Traducido para Rebelión por Beatriz Morales Bastos
El ministro palestino de Asuntos de los prisioneros y ex- prisioneros informó el pasado jueves [5 de mayo] que el número de prisioneros en las cárceles y centros de detención israelíes ascendía a 8814 personas.
Añadió además que las condiciones de encarcelamiento de los prisioneros se han ido deteriorado hasta extremos alarmantes y que los prisioneros se ven privados de los derechos humanos y civiles más básicos dado que los servicios penitenciarios israelíes están revocando los logros ganados por los prisioneros después de su larga lucha y de sus huelgas de hambre.
El departamento de comunicación del ministerio afirmó que la campaña de arrestos de la ocupación israelí no ha amainado en absoluto en los territorios palestinos ocupados a pesar del acuerdo de tregua entre palestinos e israelíes.
Las fuerzas de ocupación israelíes continúan realizando arrestos arbitrarios contra los ciudadanos, y las cárceles u centros de detención israelíes continúan abarrotados de prisioneros palestinos.
El departamento de comunicación afirma en un informe publicado que los prisioneros están repartidos en unos 28 prisiones y centros de detención, y que la mayoría de ellos se encuentran en la prisión Negev donde están encerrados unos 2250 prisioneros palestinos.
El ministro también afirmó que los servicios penitenciarios israelíes reprimen persistentemente a las prisioneras y a los prisioneros con registros desnudos, castigos muy severos por motivos irrelevantes y con la prohibición durante largos periodos de tiempo de las visitas de sus familiares.
Los datos del ministro muestran además que casi mil prisioneros enfermos padecen enfermedades que son resultado directo de las duras condiciones de encarcelamiento.
Los prisioneros enfermos necesitan atención médica apropiada incluyendo operaciones quirúrgicas, algo que las autoridades militares y los servicios penitenciarios israelí muy raramente, si no nunca, proporcionan. Algunas de las dolencias que sufren los prisioneros palestinos debido al frío y humedad reinantes en las celdas son asma, debido a la mala ventilación, y hemorroides, debido a la alimentación excesivamente especiada o en malas condiciones.
El ministro hizo un llamamiento a la Cruz Roja Internacional y a relevantes organismos de derechos humanos para que hagan más presión sobre Tel Aviv para proteger a los prisioneros palestinos que abarrotan las cárceles israelíes.