Traducido del inglés para Rebelión por Sinfo Fernández.
Los aviones estadounidenses están machacando Siria. Pero el Estado Islámico en Iraq y el Levante (EIIL) sigue apoderándose de nuevos territorios y poniendo cada vez a más personas bajo sus banderas negras.
El Estado Islámico para Iraq y el Levante sigue ganando terreno en Siria, a pesar de los casi 800 ataques aéreos llevados a cabo por la coalición dirigida por EEUU en un intento de romper su avance.
Al menos una tercera parte del territorio del país está ahora bajo influencia del EIIL, con avances recientes en zonas rurales que le pueden servir de conducto hacia las principales ciudades que pretende reclamar finalmente como parte de su califato. Mientras tanto, el grupo extremista islámico no parece haber sufrido pérdidas importantes sobre el terreno desde que empezaron los ataques. El resultado es un aumento del territorio neto que controla, según la información recopilada por dos grupos con fuentes sobre el terreno.
En Siria, el EIIL «no ha perdido ningún territorio importante», explicó a The Daily Beast Jennifer Cafarella, miembro del Instituto para el Estudio de la Guerra, con sede en Washington D.C., que estudia el conflicto sirio.
Incluso los oficiales del ejército estadounidense admitieron en privado a The Daily Beast que el EIIL había ganado terreno en algunas zonas, e incluso el Pentágono ha informado que el EIIL controla especialmente el territorio que rodea la ciudad norteña de Kobani. Es en esa ciudad donde la campaña dirigida por EEUU ha centrado sus ataques y el EIIL no ha podido tomarla a pesar de todos los esfuerzos desplegados.
«Sí, han ganado algún terreno. Pero hemos detenido su avance», dijo un oficial del Pentágono a The Daily Beast.
Aparte de esa información, no se han facilitado más detalles.
(Mapa de la Coalición por una Siria Democrática -10 enero 2015-)
Mapa elaborado por la Coalición por una Siria Democrática (CDS, por sus siglas en inglés), una unión de siete organizaciones sirio-estadounidenses de la oposición a Asad, donde se muestra que el EI casi ha duplicado la cantidad de territorio que controla desde que empezaron los ataques aéreos el pasado año.
«Según refleja el mapa, el EIIL ha duplicado su control territorial en Siria. Pero lo más importante es que la cifra de personas que viven ahora bajo su control también ha aumentado sustancialmente», dijo Muaz Mustafa, asesor político de la CDS. Al haber caído tanto territorio en manos del EIIL, los sirios que vivían en zonas sin gobierno o bajo control de la oposición están ahora bajo su dominio. Desde luego, en una guerra irregular como es esta, el control de la gente es mucho más importante que el control del territorio. En ese aspecto también parece que las cosas no están yendo en la dirección debida.
Según la CDS, en los primeros dos meses de los ataques aéreos estadounidenses, alrededor de un millón de sirios que anteriormente vivían en zonas controladas por la oposición moderada viven ahora en áreas bajo control de grupos extremistas como al-Nusra o el EIIL, citando conversaciones mantenidas con diplomáticos europeos que apoyan a la oposición siria.
La zona de expansión del EIIL incluye grandes segmentos del desierto de Homs, que empieza muy al sur de la disputada ciudad norteña de Alepo. Se extiende por debajo de la presunta capital del EIIL en Siria, Raqqa, y va siguiendo el camino hacia la frontera iraquí. Es un área mayoritariamente rural, por la que el EIIL no ha tenido que luchar. Lo que el grupo hizo fue tomar partes no disputadas de la campiña mientras circunvalaba los bastiones importantes del régimen en la zona, dijo Cafarella. Pero eso no significa, añadió, que esa tierra no sea valiosa para el EIIL. El recién adquirido territorio permite a sus tropas atacar y amenazar zonas más valiosas.
Desde que empezó la campaña estadounidense en agosto, «hay pequeños enclaves bajo control del EIIL al este de Homs, en al-Qalamun [que bordea el norte del Líbano] y al sur de Damasco, que parece que van creciendo debido a esa libertad para operar que les ayuda a conectar esos puntos en el oeste con territorio clave del EIIL en Raqqa y Deir es Sour», al norte y este de Siria.
Mustafa, el asesor político de la CDS, culpó de los avances territoriales del EIIL a la «ausencia de coordinación estratégica entre los ataques de la coalición y las fuerzas moderadas en el interior de Siria, lo que significa que el Ejército Libre Sirio y los grupos alineados con él no pueden utilizar esos ataques para recuperar territorio». Además, dijo Mustafa a The Daily Beast, los ataques de la coalición han logrado que otros grupos extremistas simpaticen con el EIIL.
Una de las frustraciones de los grupos de la oposición siria es que la campaña de bombardeos se ha centrado en el corazón del territorio controlado por el EIIL en vez de en las líneas del frente, donde les podrían haber hecho retroceder de sus avances territoriales.
