El régimen israelí, en una nueva maniobra dilatoria, aplazó la transferencia a la Autoridad Nacional Palestina (ANP) del control de cinco ciudades cisjordanas, utilizando la manida excusa de la renovada violencia en la franja de Gaza protagonizada por los grupos de resistencia que acusan al ejército israelí de haber matado, el lunes anterior, a una […]
El régimen israelí, en una nueva maniobra dilatoria, aplazó la transferencia a la Autoridad Nacional Palestina (ANP) del control de cinco ciudades cisjordanas, utilizando la manida excusa de la renovada violencia en la franja de Gaza protagonizada por los grupos de resistencia que acusan al ejército israelí de haber matado, el lunes anterior, a una niña de 10 años.
Los palestinos estaban listos para tomar este martes el control de Ramallah, Kalkiliya, Jericó, Tulkarem y Belén, pero el ministro israelí de Defensa, Shaul Mofaz, quien se reunió anoche con Mohamed Dahlan, ex ministro de la Seguridad palestina, decidió retrasar la aplicación de esta medida, indicó el ministro de la ANP a cargo de las negociaciones, Saeb Erekat.
Mofaz argumentó que la actual «calma es muy frágil. Se requiere una cooperación palestina activa para detener los ataques terroristas, especialmente en lo que se refiere a disparos de cohetes y morteros», dijo el ministro de Defensa a Radio Israel.
Hamas y Jihad Islámica lanzaron entre el lunes y este martes una andanada de granadas de mortero en dos colonias judías del sur de la franja de Gaza, que no dejaron víctimas, para vengar la muerte de una niña de 10 años abatida por fuego israelí.
Ocho de los grupos armados palestinos, entre ellos el brazo militar de Hamas, las Brigadas Ezzedin al Qassam, amenazaron con reiniciar sus ataques contra Israel y le exigieron el cese inmediato de su operaciones en la franja de Gaza.
De su lado, el ministro israelí de Vivienda, Yitzhak Herzog, dijo que Israel debe multiplicar los gestos hacia los palestinos: «Atravesamos un periodo interino muy sensible y debemos explotar las ocasiones que se presentan… sin dejar de ser prudentes».
En Ankara, Mahmud Abbas, presidente de la ANP, quien realiza una visita oficial a Turquía, aseguró que palestinos e israelíes realizan «progresos» hacia la paz en Medio Oriente, en reuniones ininterrumpidas acordadas entre las dos partes.
El presidente turco, Ahmet Necdet Se-zer, le manifestó a Abbas el apoyo de su país al proceso de paz entre Israel y la ANP y al pueblo palestino en la vía de la creación de un Estado independiente.
En otro asunto, el fiscal general israelí, Menachem Mazuz, afirmó que es ilegal la decisión de confiscar cientos de hectáreas de tierra palestinas en Jerusalén este, por lo que ordenó al gobierno cancelar la aplicación de la ley de Propiedad Ausente, de 1950.
Mazuz argumentó que dicha norma viola las leyes internacionales, por lo que será revertida por la Corte Suprema en caso de que se presente una apelación, y advirtió que sin compensación no se puede confiscar tierras que quedarían dentro del muro de separación que Israel construye en Cisjordania.