Traducido para Rebelión por Loles Oliván
Arabia Saudí reconocerá al Consejo Nacional Sirio (CNS) como «representante oficial» del pueblo sirio en el marco de una ofensiva occidental y de los países árabes del Golfo para derrocar al presidente Bashar Assad, según declaró un alto cargo del grupo opositor el viernes.
«El ministro de Exteriores saudí, príncipe Saud al-Faisal, afirmó ante una delegación del CNS con la que se reunió en El Cairo la semana pasada, que el reino reconocerá al Consejo como representante oficial del pueblo sirio», ha declarado el miembro del consejo ejecutivo del CNS, Ahmad Ramadan al periódico kuwaití Al-Rai.
Ramadán no especificó cuándo Arabia Saudí efectuará la declaración, ni si va a estar respaldada por sus aliados del Golfo Pérsico en el Consejo de Cooperación del Golfo (CCG).
Asimismo, en el periódico The Times de Reino Unido han aparecido informaciones el viernes acerca de que Arabia Saudí y Qatar empezarán a financiar al CNS así como a los grupos armados que luchan contra el régimen.
Los Estados árabes del Golfo han desarrollado un papel protagonista en el intento de derrocar al presidente sirio, al haber anunciado esta semana que retiran a sus miembros del equipo de vigilancia a Siria de la Liga Árabe.
El primer ministro qatarí Hamad bin Jassim bin Jaber Al-Zani va a presentar oficialmente un plan respaldado por Occidente ante los embajadores del Consejo de Seguridad de la ONU en Nueva York en el que se pedirá que Assad renuncie al poder en un suplente para que forme un gobierno de unidad que supervise una transición completa.
La mejora de las relaciones entre el CCG y el CNS ha despertado preocupación entre algunos sectores de la oposición siria que temen que los Estados del Golfo conviertan a Siria en un campo de batalla contra su rival, Irán.
El CCG se opone a las aspiraciones democráticas de las protestas de la primavera árabe que envuelve la región; el año pasado envió tropas al vecino Bahréin para aplastar un levantamiento similar allí.
Tampoco está claro hasta qué punto el CNS, con sede en Estambul, representa a los manifestantes sirios, ni el grado de contacto entre la revolución interna y los grupos de la oposición en el exterior.
Mientras tanto, Rusia se ha adelantado a Occidente y a los países del CCG al declarar que su propuesta de resolución de la ONU es «inaceptable».
Un alto diplomático ruso rechazó el plan al no tener en cuenta la posición de Moscú, ha informado el viernes la agencia de noticias Itar-Tass.
Los comentarios del viceministro de Relaciones Exteriores Gennady Gatilov son la última señal de que Rusia presiona con fuerza para que se cambie el borrador de resolución promovida por Occidente y por los países árabes del Golfo.
El borrador de la ONU, que se espera que sea distribuido al Consejo de Seguridad el viernes, no contiene «ninguna consideración fundamental sobre nuestra posición», y le faltan «aspectos clave que son fundamentales para nosotros», según cita el diario Itar-Tass a Gatilov.
Rusia ha declarado anteriormente que vetará cualquier resolución de la ONU que pretenda imponer sanciones a Siria o justificar una acción militar.
Rusia y China vetaron una resolución redactada por Europa en octubre, mientras que Occidente mantiene firme su presión para que Assad sea derrocado del poder.
Fuente: http://english.al-akhbar.com/