajes humanitarios a Cuba han provocado una profunda división de opiniones entre los cubanos que viven en Estados Unidos. Si lo que pretendían los consejeros del Presidente era ganar votos para las elecciones de noviembre, lo que han logrado es todo lo contrario. Porque no solo han provocado un rechazo de gran parte de la comunidad cubana del sur de La Florida sino que además- como así lo refleja la prensa a lo largo y ancho de todo el país- la opinión pública norteamericana, como sucedió antes cuando el secuestro del niño Elián González en Miami, ahora también esta se ha colocado de parte de los que defienden los valores familiares frente a los que por razones mezquinas de política electorera atentan contra la unidad de la familia cubana.
Si el debate electoral hubiera sido como estaba planteado: Demócratas frente a Republicanos. Kerry frente a Bush. Los que están a favor del Presidente que ocupa la Casa Blanca y los que quieren poner a un Demócrata en su lugar, no dudaríamos que la victoria entre los electores de origen cubanos estaría asegurada para el candidato Republicano.
Es cierto que en las pasadas elecciones, Bush ganó el Estado de La Florida por solo 537 votos- trampas aparte- pero sin embargo obtuvo el 80 % de aprobación entre los cubanos que votaron en aquellas elecciones del año dos mil. ¿ De donde sacaron ahora entonces los malos consejeros del presidente que era necesario castigar al pueblo y a la familia cubana para consolidar el voto de los cubano-americanos de La Florida? ¿ Que pretendían? ¿La unanimidad? ¿ O es que el odio ciego pudo mas que la inteligencia?
Ahí está la clave. Es el odio y la venganza de los que no tienen familiares en la isla contra aquellos compatriotas que todavía conservan lazos estrechos de sangre en Cuba. Llegaron hasta sacar la cuenta matemática de que son mas los cubanos con votos, los que llegaron a Estados Unidos en los primeros años, que los que arribaron a Estados Unidos en los años ochenta hasta el presente. Cálculo cínico, brutal, inhumano y oportunista.
Dicen : «Si tu madre está allá, que se muera tu madre por quedarse allá, que la mía la tengo acá y a mí tu madre no me importa, como no me importan tus hijos, ni tus hermanos, ni tu padre ni tu tío ni tus primos, que no me importan los que allá se quedaron porque tampoco me importa Cuba ni los cubanos que viven allá». Así los escucho vociferar.
Solo les falta decir: «A mí quien me importa es solamente Bush». Porque de eso y solamente de eso es de lo que se trata, de un juego electoral de poca monta donde no cuenta ni los tan cacareados Derechos Humanos, ni los lazos de familia, ni Cuba ni sus doce millones de cubanos que viven allá. ¿ Se quiere mayor inhumanidad?
Mal cálculo político el que han sacado los consejeros del Presidente Bush. Porque esta elección presidencial de noviembre no es para los cubanos que viven en Estados Unidos, un simple juego entre Demócratas y Republicanos, un juego electoral entre un Bush y un Kerry, que para tantas otras cosas da igual un Kerry que un Bush. Lo que está en juego para los cubanos es si veré a mi madre viva dentro de tres años o si no me dejan ir dentro de tres años porque ya no tengo familia en Cuba porque mi madre ya está sepultada en el cementerio.
De eso es de lo que se trata esta elección para los cubanos. De la familia y la madre ¿ Y tu madre, y tu madre donde está?
2004-07-06
Programa Réplica de Radio-Miami