Traducido del inglés para Rebelión por Sinfo Fernández
El periódico israelí Haaretz informaba el pasado jueves que docenas de antiguos oficiales del ejército israelí y un amplio número de efectivos del Mossad (inteligencia israelí) y de del Shabak (servicio secreto israelí) están en activo cooperando con los aparatos de la seguridad israelí en varios países árabes del Golfo.
Los países en cuestión son aquellos que mantienen destacadas relaciones con los Estados Unidos y los servicios de seguridad israelíes están allí activos aunque a través de agencias extranjeras especializadas en seguridad.
El informe del Haaretz añadía que esos oficiales de la seguridad están desempeñando una amplia variedad de actividades de seguridad en el Golfo Arábigo, donde se están gastando decenas de millones de dólares USA.
Esas actividades incluyen el entrenamiento del personal árabe de seguridad en el manejo de armamento avanzado, equipamiento de inteligencia, técnicas de protección de fronteras, técnicas para contrarrestar intentos de secuestro, de golpe de estado y de ocupación de instalaciones estratégicas, tales como refinerías de petróleo.
El informe mencionaba varios nombres de antiguos oficiales de la seguridad israelí que están participando en esos programas, tales como Giora Island, el antiguo director del Consejo de Seguridad Nacional israelí, y el General Doron Almong. Además, varias compañías y la Agencia de Desarrollo de la Fuerza Aérea están activas en el Golfo Árabe bajo la supervisión directa del Ministerio de Seguridad israelí.
La compañía internacional sueca AGT, que fue creada por el hombre de negocios estadounidense-israelí Mani Kochavi, ganó un contrato por valor de cientos de millones de dólares USA para construir un proyecto de la seguridad interior israelí en uno de los Emiratos del Golfo Árabe.
Haaretz añadió que el periódico Al Zawiya, que tiene su sede en el Golfo Árabe, ya informaba del asunto en marzo de 2008.
Kochavi es también el director del Grupo Tecnológico Sentry (STG, en sus siglas en inglés), que pertenece a las corporaciones que en Estados Unidos se dedicaban a conseguir rápidos desarrollos en el campo de la seguridad.
El STG era también socio de las Industrias de la Fuerza Aérea israelí, que vende equipamiento y tecnologías especializadas en seguridad de aeropuertos en EEUU y otros países, incluyendo países del Oriente Medio.
Recientemente, STG compró equipamiento, por valor de decenas de millones de dólares USA, a compañías israelíes especializadas en el desarrollo de programas de control y seguimiento.
El antiguo dirigente de la Fuerza Aérea israelí, Etan Bin Elyahu, dijo que salió de STG hace varios años, una vez que esta compañía empezó a operar fuera de EEUU.
Kochavi está contratando a docenas de oficiales que anteriormente habían trabajado en el ejército israelí, además de varios antiguos oficiales del ejército israelí y de las industrias de las fuerzas aéreas y a oficiales que trabajaron para el Shabak y el Mossad.
Un portavoz de Kochavi afirmó que todas las operaciones de la compañía se llevan a cabo bajo la supervisión de la agencia de seguridad israelí y de todas sus filiales.
Kochavi es un israelí que se trasladó a vivir a EEUU e hizo su fortuna en el negocio inmobiliario. En años recientes, y especialmente tras los ataques del 11-S, empezó a introducirse en los servicios de seguridad interior y a desarrollar relaciones con las agencias de seguridad israelíes. Fue entonces cuando empezó a contratar a antiguos oficiales de la seguridad.
Las agencias de seguridad israelíes son muy activas a la hora de promover industrias de seguridad y fabricación de armas y también en actividades de exportación de las mismas a los países árabes, especialmente a los países que tienen buenas relaciones con Estados Unidas y podrían sentirse amenazados por Irán.
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