El director del Proyecto sobre Medios Árabes de la Universidad de Cambridge, Khaled Hroub, afirmó ayer en Santander que el problema en Palestina «no es Hamas», sino la «brutal» ocupación israelí. Según este experto en Hamas –acrónimo en árabe del Movimiento de Resistencia Islámico–, ésta es la idea que intenta «mostrar» la comunidad internacional que, […]
El director del Proyecto sobre Medios Árabes de la Universidad de Cambridge, Khaled Hroub, afirmó ayer en Santander que el problema en Palestina «no es Hamas», sino la «brutal» ocupación israelí.
Según este experto en Hamas –acrónimo en árabe del Movimiento de Resistencia Islámico–, ésta es la idea que intenta «mostrar» la comunidad internacional que, en su opinión, «parece estar compuesta únicamente por Estados Unidos, la Unión Europea e Israel».
Hroub, ponente del seminario ‘Islamismos en contexto: participación política, contestación y rebelión’ organizado por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), recalcó que «la causa de todos los males en Palestina» es la invasión que lleva a cabo el Estado hebreo y no una organización «que surgió en 1987, cuarenta años después del comienzo de la ocupación».
En cuanto a la posibilidad de terminar con el enfrentamiento, el profesor palestino explicó que, a su juicio, «no hay seriedad para resolverlo» ya que «todo se centra en los intereses de Israel y EE.UU.». Asimismo, consideró que el país norteamericano actúa como «eco» del Estado judío.
«Hamas es un pretexto para prolongar el conflicto» añadió Hroub, para quien EE.UU. e Israel utilizan como «justificación» el papel del Movimiento de Resistencia Islámico en su discurso sobre esta zona. «Hamas es sólo un elemento de un conflicto que necesita mediación externa porque las dos partes no son iguales», matizó.
Según Hroub, el «sentimiento de culpa» derivado del Holocausto provoca «miedo al antisemitismo» y que se «permitan» las acciones de Israel. Además, resumió que las reivindicaciones de sus compatriotas «no son eliminar a los judíos» sino «solamente» aplicar las resoluciones de la ONU a la hora de repartir el territorio entre Palestina e Israel. «El deseo de los palestinos no es un milagro», concluyó.
En cuanto a las elecciones palestinas de 2006, el autor de varios libros sobre el Movimiento de Resistencia Islámico hizo hincapié en la paradoja de que esta organización «no quería ganar» y venció, lo contrario que le sucedió a Fatah, «que sí quería ganar y no lo consiguió».
En este sentido, atribuyó la falta de interés de Hamas en vencer en estos comicios a que «querían contar con un 40 por ciento de votos» y tener la ayuda de partidos minoritarios para «controlar» el Parlamento «sin ensuciarse las manos» con acciones de Gobierno.
Respecto a la situación actual, Hroub criticó que «desgraciadamente» Fatah «siga siendo el interlocutor» palestino con la comunidad internacional mientras que con Hamas, que ganó, «nadie habla». Además, manifestó que el pueblo palestino actualmente tiene un «liderazgo débil y sin consenso» frente a Yassir Arafat, quien era un personaje «fuerte y consolidado».