Un total de 187 palestinos han muerto en cárceles israelíes desde la ocupación de la franja de Gaza, Cisjordania y Jerusalén Este, en 1967, según revela un informe publicado ayer por el Ministerio palestino para los Asuntos de los Presos y que fue recogido por la agencia Wafa. El documento señala que las ejecuciones extrajudiciales, […]
Un total de 187 palestinos han muerto en cárceles israelíes desde la ocupación de la franja de Gaza, Cisjordania y Jerusalén Este, en 1967, según revela un informe publicado ayer por el Ministerio palestino para los Asuntos de los Presos y que fue recogido por la agencia Wafa. El documento señala que las ejecuciones extrajudiciales, la tortura y el deterioro de la salud son las causas principales de los fallecimientos de los prisioneros palestinos.
El informe del Ministerio para los Asuntos de los Presos palestinos cifra en 187 los prisioneros fallecidos en las cárceles de Israel desde 1967, año en que se produjo la ocupación de la franja de Gaza, Cisjordania y JerusalénEste.
La última muerte registrada fue la de Jamal al Sarahin, de 37 años, fallecido en una prisión israelí por deterioro de su salud. Según el Ministerio, 43 de los presos que perdieron la vida fallecieron debido a negligencias sanitarias de los médicos israelíes.
Cita como causas principales del fallecimiento de los presos palestinos las ejecuciones extrajudiciales, la tortura y el deterioro de la salud. Cincuenta de los prisioneros resultaron muertos tras ser liberados durante la intifada de Al Aqsa.
Según la información difundida ayer, el informe subraya también que el Gobierno israelí «es el único de todo el mundo que da cobertura legal a la tortura y a los asesinatos en sus prisiones».
En estos momentos existen al menos 10.000 presos palestinos en cárceles israelíes, incluidos mujeres y niños, y cientos de ellos permanecen detenidos bajo la figura legal israelí de «detención administrativa», que permite los arrestos sin cargos ni investigaciones.
Cohetes sobre Israel
Militantes palestinos en la franja de Gaza dispararon ayer, por otra parte, al menos tres cohetes Al Kasam sobre territorio israelí, según informaron medios de comunicación locales.
El tercero de estos proyectiles, de fabricación artesanal, impactó en una zona al norte de la localidad israelí de Sderot, situada a pocos kilómetros de la franja de Gaza, aunque no causó víctimas o daños, agregaron las fuentes.
Otros dos cohetes disparados desde Gaza hicieron impacto en una zona del desierto meridional del Neguev próxima a Gaza. Tampoco causaron daños.
Las Brigadas al Quds, brazo armado de la Yihad Islámica, asumieron la autoría de los ataques.
El Ejército israelí afirmó que varias ojivas de mortero había caído en «zonas inhabitadas de Israel».