Tras la huelga general que sacudió ayer el país, y que costó la vida al menos a 23 ciudadanos, los colegios electorales abren hoy sus puertas en una jornada de votación para elegir los Consejos Municipales. Mientras, la violencia continúa en distintos puntos del país y esta madrugada ha muerto al menos una persona más. […]
Tras la huelga general que sacudió ayer el país, y que costó la vida al menos a 23 ciudadanos, los colegios electorales abren hoy sus puertas en una jornada de votación para elegir los Consejos Municipales. Mientras, la violencia continúa en distintos puntos del país y esta madrugada ha muerto al menos una persona más.
Según la agencia oficial de noticias siria, Sana, la votación se inició a las 07.00 hora local (05.00 hora GMT) en 9.849 colegios electorales. Por su parte, la televisión siria mostró imágenes de los centros de votación, donde se veían algunas colas de electores que acudieron a depositar su voto a primera hora de la mañana.
Unos 14,5 millones de sirios están llamados a acudir hoy a las urnas para elegir entre 42.889 candidatos para cubrir 17.588 asientos en 1.337 Consejos Municipales.
Una de las novedades en estas elecciones será la supervisión judicial llevada a cabo por Comisión Suprema Electoral, integrada por cinco jueces, con subcomités en todas las provincias y ciudades, en vez de las Administraciones Locales, que lo hacían en el pasado.
Mientras al Asad celebra estos comicios para aparentar una actitud «aperturista» ante la comunidad internacional, sus fuerzas continúan con la represión y han causado la muerte de una persona la pasada madrugada en la ciudad septentrional de Idleb por disparos, informó el opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
En esa localidad se registraron violentos enfrentamientos entre los leales al presidente del país, Bachar al Asad, y un grupo de supuestos soldados desertores. Choques similares se produjeron también en el sur, en la localidad Dael, situada en la provincia de Deraa, según el mismo grupo.
Las elecciones de hoy son las primeras que se celebran tras el inicio de las protestas contra el régimen de Bachar al Asad a mediados de marzo pasado y son el preludio de los comicios legislativos, que se espera que se desarrollen en febrero
Sangrienta jornada de huelga general
Durante el día de movilización nacional que se convocó ayer en Siria contra el régimen del al Asad al menos 23 personas fallecieron por la represión de las fuerzas de seguridad. La de huelga fue secundada en la mayoría de las provincias de Siria, según indicaron los opositores Comités de Coordinación Local.
Seis personas murieron en la provincia de Hama (centro), seis en la de Homs (centro), cinco en Idleb (norte), tres en Rif Damasco, en los alrededores de Damasco; y tres en Deraa, en el sur del país.
La activista de los Comités Razan Zeituneh, que el pasado octubre fue galardonada con el premio Sájarov de Libertad de Conciencia que concede el Parlamento Europeo, explicó que la huelga general convocada por los grupos opositores se notó en la mayoría de provincias del país.
Los soldados opositores se enfrentaron a las fuerzas leales en Basar al Harir e incendiaron tres tanques Los Comités también informaron de que un gran número de vehículos blindados asaltó las localidades de Bab al Balad, Al Marbet y los barrios de Al Frayeh y Al Arabayin, en la ciudad de Hama, capital de la provincia del mismo nombre, disparando contra los civiles mientras aviones de combate sobrevolaban la zona.
En Tafas, en la provincia de de Deraa, un gran número de matones leales al régimen recorrieron la población para forzar la vuelta al trabajo de quienes participaron en la protesta.
Acompañados de las fuerzas de seguridad, los matones irrumpieron en tiendas, rompieron sus puertas y las saquearon, mientras se producían enfrentamientos entre las tropas del régimen y soldados desertores, aseguraron los Comités.
Según el Observatorio sirio de Derechos Humanos, con sede en Londres, se registraron fuertes enfrentamientos entre el Ejército leal al presidente, Bachar Al Asad, y soldados desertores, que incendiaron tres tanques, en la localidad de Basar al Harir, también en Deraa.
Las fuerzas gubernamentales mataron a un número aún indeterminado de personas y confiscaron dos vehículos y diversos artefactos explosivos.
Ninguna de estas informaciones ha podido ser verificada de manera independiente ni confirmada por las propias autoridades, que han impuesto un estricto bloqueo a los periodistas y observadores extranjeros.