La última comunicación con el internacionalista español Manu Pineda que está en Gaza, me pedía que trasmitiese al mundo sus palabras: «Están entrando los militares sionistas por el norte y arrasan todo. Han bombardeado el hospital y es una masacre. ¡Que alguien pare ésto! ¡Es una masacre! ¡es una masacre! No puedo seguir hablando. Apenas […]
La última comunicación con el internacionalista español Manu Pineda que está en Gaza, me pedía que trasmitiese al mundo sus palabras: «Están entrando los militares sionistas por el norte y arrasan todo. Han bombardeado el hospital y es una masacre. ¡Que alguien pare ésto! ¡Es una masacre! ¡es una masacre! No puedo seguir hablando. Apenas me queda batería. Tengo que continuar. Manda lo que te he dicho al mundo entero. Que lo sepa el mundo entero. Salid a la calle. Movilizaros. Muchas gracias».
Una hora antes me había dicho que se iba ya para el hospital y que iba a estar hasta las 7 de la mañana, que hablaríamos después. En la comunicación se escuchaba un ruido ensordecedor, aunque en ese momento lo atribuí a problemas de comunicación, ¿qué estaba ocurriendo entonces? ¿Cómo nos defendemos los palestinos del mundo? ¿Cómo defendemos a los hermanos que nos llaman a luchar en las trincheras del mundo? Gritad en las calles y en las fábricas, reuniros en los colegios y en las universidades, salid a la calle y gritar, exigid a los gobiernos que rompan relaciones con el Israel, boicotead sus productos, cuyo código de barras comienza en España por 729.
En estos momentos los nazis sionistas matan a niñas y niños, a mujeres y a hombres, bombardean hospitales y colegios, casas y calles, mezquitas y centros de refugio, casas de gobierno y playas. Los nazis sionistas, lo sabéis, echan a las buenas gentes de su tierra y de sus casas, asesinan los Derechos Humanos y la Justicia.
«Están entrando los militares sionistas por el norte y arrasan todo. Han bombardeado el hospital y es una masacre. ¡Que alguien pare ésto! ¡Es una masacre! ¡es una masacre! No puedo seguir hablando. Apenas me queda batería. Tengo que continuar. Manda lo que te he dicho al mundo entero. Que lo sepa el mundo entero. Salid a la calle. Movilizaros. Muchas gracias».
Toda nuestra solidaridad con el pueblo palestino.
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