Estimado Uri, Habitualmente me encantan sus artículos, pero en » Con Amigos como Estos» hay una ausencia de comprensión de lo que está pasando en los Estados Unidos. El AIPAC y los neoconservadores están profundamente unidos a Israel y a la agenda sionista para dividir y conquistar el Oriente Próximo. Ellos, a pesar de todos los argumentos racionales en sentido contrario, forjan las mentiras para esconder la verdad: que Iraq no tenía armas de destrucción masiva que pudieran dañar a los EE.UU.. La implicación de Israel también fue ocultada cuando el supuesto «Nuevo Iraq» fabricó una autodenominada bandera iraquí que era un duplicado de la israelí salvo en la substitución de la Estrella de David por una media luna azul pálido. Si mira hacia atrás, ahí fue cuando se desató el infierno. La insurgencia iraquí tuvo la clara evidencia de que si no luchaban endemoniadamente sufrirían también el mismo destino que los palestinos. Pero por supuesto, el petróleo también está en el corazón de la mezcla para los Estados Unidos, así como para Israel, del mismo modo que para la insurgencia que cree que los recursos iraquíes pertenecen a los iraquíes. Uri, los iraquíes quieren recuperar su país.

Las personas que han observado el AIPAC y a otras organizaciones por el estilo, el crecimiento de los neoconservadores y él fenómeno de los Cristianos Sionistas a lo largo de los años y que están alarmados, no son antisemitas como usted sugiere sino simplemente inteligentes. Muchos tienen también sangre Ashkenazi corriendo por sus venas. Algunos son miembros de sinagogas locales. Eso no los hace abominables sino astutos.

Uri, nosotros los estadounidenses queremos respaldar a nuestro país. Tenemos una constitución ( a diferencia de Israel) y la mayoría de nosotros realmente creemos que Todos los Hombres han sido Creados Igual; que ninguna raza, credo, sexo es superior a otro. Israel, afrontémoselo, es tan racista como cualquier nación de la tierra. Los caucásicos sionistas europeos blancos que gobiernan su país odian a los semitas que pretenden ser.

Estados Unidos América también adopta «la separación de iglesia y estado» como principio para el mantenimiento de derechos humanos básicos e Israel no lo hace, ni los neo-conservadores o sus simpatizantes cristianos sionistas, ni la Administración Bush. Muchos de nosotros, una vez, fuimos verdaderos creyentes en Israel pero nuestros ojos se han abierto y, francamente, lo estrafalario de su país revuelve nuestros estómagos. Muchos de nosotros tememos que cuando nuestros líderes doblan las rodillas ante los líderes israelíes, también somos cada vez más fascistas en nuestra política exterior en el modo en que multiplica el encarcelamiento y la represalia de toda Palestina. Es aterrador observar la delgada línea que separa los programas Nazis y Sionistas.

Algunos de nosotros hemos visitado Palestina y hemos dado testimonio de primera mano de lo que se está haciendo. Sí, yo he estado de pie en el apartamento empapado con la sangre de unos activistas por la paz que fueron asesinados brutalmente por una gentuza de las IDF. Desearía que ese nivel de bestialidad fuera raro pero desgraciadamente es común. Se han encarcelado demasiados palestinos moderados, se han torturado y han sido muertos por las fuerzas israelíes y, permítanos no olvidar a la legión de niños que ha sido abatidos a tiros, a los francotiradores emboscados y tanques que han causado estragos y arruinado escuelas de secundaria, etc etc. etc.. Estos métodos se usan para desestabilizar un país, para crear, sin una provocación previa, un estrago constante.

Los llamados terroristas palestinos son creados en contestación a la represalia incesante de Palestina por Israel. Todavía Israel usa la cortina de humo de la «víctima eterna» cuando procede a todo gas con helicópteros de ataque y aviones de combate, con mísiles guiados y bombas sonoras, con el racista Muro del Apartheid, con el robo de tierras de cultivo palestinas y de sus recursos hídricos. Israel profana y marca con una cicatriz la tierra que fue conservada durante miles de años por sus pueblos indígenas. La basura residencial, industrial envenena el suelo y purga los acuíferos, del mismo modo que los poderes curativos de la Tierra Santa y su legado espiritual – judaísmo, cristiandad e Islam – son mancillados.

