Ajeno a lo que a diario hace y ejecuta el gobierno de Blair en Iraq o Afganistán, lejos del reciente asesinato en Londres del joven brasileño a manos de la policía británica, el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, fue a Londres a dar su apoyo a su correligionario Tony Blair. Recordemos que […]
Ajeno a lo que a diario hace y ejecuta el gobierno de Blair en Iraq o Afganistán, lejos del reciente asesinato en Londres del joven brasileño a manos de la policía británica, el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, fue a Londres a dar su apoyo a su correligionario Tony Blair. Recordemos que el criminal de guerra británico es vicepresidente de la Internacional Socialista. También hablaron de la alianza de civilizaciones, y quizás de lo maravillosamente bien que se lleva Tony con Bush. Curiosa gente ésta, que sonríe con las manos manchadas de sangre.
La creación de una «alianza de civilizaciones» que reúna a países occidentales y musulmanes para combatir «la barbarie del terrorismo» fue discutida ayer por los jefes de gobierno británico, Tony Blair, y español, José Rodríguez Zapatero, en la visita de este último a Londres. Blair afirmó su apoyo a la idea de un acercamiento entre el mundo occidental y el mundo árabe-musulmán, que había sido propuesto por Zapatero ante la Asamblea General de la ONU, en setiembre pasado.
«Hemos discutido la propuesta que hizo el presidente del gobierno español de lo que llama una alianza de civilizaciones, que es la idea para agrupar a nuestros países con los países musulmanes, para formar una coalición de los pueblos, sea cual sea su religión, para combatir la barbarie del terrorismo», declaró Blair. «Pienso que es una propuesta que tiene un potencial que podemos desarrollar en los próximos meses», agregó Blair durante una rueda de prensa conjunta.
«El término, alianza de civilizaciones, está en directo contraste con la idea de que estamos en un choque de civilizaciones. Los terroristas son los que quieren avivar las diferencias entre el Islam y el resto del mundo», apuntó.
«Creo que la idea de reunir a España, a Turquía y a otros países para expresar su solidaridad, más allá de las diferencias religiosas, es importante», añadió.
Zapatero anunció, a su vez, que había invitado a Blair a que haga una propuesta sobre lo que va a ser la constitución de un grupo de alto nivel que desarrolla los trabajos sobre esta iniciativa, en el ámbito de la ONU. Ambos dirigentes, cuyos países fueron víctimas de atentados en sus transportes públicos, evocaron principalmente la lucha contra el terrorismo durante su encuentro.
El gobernante español aseguró que una unidad sin fisuras de todos los demócratas es garantía para reducir, prevenir y eliminar el terrorismo. «No estamos ante un problema que afecta a una o a otra civilización, a una u otra religión. Estamos ante un problema entre terroristas, fanáticos y gente de bien», resaltó.
Blair y Zapatero reflexionaron sobre los medios para combatir el extremismo, que «se apoya en una interpretación pervertida y deformada del Islam» y en «la radicalización de jóvenes musulmanes en nuestras comunidades», indicó Blair.