A Hugo Rafael Chávez Frías, patriota revolucionario, comunicador por excelencia que utilizó las nuevas tecnologías de las comunicaciones como contraofensiva de réplica e impugnación al principal enemigo de Nuestra América y sus secuaces.
El caso
A partir de haber sido revelado el proyecto-programa Zunzuneo, promovido por la USAID del gobierno norteamericano para subvertir el orden establecido en Cuba, múltiples informaciones, artículos, reflexiones y comentarios han copado prácticamente todos los medios de información cubanos, incluyendo el digital, último llegado a nuestro espacio informativo.
Se han dado diversas explicaciones con argumentos que demuestran el intento, una vez más, de atraer al país, como otrora, a la esfera de influencia norteamericana y convertirlo hogaño en el acólito sometido de antaño.
Se manifiesta en el el desarrollo de una política que conduce a las más burdas violaciones de los tan cacareados derechos humanos y de las normas más elementales del derecho y el respeto internacional, apoyada en el dominio sin precedentes de una fuerza militar y de los medios de información. .
Consideraciones generales
Empleando un lenguaje popular, para qué sea más asequible y entendible, se puede decir que esta acción subversiva refleja la actitud y conducta del guapo del barrio, arrogante y prepotente, que impone y trata de imponer sus reglas de juego para su propio beneficio y «buen vivir». Es el egoísmo primitivo y salvaje, derivado de su naturaleza animal.
Denuncias y condenas de estos modos y maneras de actuar del poderoso de este mundo ha habido, hay y habrá, tanto en foros nacionales como internacionales. Es correcto mientras siga actuando de esa forma; pero cabe preguntarse, ¿basta con esas declaraciones?, y a nosotros los cubanos, ¿sólo con eso nos basta?
Ha transcurrido medio siglo y en este caso la verdad de Perogrullo es que desde los mismos inicios de la Revolución Cubana los yanquis, de cualquier forma la han querido eliminar. Si lo vemos en tiempo geológico, es un fragmento de tiempo ínfimo, una pizca imperceptible, Es un poco mayor si nos referimos a el en el tiempo histórico. Pero si se contempla y analiza en la escala de una vida o de una generación, es grande, muy grande incluso y hay que tenerlo en cuenta.
Discursando en lenguaje generacional, se puede considerar que mi generación, independientemente de de las interdigitaciones generacionales existentes, fue en la que se apoyó la generación histórica de la Revolución para la consecución de los fines de una verdadera independencia. Fue la generación de apoyo por secuencia natural y lógica. No hubo salto generacional alguno. Hubo continuidad. Los que nos mantenemos, nos enorgullecemos de ello.
Aquella generación llamada histórica, que prendió la chispa de la Revolución, joven, enérgica y martiana fundamentalmente, sin pensar aún, ni mucho menos declararse socialista por su mayoría, desde sus inicios, enseñó a todo un pueblo, con toda su gama generacional incluida, a dar una respuesta a cada acción o ataque del superpoderoso vecino contra nuestro país y su incipiente Revolución. Cada respuesta tuvo la verdad como base de esa contraofensiva revolucionaria. Fidel, siguiendo a Martí, fue el artífice de aquella enseñanza. Es uno de sus tantos méritos históricos.
Mencionaré solo un ejemplo de aquellas respuestas: La Operación Verdad, casi inmediatamente después del 1ro de Enero de 1959, realizada con el fin de salirle al paso y neutralizar la campaña que se orquestó a nivel internacional por los medios y agencias noticiosas extranjeras contra el fusilamiento de criminales y asesinos sadomasoquistas de la tiranía batistiana. Entre ellas se encontraba la AP, que ahora dio a conocer y reveló el proyecto Zunzuneo (a la AP y a la UPI, ambas norteamericanas, las denominábamos entonces, con toda intención, como las P).
En dicha Operación, como correspondía y procedía, hubo explicaciones y aclaraciones por parte de nuestros medios, destinadas a esclarecer la opinión internacional. Pero además, de dicha Operación se derivó la fundación de Radio Habana Cuba, de Prensa Latina y del Noticiero ICAIC Latinoamericano. Hubo respuesta política ideológica, apoyada en una base material de acuerdo a nuestras condiciones y posibilidades de aquel momento para hacerle frente y hacer más eficaz a aquella batalla en los medios de comunicación e información.
