Todo comenzó el 7 de octubre de 2023.
Nada importante ocurrió antes de esta fecha.
La historia comenzó el 7 de octubre.
Nunca digan la palabra «ocupación» y eviten usar términos como «apartheid», «segregación» y «asentamientos ilegales».
Eviten escribir sobre el muro. Si lo hacen, prologuen su existencia hablando de terrorismo y seguridad.
Terrorismo y seguridad son palabras muy importantes. Utilícenlas mucho en referencia a los palestinos.
Recuerden a su audiencia que Palestina es una situación «complicada».
Eviten la palabra «genocidio», por razones legales y técnicas, por supuesto.
Si tienen que usar la palabra, pónganla entre comillas.
No describan la escalada de hostilidad israelí como un asalto a la población de Gaza.
En su lugar, utilicen palabras como «guerra» y «conflicto», porque así es más fácil evitar la palabra con «genocidio».
Cuando informen sobre los muertos, utilicen siempre la voz pasiva y no mencionen cómo fueron asesinados ni por quién.
En la medida de lo posible, recuerden a sus lectores el 7 de octubre.
Cuando escriban sobre los palestinos, no olviden centrarse en los sentimientos israelíes. Aunque el ejército israelí esté lanzando bombas y matando palestinos, la verdadera historia es la persecución de los israelíes tras el 7 de octubre.
Eviten complicarlo todo aún más señalando que el antisemitismo es un invento europeo.
Escribir sobre Palestina implica sobre todo escribir sobre Hamás.
Escribir sobre Hamás es casi tan importante como escribir sobre el 7 de octubre.
Hamás es una persona, una cosa, un monstruo, un fantasma.
Hamás está en todos los hogares.
Hamás está en los túneles y en los hospitales.
Hamás está en las tiendas de campaña durmiendo junto a pacientes en sillas de ruedas.
Hamás está en ambulancias achicharradas con paramédicos dentro.
Hamás se infiltró en World Food Kitchen y en todos los comedores de beneficencia y escuelas; incluso las almas de los niños están infiltradas por Hamás.

El atentado del 7 de octubre de Hamás puede describirse de cualquiera de las siguientes maneras:
– horrible
– brutal
– espantoso
– asesino
– aterrador
– atroz
– desgarrador
– gráfico
– espeluznante
Por otro lado, cuando se escribe sobre ataques a palestinos, no se deben utilizar adjetivos.
Es mejor escribir simplemente algo como «Más de 90 muertos en ataques a Gaza».
No querrán que los lectores piensen que están tomando partido.
Cuando escriban sobre Palestina, no dejen que los hechos se interpongan en el camino de contar una buena historia. Para ello, ignoren las fuentes palestinas. Pueden ser tendenciosas.
Por otro lado, el ejército israelí es una fuente de información muy creíble.
Si el ejército israelí dice que no pasó nada, es que no pasó nada.
Cuando el ejército afirma que sus tropas no violaron a mujeres palestinas ni utilizaron a civiles como escudos humanos, ni dispararon a niños o a periodistas en la cabeza con armas de francotirador, sigan publicando sus desmentidos sin hacer comentarios.
Vincular a los países que financian armas con los ejércitos que las utilizan fomenta la transparencia.
Así, cuando escriban sobre los ataques a Tel Aviv, es importante mencionar que los misiles fueron disparados por Hizbolá, con el apoyo de Irán.
Hagan lo mismo cuando escriban sobre los hutíes.
No sigan los mismos protocolos cuando se trate de Israel.
El ejército israelí, respaldado por Estados Unidos, toma sus propias decisiones sobre cuándo lanzar bombas estadounidenses y británicas.
Cuando hablen de comunidades musulmanas, lancen frases como «semillero de terroristas» y «simpatizantes de Hamás». Esto funciona incluso aunque esas comunidades estén en el Reino Unido o en Estados Unidos.
Demonicen repetidamente a las personas que protestan pacíficamente por Palestina.
Céntrense en las voces de las personas que viven en países occidentales y que se sienten inseguras cuando oyen la frase «del río al mar».
No pidan a sus lectores que imaginen lo inseguros que se sienten los niños que realmente viven, están heridos y mueren en Gaza y Cisjordania.
No les pidan que piensen si las madres se sienten seguras cuando empiezan el parto.
No escriban ni un solo párrafo preguntando si los padres que entierran a sus hijos tienen derecho a sentirse inseguros en Gaza.
Cuando escriban sobre Palestina, intenten no hacer zoom en historias individuales ni escriban sobre los detalles íntimos de la vida de la gente. Concéntrense en los militantes de Hamás.
De hecho, cuando escriban sobre Palestina, intenten no entrevistar a palestinos en absoluto. Podrían ser de Hamás o simpatizantes de Hamás.
Si tienen que entrevistar a un palestino, empiecen siempre pidiéndole que condene el 7 de octubre.
Después, asegúrense de pedirles que confirmen que Israel tiene derecho a existir.
Hagan las mismas preguntas capciosas a cualquiera que parezca árabe, musulmán o que parezca simpatizar con los palestinos.
A veces les devolverán la pregunta y les preguntarán si creen que Palestina tiene derecho a existir. No hagan caso de este tipo de preguntas, porque sólo les traerán problemas.
Cuando todo lo demás falle, recuerden:
Todo comienza el 7 de octubre de 2023.
Nada importante sucedió antes de esta fecha.
La historia comenzó el 7 de octubre.
Sisonke Msimang es escritora sudafricana y autora de «Always Another Country: a Memoir of Exile and Home» (2017) y «The Resurrection of Winnie Mandela» (2018). Pueden encontrar su página en «It Is Brave to Be Involved».
Texto en inglés: The Intercept, traducido por Sinfo Fernández.
Fuente: https://vocesdelmundoes.com/2025/05/27/como-escribir-sobre-palestina/