Durante la tarde de ayer lunes tuvo lugar una reunión de la Comisión Permanente Federal de IU, en la que el aparato federal de IU planteó la elección de Gaspar Llamazares como candidato a presidente del gobierno en el próximo consejo político federal. La elección debería producirse saltándose el método aprobado por la coalición en […]
Durante la tarde de ayer lunes tuvo lugar una reunión de la Comisión Permanente Federal de IU, en la que el aparato federal de IU planteó la elección de Gaspar Llamazares como candidato a presidente del gobierno en el próximo consejo político federal.
La elección debería producirse saltándose el método aprobado por la coalición en su último consejo federal celebrado el 18 de Julio, donde se acordó una convención previa a la elección. La situación amenaza con agravarse en las próximas semanas. Una organización desgarrada por un conflicto interno interminable que amenaza con un sonoro estallido, si se concretase la propuesta de voces cercanas a Llamazares de presentarse conjuntamente con el PSOE, en al menos 7 circunscripciones. La negativa de Gaspar Llamazares a someterse a los métodos aprobados para ser elegido no es la primera vez que ocurre, durante la última asamblea federal fue cambiado el método de elección para finalmente salir elegido con el apoyo de los coordinadores, después de perder la asamblea.
Enrique Santiago, responsable de relaciones políticas del PCE, ha encabezado varios intentos por encontrar una salida unitaria a la crisis. El último se produjo en el último consejo político federal en el que planteó el cese de las expulsiones, la congelación de los conflictos, la readmisión de los expulsados, la negativa expresa a las listas conjuntas con el PSOE y la elección directa de las candidaturas por las asambleas de base, como un primer impulso de lo que vino a denominar la Refundación participativa de la Izquierda para la Tercera República.
De momento los sectores próximos a Paco Frutos y a Felipe Alcaraz han pasado el verano flirteando con la posiblidad de proponer a Rosa Aguilar como candidata a presidenta del gobierno, ella misma lo ha descartado en varias ocasiones. Algo que Rubén Fernandez mano derecha de Llamazares no ha dejado la ocasión de recordar en una nota de prensa de día 6 de septiembre.Su apoyo a Llamazares parece claro, más aún, después del severo varapalo sufrido en la últimas elecciones locales donde estuvo a punto de perder la alcaldía de Córdoba. Cualquier cosa es posible, la hipótesis de la ruptura viene barajándose desde la última asamblea, ahora se abre la posibilidad de que esta pudiera producirse antes de las elecciones generales.
De momento el PCE no apoya ningún candidato, la vieja guardia encabezada por su presidente y su secretario general prefieren cualquier opción antes que abrir un escenario de relevos. Oponerse a Llamazares es una cosa, abrir un proceso de transformación de la izquierda en España para construir la tercera república es otra que podría llevárselos a ellos también por delante.