En estos momentos, encontrándonos en un nuevo peldaño de la espiral histórica, en otras condiciones y situaciones mucho más complejas y difíciles, por todo lo que ha habido y sucedido, y ante la presencia de otras generaciones que no vieron el rollo de la película que vimos las generaciones precedentes, se explica exhaustivamente a todos que la acción de intromisión del Zunzuneo tuvo y tiene como objetivo principal a las nuevas generaciones, por el uso que hacen de móviles y celulares en particular y de las llamadas nuevas Tecnologías de la Información y Comunicaciones (TICs), en general.
Es bueno que se haga esta advertencia, sobre todo a los jóvenes, que en definitiva han visto y ven ahora otro rollo, complicado y diferente, de la película, que no lo pueden comparar con el que no vieron por mucho que se les diga y explique, aunque es correcto subrayar que alertar y advertir es siempre válido y procedente, aunque debe hacerse de una manera atractiva y creativa, no provocadora de rechazo.
Sí, porque estas explicaciones por repetitivas, aburridas, con frases-cliché acuñadas, generan una suerte de redundancia cacofóníca que no es nada atractiva, que crea sobresaturación y rechazo psicológicos en una juventud para nada tonta que la Revolución ha enseñado y formado. Esto preocupa a muchos en la base, que son los que los sufren, por errores cometidos con anterioridad, que no deben volver a repetirse.
Preocupa la vuelta de prohibiciones y limitaciones, a veces absurdas a las TICs, que lo que hacen es frenar el avance tecnológico, el progreso científico técnico, económico, comercial, cultural y de todo tipo y que provocan el intento oportunista por parte de la comparsa de los grupúsculos contrarrevolucionarios, con Yoani Sánchez a la cabeza, apoyados por un abultado presupuesto financiero yanqui con el fin de enseñorearse de ellos para liderarlos. No se debe permitir y se le debe salir al paso para neutralizarlo.
En definitiva, como ya se ha repetido por muchos, las TICs han llegado para quedarse, representan el avance científico técnico de estos tiempos, y no introducirnos completa y plenamente en ellas y penetrarlas, significa y sería más que atrasarnos.
Lo que corresponde y se desprende, como en otros tiempos, es actualizarlas materialmente para hacer más eficaz una respuesta que se le debe dar al Zunzuneo y a otros posibles medios, proyectos y programas, como el de la Oficina de Transmisiones a Cuba (OCB, por sus siglas en inglés), que son y puedan ser esgrimidos por el guapo del barrio y al que no se le debe demostrar temor alguno, para que al menos lo piense dos veces antes de volver a intentar maniobras de este tipo, so pena que se le reviertan en su contra.
La Respuesta
Hace un par de meses atrás ETECSA anunció la existencia y el empleo por parte de los pobladores de la Isla de 2 millones de celulares. Eso, en una población de 11 millones representa solo el 18% de sus habitantes. La quinta parte de sus habitantes. Mucho menos cubanos tienen computadoras en sus casas.
Tras el triunfo revolucionario Cuba, con 6 millones de habitantes, heredó del sistema anterior, aproximadamente, el 35% de su población analfabeta, que era unos 2 millones de personas.
En la práctica la Revolución Cubana comenzó alfabetizando a esa parte de su población, que era la tercera parte de la misma, exigiéndole con esto que además de saber leer y escribir, continuara estudiando para el ulterior avance y progreso del país.
Si queremos vencer en esta nueva batalla de los medios que enfrenta el país, se debe rescatar aquella bella y hermosa tradición revolucionaria y enseñar e incorporar a todos los cubanos al mundo de las nuevas tecnologías, realizando una nueva Campaña de Alfabetización, pero esta vez Digital. Enseñar es obra revolucionaria.
Campaña esta que, como tarea, debe entregársele a los jóvenes, a las nuevas generaciones para que sea emprendida y llevada a cabo por ellas, como quehacer esencial para la supervivencia e independencia de la Patria, tal y como a nuestra generación se le entregó la Campaña de Alfabetización, que se emprendió y realizó en el año 1961. Valentía, audacia e inteligencia la deben acompañar. Es una revitalización, condición primordial para la actualización.
La Campaña de Alfabetización Digital, bien llevada, debe ser extendida a cada habitante y a cada casa de este país, como contundente respuesta revolucionaria al Zunzuneo y otras artimañas semejantes, así como a sus oportunistas, quintacolumnistas y neoanexionistas acompañantes. La suerte debe ser echada.
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