Uri, yo sé que usted protesta, habla en voz alta y escribe maravillosos artículos de pensamiento provocador sobre las actividades horrendas de Israel. Pero por favor no nos diga que somos antisemitas si nosotros también advertimos los incesantes crímenes contra la humanidad que, hoy y siempre, han sido política israelí. Somos conocedores del hecho que las historias reales que tienen lugar en Palestina y en los árabes del interior de Israel raramente se mencionan en la prensa estadounidense, predominantemente de propiedad y control judío a menos que de algún modo se resalten las palabras, Terroristas Palestinos, en el artículo. Hoy, vemos a iconos de los medios de comunicación como Charlie Rose que están de acuerdo con que Sharon es un Hombre de Paz (disculpe si vómito) y declarando peyorativamente que los «palestinos nunca cambiarán». Eso es una mentira. Los palestinos han cambiado. Ellos han cambiado de una sociedad próspera, muy educada que atesoró la Tierra Santa que cultivaba y los santos lugares que conservaba, a una que está bajo la bota de Israel; violada, robada, torturada, étnicamente limpiada y masacrada a voluntad de Israel.

¿Cuánto tiempo duró el holocausto? ¿Doce, quizá trece años? Por favor no hable de miles de años. Mi familia Ashkenazi en Europa era muy culta y próspera, pero afortunadamente salió mucho tiempo antes que la toma de medidas duras de los nazis comenzara. En cuanto al legado católico romano de crueldad despótica los judíos no fueron los únicos, los Papas torturaron, quemaron y expulsaron también a cristianos «herejes» y a musulmanes. Pero eso fue hace siglos, durante la edad media. La mayoría de los pueblos han evolucionado más allá del trauma.

Así, ¿ por qué han tenido, singularmente, los palestinos que sufrir? ¿No han sido seis décadas de tortura un tiempo bastante largo para redimir los pecados de Europa? Israel es notorio en su deseo de desestabilizar el Oriente Próximo, temiendo que una región próspera y unida pudiera destruirlo. Por favor no me riña a mí o mis amigos, a millones; yo no me he encontrado a quién reconozca esto. Esto no es ningún antisemitismo, sino enfrentarse a los hechos. Si usted entra en una región como un enemigo, la gente le responde a usted como un enemigo. Ésta no requiere ninguna ciencia.

El Plan de la Partición de 1947 del que Israel parte su demanda de legitimidad, no permitía el traslado de poblaciones de los nuevos estados. Todavía se han torturado palestinos, se han desahuciado y se han matado durante casi 60 años; las leyes racistas como las Ley de Ausentes de 1948 declarando ausentes a todos los árabes de sus tierras y propiedades incluso cuando estaban en cama en sus casas. Tal es la demanda que Israel tiene sobre la tierra – el truco de la demanda de un abogado – que ECHARON A LOS PALESTINOS AL MAR en Jaffa, en Haifa y otras poblaciones marítimas. Vea, Hamas habla bravuconamente pero no tiene la capacidad de ejecutar su amenaza; de arrojar a los israelíes a la mar. La amenaza de Hamas es un espejo, una imagen, que refleja lo que Israel ha hecho al pueblo que Hamas ha jurado proteger. ¿Es por lo qué Israel tiene tanto miedo?

Israel teme el desquite porque Israel sabe en su corazón y en su alma lo que ha hecho. Si Israel quiere paz, entonces debe abrazar los derechos humanos fundamentales; adoptar lo mejor y más luminoso del judaísmo y de todas las otras religiones respetables y responsables – la rectitud, civilismo y la persecución del bien común, no el horror.

Si Israel quiere seguridad entonces debe convertirse en una «Democracia Constitucional» que saque de raíz todas sus humillantes leyes racistas. Israel debe reconocer y acatar las leyes internacionales y declarar clara y orgullosamente lo que ello simboliza, incluso la restitución a los desposeídos de Palestina. Israel también debe ofrecer una disculpa sincera por sus crímenes. Hasta tal tiempo, Palestina no tendrá nunca un compañero en la paz y la reconciliación no será posible. Hoy, los hechos sobre el terreno en Israel y Palestina son todos una obviedad. La agenda no tan oculta de Israel, respaldada por dinero estadounidense, es tragarse Palestina entera y limpiar étnicamente todo aquello que pueda, mientras mantiene al resto de la población en las celdas de retención del Muro Racista del Apartheid, para ser torturada y embrutecida, famélica y deshidratada hasta que se pudra, como los millones de la diáspora palestina salidos para pudrirse en los campos de refugiados tan cerca, y, no obstante, tan lejos.