«Los ataques de la coalición parecen seguir la misma pauta que las campañas de aviones no tripulados en Yemen o Pakistán, que se centran exclusivamente en el liderazgo. La fortaleza de la línea del frente del EIIL se ha incrementado sin duda aunque algunos de esos ataques hayan liquidado a líderes de nivel medio», dijo Mustafa.
Desde luego, los grupos de la oposición tienen un incentivo en representar el campo de batalla de forma que fomente más ataques militares tanto contra el EIIL como contra el régimen de Bashar al-Asad. No obstante, tanto los grupos de la oposición como el ejército del régimen coinciden en que el EIIL ha conseguido avances en su campaña terrestre.
Hasta el domingo [11 de enero], EEUU y sus socios de coalición habían llevado a cabo 790 ataques aéreos en Siria, según estadísticas del Pentágono. En total, EEUU ha gastado 1.200 millones de dólares en su campaña contra el EIIL en Iraq y Siria.
En sus comentarios públicos, el ejército estadounidense ha dicho repetidamente que los esfuerzos contra el EIIL van por buen camino. Sin embargo, dicen eso a menudo al hablar de su guerra en Iraq y Siria. Si se les pregunta por lo que está sucediendo en Siria, los oficiales estadounidenses hacen hincapié en que el EIIL no ha ganado terreno en Iraq. Si se les reitera si los esfuerzos de EEUU están funcionando en Siria, los militares suelen contestar indicando el hecho de que el EIIL no ha conseguido hacerse con el control de Kobani.
Por ejemplo, durante una conferencia de prensa celebrada el 6 de enero, cuando un periodista preguntó hasta «dónde llegaba ahora la fuerza relativa del EIIL», el contraalmirante John Kirby contestó hablando exclusivamente del esfuerzo de EEUU en Iraq, citando ciudades donde el ejército creía que se había conseguido «detener» el avance del EIIL.
Cuando el periodista le presionó para que diera una respuesta a lo que sucedía en Siria, Kirby, apurado, dijo: «No podría darle una información específica sobre eso, ya sabe, ¡por Dios!, creemos que hemos parado su impulso. Es algo que va lentamente, en varias etapas. Pero podemos decir que en las últimas tres o cuatro semanas hemos desactivado en gran medida su empuje».
El viernes, Kirby proclamó que el EIIL ha perdido 700 kilómetros cuadrados desde que empezó la campaña, alrededor de la mitad del tamaño de la ciudad de Nueva York o cuatro veces el tamaño del distrito de Columbia. Pero el portavoz del Pentágono no pudo decir qué porcentaje representaba esa zona en el total del territorio controlado por el EIIL. Tampoco pudo decir si esa pérdida se había producido en Iraq, Siria o en las dos naciones combinadas. Kirby afirmó: «Francamente, no estoy seguro de que eso tenga importancia. Lo que quiero decir es que ahora tienen menos territorio que antes. Están intentando defender el que ahora tienen. No están yendo a la ofensiva, están tratando realmente de respirar».
(Mapa de la Coalición por una Siria Democrática -31 agosto 2014-)
El ejército estadounidense no ha podido aprovechar bien las dificultades a que se enfrenta el EIIL. La caída mundial en los precios del petróleo amenaza la capacidad que han declarado recientemente que tienen para aumentar los ingresos, mientras que el continuo deterioro de los niveles de los servicios públicos, la distribución de la ayuda y el suministro eléctrico amenazan con socavar el apoyo al grupo en los territorios que controla. El EIIL no ha sido capaz tampoco de seguir adelante con el desafío militar al gobierno iraquí hasta llegar a Bagdad.
El ejército estadounidense hizo hincapié en que está emprendiendo una guerra en la que «primero va Iraq», centrada en eliminar en primer lugar al EIIL en ese país. Allí, EEUU puede recurrir a las tropas iraquíes en el terreno para evaluar sus esfuerzos. Pero no hay recursos equivalentes sobre el terreno en Siria. Quizá debido a esa razón, el ejército estadounidense está ofreciendo una evaluación mucho más detallada de la campaña aérea en Iraq que en Siria.
Tampoco la Fuerza Conjunta Combinada (Combined Joint Task Force) encargada de la campaña aérea estadounidense quiso contestar a las preguntas del Daily Beast sobre los avances del EIIL en Siria, ni sobre sus objetivos allí. El Mando Central estadounidense contestó: «Como principio político, no discutimos de temas de inteligencia».
Información sobre los mapas:
Los mapas proporcionados por la CDS muestran las áreas controladas por los rebeldes sirios moderados, el régimen sirio, el EIIL, el afiliado de al-Qaida en Siria al-Nusra, así como los territorios disputados por esos grupos. Los mapas fueron elaborados por un equipo de campo con la información proporcionada por redes sobre el terreno que incluían consejos civiles, organizaciones humanitarias, actores armados e información de canales sirios independientes.