Más de 200 delegados provenientes de 17 estados de la Unión y 4 provincias del Canadá participaron en la Conferencia Nacional para Lograr la Plena Normalización de las Relaciones entre Estados Unidos y Cuba la cual tuvo lugar en la ciudad de Nueva York los días 25 y 26 de marzo. La conferencia se puso […]
Más de 200 delegados provenientes de 17 estados de la Unión y 4 provincias del Canadá participaron en la Conferencia Nacional para Lograr la Plena Normalización de las Relaciones entre Estados Unidos y Cuba la cual tuvo lugar en la ciudad de Nueva York los días 25 y 26 de marzo.
La conferencia se puso como metas exigir a la nueva Administración estadounidense presidida por Donald Trump que dé fin a todas las restricciones económicas, financieras y comerciales impuestas contra Cuba; permita el derecho a viajar a Cuba, sin limitaciones, a los ciudadanos y residentes legales estadounidenses; devuelva a Cuba el territorio cubano ocupado por la fuerza en la bahía de Guantánamo donde desde hace más de cien años se asienta la tristemente célebre base naval y militar estadounidense; y que termine el millonario financiamiento de todos los programas subversivos contra la sociedad y el gobierno cubanos.
La conferencia que tuvo lugar en la Escuela de Derecho de la Universidad Fordham, en Manhattan, fue organizada por un número de organizaciones de larga y fructífera trayectoria del movimiento de solidaridad con Cuba de Estados Unidos y el Canadá, y coordinadas en este importante esfuerzo común por la coaliciones de solidaridad con Cuba de Nueva York y Nueva Jersey, encabezada, la primera de éstas, por Ike Nahem, quien jugó un papel central en el éxito de la conferencia.
Contó también este evento con la participación de una notable delegación de representantes de instituciones sociales y profesionales cubanas: la Uneac (Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba), con la presencia de su presidente, Miguel Barnet, y su vicepresidente primero, Luis Morlote; un nutrido grupo de dirigentes de la Federación de Mujeres Cubanas; como también la delegación cubana contó con la participación de dos abogados de la Unión Nacional de Juristas de Cuba; presente también estaba, Sandra Ramírez, directora del Departamento de Norte América del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP); y
como colofón, se encontraron presentes en todo momento de la reunión, la embajadora de Cuba ante la Organización de Naciones Unidas (ONU), Anayansi Rodríguez, y la embajadora alterna de Cuba ante la ONU, Ana Silvia Rodríguez y otros miembros de Misión de Cuba.
Figura principalísima invitada fue Rafael Cancel Miranda, héroe del movimiento independentista de Puerto Rico, quien fue orador de honor en el mitin de la conferencia que tuvo lugar, a salón repleto, la noche del sábado 25 de marzo en el Centro Malcolm X – Dra. Betty Shabazz, localizado en Harlem. También fue orador en ese mitin un servidor, representando en la conferencia y esa noche a la Brigada Antonio Maceo, la cual dirige, y a la coalición Alianza Martiana, de la cual la Brigada es miembro, que forman parte principal del sector progresista de la comunidad emigrada cubana en Estados Unidos.
Sesionaron durante la conferencia dos plenarias, la de apertura y la de la clausura, y 19 talleres. Los talleres tuvieron lugar en la tarde del sábado, 25 de marzo, divididos en dos sesiones, cada una de hora y media de duración. Con la participación de autoridades sobre los temas tratados se encontraban tanto estadounidenses, canadienses, latinoamericanos, así como cubanos miembros de la delegación isleña. Se trataron temas como, por ejemplo, Cuba y el movimiento de liberación e independencia de África, la democracia en Cuba, la ocupación por Estados Unidos del territorio cubano en la bahía de Guantánamo, las acciones legislativas para terminar con el bloqueo a Cuba y las campañas a nivel local con los mismos propósitos, los esfuerzos para lograr el fin del racismo en Cuba, la cultura y la música como factores de resistencia y revolución, la igualdad de la mujer y la revolución en Cuba, el internacionalismo cubano en la esfera de la salud, y aspectos organizativos en el desarrollo del movimiento de solidaridad con Cuba.
En la sesión plenaria de clausura que tuvo lugar el domingo 26 de marzo, se discutieron y adoptaron un número de acuerdos. Entre estos están: si la situación lo exigiera, volver a tener otra conferencia nacional sobre estos temas en 2019; mantener por parte de las organizaciones en Estados Unidos y Canadá que se oponen a la actual política estadounidense de agresión contra el pueblo cubano, especialmente el bloqueo, manifestaciones públicas y otras acciones encaminadas a lograr el mismo fin, especialmente los días 17 de cada mes; como también, si la situación lo ameritara, realizarlas durante el mes de octubre próximo coincidiendo con la votación por la Asamblea General de lo ONU de la Resolución contra el bloqueo a entonces ser presentada por Cuba.
Es innegable que, afortunadamente, ha habido avances en las relaciones entre los gobiernos y los pueblos de Estados Unidos y Cuba desde las decisiones anunciadas el 17 de diciembre de 2014. Pero ya han pasado dos años y varios meses desde entonces y el bloqueo sigue en pie y con la misma fuerza y fines maléficos de siempre, contra las posibilidades del pueblo cubano a vivir y desarrollarse en paz. Y resalto el bloqueo, como el ejemplo más odioso y evidente de la política de agresión permanente que por largas décadas se mantiene por el gobierno de turno de Estados Unidos con el fin de subvertir a la sociedad cubana y atentar contra su integridad como nación.
Esta conferencia, con la ejemplarizante participación de destacadas personalidades de la vida académica, profesional, cultural, política, y de activistas de base de las comunidades afroamericana, blanca y latinoamericana en Estados Unidos; y los delegados participantes del Canadá, Puerto Rico y Cuba, demuestra por sí mismo el reconocimiento de estos participantes de la necesidad de acciones en común, de reflexión en común, para entender mejor, lo que pensamos sobre esta encrucijada donde se encuentra el desarrollo del actual proceso de las relaciones entre Estados Unidos y Cuba, y entonces actuar con más efectividad, y poder insertarnos mejor en un debate general y tener más influencia, a través de diferentes y muchas maneras, en las decisiones a ser tomadas por los gobernantes de Estados Unidos en relación a nuestra querida Cuba.
Enhorabuena esto y más la conferencia logró.
Andrés Gómez, director de Areítodigital
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